- Te quiero, Sana. Desde el principio lo he
hecho.El corazón de Sana se detuvo y sintió ganas de llorar. No sabía si de alivio, o si de miedo, de sorpresa, felicidad o pura confusión. Sus ojos se llenaron de lágrimas y entró en pánico cuando una de ellas se derramó sobre el brazo de Jihyo, lo que ella sintió y se tensó al instante. Se movió en la cama para quedar con el rostro frente a la menor, y su gesto cambió por completo al verla llorar.
- Yo... yo pensé que te habías dormido.... perdóname, yo no...
Sana no entendía por qué lloraba, y se detestaba por estar asustando a Jihyo. Tal vez lo que pasaba era que lo que su corazón siempre quiso era real y estaba ahora frente a ella, y todos los sentimientos que guardó durante esos años salieron a la vez en forma de lágrimas. Jihyo se veía realmente angustiada, y Sana logró sonreír débilmente y pasarse una mano por los ojos.
-Sana, perdón...
La castaña no la dejó terminar de explicarse, tomó su rostro con ambas manos y la besó con fuerza y pasión. No pudo mantenerlo durante mucho rato ya que constantemente cortaba el beso para sonreír, y Jihyo estaba tan confundida como complacida con esa repentina reacción. Sana dejó cortos picos en sus labios mientras pensaba las palabras ideales para explicarle que lo que acaba de decir era lo mejor que había escuchado en toda su vida. No las encontró, así que solo dijo lo primero que le salió del corazón.
- Eres mi eterno sueño adolescente- suspiró, temblaba mientras hablaba y Jihyo tomó su mano para darle tranquilidad-. Siempre lo has sido. Siempre tú- un beso más-. Te quiero desde que te apareciste en la puerta de mi casa con esa rosa y esa espantosa torta que me supo a gloria solo porque me la diste tú- rio contra los labios contrarios, y la otra chica la imito.
- Tú... ¿de verdad me quieres?- Jihyo no podia asimilar lo que estaba escuchando. Le parecía demasiado perfecto para ser verdad.
-Más de lo que puedo procesar- susurró.
-Perdón por haberme ido. Pero te prometo que en el fondo siempre estuviste en mi corazón.
- No sabes lo asustada que estuve cuando descubrí que no podía estar con nadie más porque todo lo comparaba contigo, y nada ni nadie era lo suficientemente bueno.
Jihyo pasó su brazo por la delgada cintura y la pegó más a ella. En ese momento, desnudas en cuerpo y corazón, ninguna podía entender por completo lo que estaba pasando, y solo dejaban que sus sentimientos salgan como una cascada luego de tantos años estando reprimidos.
-Yo no quería dejarte, no quería ser solo una aventura para ti, pero pensé que era lo mejor. Te merecías a alguien que se pueda quedar a tu lado, y traté de olvidarte, en serio lo intenté, pero es que no se puede olvidar a alguien como tú. No se puede.
-Oh, Jihyo- sollozó- Te he extrañado tanto.
Escondió su rostro en el cuello de Jihyo y esta la abrazó con más fuerza aún, como si tuviera miedo de perderla si la llegase a soltar.
- Estoy aquí- susurró. -No iré a ninguna
parte.La menor suspiró pesado.
-Fuiste mi primer beso- soltó impulsivamente. No había planeado contárselo, no lo había hecho nunca, pero salió directo de su pecho como si hubiera esperado todos esos años para confesarlo.
-¿Eh?
- Ese día en el salón. Fue mi primer beso.
- Pensé que...
-Me dio vergüenza decirtelo.
- Oh, Dios. No puedo creerlo. De haberlo sabido, lo hubiera hecho mejor -Jihyo se veía genuinamente preocupada, y a Sana le
pareció lo más tierno del mundo.
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𝗧𝗲𝗲𝗻𝗮𝗴𝗲 𝗱𝗿𝗲𝗮𝗺 𖦹 SAHYO
Fanfiction"𝘚𝘢𝘯𝘢 𝘺 𝘑𝘪𝘩𝘺𝘰 𝘧𝘶𝘦𝘳𝘰𝘯 𝘢𝘮𝘪𝘨𝘢𝘴 𝘤𝘰𝘯 𝘥𝘦𝘳𝘦𝘤𝘩𝘰 𝘮𝘶𝘤𝘩𝘰𝘴 𝘢𝘯̃𝘰𝘴 𝘢𝘵𝘳𝘢́𝘴. 𝘊𝘶𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢 𝘭𝘢 𝘰𝘱𝘰𝘳𝘵𝘶𝘯𝘪𝘥𝘢𝘥 𝘥𝘦 𝘷𝘰𝘭𝘷𝘦𝘳𝘴𝘦 𝘢 𝘷𝘦𝘳... 𝘱𝘶𝘦𝘥𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘥𝘦𝘴𝘤𝘶𝘣𝘳𝘢𝘯 𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘶𝘯𝘤𝘢...