Si hay algo que aún en la actualidad no a progresado en la sociedad coreana, es el machismo. Por mucho que avances los años y las nuevas mentalidades florezcan la comunidad sigue manteniendo dicha característica que a sido presente durante muchas generaciones. El hombre debía ser el encargado de mantener un hogar, el hombre era quien pedía salir primero, el hombre era el más fuerte, el hombre era quien se mostraba rudo, el hombre aquí, el hombre allá.Kim Seokjin nunca estuvo de acuerdo con aquella mentalidad, al ser pequeño nunca se le permitió jugar a cocinar o a ser doctor aunque así lo quisiese, tampoco se le permitió llorar cuando caía o estar triste por peleas con sus amiguitos. Su padre se encargó de hacerle ver lo que significa ser un hombre de verdad. Con sus 19 años cumplidos sabía de sobra que todo aquello no era cierto, sabía que podía llorar si sentía mal y que podía usar una prenda color rosa si quería. Sabía que ir a la peluquería a arreglar su cabello no lo hacía menos hombre, tampoco leer novelas o escuchar cierto tipo de música. Lamentablemente aquellas cosas tan normales eran un gran problema para su padre, con quién solía pelear casi a diario.
Cuando Seokjin ingresó a la preparatoria comenzó a pensar en qué era lo que quería hacer con su vida, quizás podría ser un buen chef o un gran médico, aún no estaba del todo seguro, pero habían varias ideas en su mente que estarían rondando durante esos meses.
Cuando el segundo año de preparatoria llegó su instituto organizó un viaje estudiantil en donde los alumnos visitarían distintas universidades para poder informarse sobre las carreras, así tendrían una idea de a lo que podrían aspirar al momento de estudiar. Fue así como Seokjin y su salón visitaron la universidad nacional de Seúl.
Recorrieron cada edifico de la facultad, ingresaron a salones especiales y pudieron ver cómo los estudiantes de distintos años trabajaban en sus proyectos.
Su edifico favorito fue el departamento de medicina, cada uno de los salones tanto de clases normales como de prácticas estaban equipados con material de alta calidad, uno de los que mas llamó su atención fue el salón en donde se simulaba trabajar con un cadaver para llevar a cabo una autopsia.Se les asignó un salón en donde recibirían una charla por parte de los mismos estudiantes, cinco chicos se pararon frente a ellos, todos estos vestían sus batas y uniformes médicos, explicándoles así su área y en qué consistía.
Entre los cinco chicos había alguien que llamó su atención en particular, una chica de cabello oscuro que llevaba gafas, parecía un tanto mayor a diferencia del resto y, a pesar de no tener nada en especial, llamó la atención de Seokjin apenas la vió._ Hola a todos, mi nombre es Oh Yeojim, tengo 28 años de edad y soy estudiante en el área de salud mental - explicó la chica presentándose - cómo la mayoría de ustedes sabe la salud mental es el área medica que se dedica a estudiar la mente, las emociones y el estado psicológico de una persona. Es una parte fundamental de la medicina aunque no exista tanta conciencia por parte de las personas. Acá en la universidad existe la especialidad de psicología y psiquiatría, las cuales se pueden convalidar, de hecho yo me encuentro estudiando psiquiatría luego de ya haberme titulado de psicología
Si estudiar en la universidad era algo difícil, tener doble título era algo casi imposible para la mayor parte de estudiantes, incluso los más aplicados se sentían satisfechos tras terminar una carrera, pero ella no, ella había ido por más, y aquello había maravillado a Seokjin.
La mujer frente a sus ojos era sumamente inteligente, hablaba de su carrera con una certeza impecable, manejaba cada tema a la perfección. Luego de responder algunas dudas de otros estudiantes la chica abandonó la sala, disculpándose y explicando que debía volver a clases. Seokjin se escabulló entre sus compañeros para poder ir tras ella, pero no lo logró, su maestro a cargo no le dejó salir del salón, y lastimosamente la perdió de vista.
ESTÁS LEYENDO
𝘊𝘰𝘶𝘯𝘵𝘪𝘯𝘨 𝘛𝘪𝘮𝘦 시을세다 | 𝘒𝘴𝘫
FanfictionOh Yeojim es una mujer correcta, estricta he independiente que vive preocupada por lo rápido que corre el tiempo, contando los minutos, horas y segundos en todo lo que hace. Siendo una estudiante de psiquiatría a punto de graduarse llega a hacer su...