🌺ROSA🌺 (Libro #2🌹)

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Los recién casados bajaron del auto y caminaron tomados de la mano, llegaron a la puerta de la gran casa, por fuera era hermosa, un gran jardín con flores de distintos colores, una cochera para dos autos, la casa color rosa era perfecta por fuera.

Jin saco las llaves del bolso de su pantalón y se las entregó a su esposa, ella, al ver las llaves, sonrió, estas tenían una replica exacta de la casa en el llavero y un corazón rosa también las adornaba.

- Hagámoslo juntos – pidió con una sonrisa y tomo las llaves

Ella introdujo la llave y su esposo coloco su mano encima de la de ella y juntos giraron esa llave para que la puerta se abriera, el olor a flores inundo sus fosas nasales, Seokjin ya se podía ver llegando a casa después de un largo día de trabajo he inhalar ese aroma dulce.

Al entrar, todo era tan lindo, todo acomodado perfectamente, una sala grande con unos sillones en color gris y cojines color rosa que servían de adorno, una pantalla colgada de una de las paredes, una mesita de centro de puro cristal con un libro en el centro, un comedor blanco con sus sillas grises y cojines rosas y unas flores en el centro de la mesa, las escaleras eran preciosas, con su pasamanos color blanco y los barrotes en un rosa palo que le daban un aspecto hermoso, como si Barbie viviera allí.

- ¿Vamos a la cocina?– preguntó Jin, con intenciones de mostrarle toda la casa a su esposa

- ¿Y si mejor tomamos un baño?– propuso su esposa

- ¿Un baño?, No quieres conocer la casa primero –

- No, quiero que tomemos un baño– su mirada reflejaba lo que en realidad quería ella

- Bien, lo que mi princesa pida– se rindió fácil, pues con esa mirada llena de pasión, ¿Quién era él para negarle algo a su esposa y amor de su vida?

Jin camino escaleras arriba tomado de la mano de su esposa y al ya estar arriba, frente a la puerta de la recamara principal y entraron viendo todo, la amplia cama con sus sábanas blancas de seda y sus cojines en forma de corazón , unas enormes puertas con espejo era el closet que estaba frente a la amplia cama y claro está, la puerta color blanco daba al baño.

Seokjin abrió la puerta y puso a llenar la tina en lo que Fer se quitaba la ropa, agrego un poco de sales marinas que les regaló la señora Kim y una bomba de aroma a rosas.

Seokjin había mandado a decorar el baño, miles de pétalos de rosas estaban esparcidos por todos lados, unas copas, un plato con fresas con chocolates y una botella de vino rosado, todo para pasar una agradable tarde.

Sabia que a su esposa le encantaban esos pequeños detalles, todas las cosas cursis y dulces, a ella la volvían loca, y a él le encantaba consentirla en todos los aspectos posibles.

Era su princesa, el amor de su vida y ahora su esposa y su deber era darle todo lo que a ella la hiciera feliz, no importaba lo que le pidiera, él le diría si a todo menos al divorcio.

O al menos eso era lo que pensaba ahora.

Porque todo cambia, la gente cambia siempre.

La vida es como una rueda de la fortuna, unas veces estas arriba disfrutando de la hermosa vista y con el are fresco acariciando tu cara, pero otras veces estas abajo, viendo la multitud de personas acumularse en el juego para subir y eso es tan abrumador.

Y una vez que ambos estuvieron sin ropa, se metieron a la tina, Jin fue el primero en entrar, le tendió la mano a Fer para ayudarle a entrar y no resbalara, se sentó dándole la espalda a su esposo y se recargo en su pecho, sintiendo todo el amor que Seokjin le transmitía en forma de caricias en su vientre

Estuvieron así por un rato, en un silencio cómodo, mientras Seokjin repartía suaves caricias por todo su cuerpo, luego conversaron de diversas cosas, del como les estaban llegando a la cima con sus libros y restaurante y metas a futuro, Fer estiró su mano para tomar su celular y sacar una foto de ellos en la tina, más tarde la pondría en un cuadro.

- ¿Cómo te está yendo con el libro ?– preguntó Jin acariciando el vientre de su esposa

- Bien, Nam dice que está siendo un éxito– comento y sonrió al sentir como el cuerpo de su esposo se tensaba detrás de ella al escuchar el nombre de su manager - además de que ya tengo mis días ocupados después de nuestra luna de miel en casa - sonrió

Ninguno de los había querido salir de luna de miel, tenían un sin fin de cosas que hacer, un libro que escribir, terminar de decorar la casa, acomodar los regalos recibidos y la apertura de un nuevo restaurante.

- Me alegra saber que tus sueños se están cumpliendo, mi amor– dejo un beso en el cuello de su esposa

- Y a mí me da gusto que por fin tu restaurante está creciendo, juntos estamos creciendo – se giro para poder sentarse en el regazo de su esposo y así poder besarlo con pasión

Todo era tan bello, tan pacífico, tan lleno de amor, se entregaron una vez más en esa tina de baño, dando la bienvenida a una nueva etapa juntos.

Habían dejado atras su etapa de novios, la más bonita, donde todo es amor y corazones volando por todos lados, para entrar en una nueva etapa y escribir su propia historia, donde sus papás ya no estarían incluidos como los protagonistas, no, esta vez ellos tendrían que resolver sus problemas hablando, o en la cama, como ellos quisieran.

Una etapa que al igual que el noviazgo, es bonita, los primeros años, porque todo es miel sobre hojuelas, todo es amor, besos y caricias, pero toda historia bonita tiene sus momentos malos, toda serie o libro tiene su drama, todo arcoíris siempre tuvo una tormenta, y toda luz pierde su brillo para darle paso a la oscuridad.

Y todos tenemos formas diferentes de resolver nuestro drama, nuestra tormenta y salir de la oscuridad, algunos luchan hasta salir de ello, otros ni siquiera se esfuerzan en internar algo que saben que van a perder, y otros lo intentan, aunque a medio camino deciden tirar la toalla y dejarse consumir por sus demonios.

O simplemente rendirse y seguir con su vida, darle una nueva luz.

Porque no todo en la vida es color de Rosa, no siempre esta lleno de arcoíris, corazones volando o unicornios de colores.

Y eso Fernanda lo descubriría en unos años mas.

Pero por ahora disfrutaría de las mieles que su esposo le ofrecía, disfrutaría de besos y caricias que son solo de ella.

Porque esta era su feliz historia rosa.

Porque este era su feliz principio y final.

Sin importarle que le esperaba en unos años mas, esta era su historia y la disfrutarían al máximo, entregándose en cualquier parte de la casa, su casa.

Fin..........

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Este es el fin de una historia, pero el comienzo de otra

Que tu principio no determine tu final

les amo y gracias por todo el apoyo brindado

nos vemos en 30 DÍAS Vol#2