Heart to Heart (Swanqueen) (AU)

Capítulo 12

Inicialmente, no quería decirles a sus padres a dónde se dirigía, pero era un poco difícil llegar a la puerta sin ser detectada cuando tenía que pasar por la sala de estar donde David y Mary Margret estaban abrazados y viendo sus programas nocturnos juntos. Entonces, ella había mencionado el autocine, que aprobaron de inmediato y pensaron que era una idea fantástica para que ella saliera de la casa, pero es posible que haya mentido sobre con quién iba.

Ruby se deslizó de su lengua por reflejo.

Realmente no hay ninguna razón por la que no pueda encontrarse con un amigo para ver una película, pero su madre ya ha estado insistiendo en el tema y buscando más información sobre Regina. Realmente entre su madre y Ruby, es como si tuviera una manada de lobos olfateando constantemente a su alrededor en busca de más información, listas para morder a cualquiera que se acerque demasiado y posiblemente sea una amenaza. Así que decidió decir una mentira piadosa para saltarse el interrogatorio de esta noche.

Durante todo el viaje a Brooklyn, ella ha sido una bola de energía zumbante. Tal vez sea la anticipación de hacer algo diferente y escapar de los confines de la casa de sus padres. Excepto que hay una vocecita, susurrando desde los latidos de su corazón que le informan que está encantada de ver a Regina una vez más. Sin embargo, cierra eso rápidamente y se dice a sí misma que realmente, realmente ama Volver al futuro, que el autocine está mostrando los tres esta noche. Lo que significa que probablemente no llegará a casa hasta cerca de las cuatro de la mañana, pero vale la pena. Ella necesita una salida nocturna.

"Toma el siguiente giro a la derecha".

Sus ojos se deslizan hacia su teléfono para comprobar el GPS justo antes de seguir las instrucciones. Por supuesto, alguien con tanta clase y sofisticación como Regina, debería haber sospechado que estaba en el corazón de Williamsburg, el lugar más de moda en Brooklyn. Rápidamente encuentra un lugar frente a la pieza arquitectónica más lujosa que Emma haya visto jamás. La casa es una obra maestra gigante de las ventanas de vidrio y ya está ansiosa por saber cuán elegante, moderna y exagerada será la decoración de Regina.

Rápidamente sale de su auto, se guarda las llaves en el bolsillo y corre hacia el edificio, fingiendo no darse cuenta de que este lugar es una casa de más de un millón de dólares. Solo puede imaginar por cuánto vendió Regina su bufete de abogados si ese negocio pudiera comprar un lugar como este.

Ella juega con sus llaves dentro de su sudadera con capucha mientras su otra mano toca el timbre. No sabe por qué esto se siente como una primera cita, lo cual es absolutamente absurdo, solo son amigas, pero así es exactamente como se sienten sus nervios en este momento.  Rápidamente mueve su cuello de izquierda a derecha para aflojar la tensión que se está formando y ahí es cuando la puerta se abre.

Ahí va su maldito corazón otra vez, saltando en su pecho como un cachorro que extraña a su dueño todo el maldito día mientras ella estaba en el trabajo. Y está convencida de que este corazón recuerda la presencia de esta mujer.

"Emma", y es un tono burlón acompañado de una sonrisa astuta y está segura de que su corazón está a punto de explotar en su pecho y saltar hacia esta hermosa morena con los brazos abiertos.

"Hola."

"Adelante", ofrece Regina cortésmente, haciéndose a un lado y permitiéndole el acceso a Emma. "Ya casi estoy lista. Pensé que podría empacar algunos refrigerios saludables para nosotras mientras vemos las películas".