Yami Sennen, un oficial de Tokio, fue transferido por su superior a una pequeña ciudad llamada Domino por la gran tasa de delincuencia en la zona y las grandes bajas que sufren los oficiales de la misma
Como vieron cambié la fractura de la pierna por un esguince, porq se mejor como se trata un esguince por experiencia xD continuemos, será un poco corto pero intentaré hacerlo romántico
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Al día siguiente Yugi volvió al trabajo, se había enterado del robo de ayer y quería comprobar como estaban los oficiales heridos, apenas entrar fue recibido por sus compañeros
-Buenos días-sonrió Yugi-¿Cuáles son los oficiales que llegaron ayer?-preguntó preparándose, su compañera le dió la lista y un nombre le llamó la atención-¿Yami Sennen?-preguntó confundido
-Según sabemos es un oficial que llegó en apoyo desde Tokio-
-Ya veo-Yugi terminó de arreglar su uniforme y fue a darle una visita a los oficiales, fue con todos y por último fue con el oficial de Tokio-Hola Yusei-sonrió el tricolor
-Hola Yugi-saludó el azabache-¿Dando una vuelta?-
-Así es-sonrió-Quiero estar al tanto, seré cirujano pero también tengo conocimiento en otras ramas de la medicina también por mi familia, y a decir verdad el hospital está un poco desorganizado con tanto caso que llega diariamente desde que se abrió-
-Tienes razón, tu familia está llena de médicos de todo tipo, y supongo que es problema de todo hospital nuevo-sonrió el azabache-Solo no te sobreesfuerces, bueno te dejo seguir-sin más se despidió y se fue con unos compañeros
Yugi sonrió y siguió su camino, tomó el informe del oficial y entró en la habitación leyendo el informe después de pedir permisos-Yami Sennen ¿no?-dijo Yugi al entrar-Soy Yugi Muto, vine a ver cómo seguias, según esto dos heridas de bala y un esguince antiguo-
-Así es-dijo Yami acomodándose en la camilla, pero soltó un pequeño quejido
Ambos se miraron y el tiempo se detuvo, rojo y amatista se cruzaban mirandose, el corazón de ambos empezaron a latir al mismo tiempo con la misma intensidad, Yugi se sonrojó levemente y se acercó al oficial que no le quitaba la vista de encima
-Así que... ¿Vienes desde Tokio?-dijo interesado
-Así es, me mandaron el apoyo-sonrió el oji carmín-La misión fue un poco difícil pero me sirve de experiencia, lo bueno es que logramos detener a los culpables-
-Seguro fue un infierno-suspiró Yugi
Siguieron hablando por un tiempo para conocerse, tenían mucho en común, Yami no quitaba la vista del oji amatista, pero Yugi no se sentía incómodo, quería llamar la atención de Yami
-Debe ser complicado ser policía y ser enviado aquí-dijo Yugi
-Te acostumbras con el tiempo-Yami levantó los hombros restándole importancia, pero hizo una leve mueca de dolor-Tokio antes estaba así, pero logramos que todo estuviera tranquilo-sonrió
