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VICTORIA estaba frente a mí, observándome en completo silencio. Yo no sabía qué decir así que solo le di un trago a mi bebida y comencé a moverme al ritmo de la canción. Poco a poco fui ganando más confianza, soltado mis caderas para que tuvieran más libertad.
—Nada mal.
La miré confundida.
—¿Nada mal?— cuestioné con ironía. —Ninguna cuero' en toda su vida va a bailar como yo.
—Pero que engreída me ha salido la nena.— Vicky soltó una risa y se acercó a mí. —Enséñame que tú bailas mejor que todas las huelebichitas de hay aquí.
Eso fue suficiente para que me armara de valor y empezara a moverme como nunca antes. Odiaba que me subestimaran, ella lo sabía perfectamente y por eso me estaba retando.
Victoria me observó durante unos leves segundos, hasta que sentí como sus manos se aferraban fuertemente a mis caderas para luego sentir como mi trasero chocaba contra su pelvis. Era excitante sentir como ella podía seguir mi ritmo y acoplarse con tanta facilidad. Estábamos en una buena sincronía.
—Eso, continúa así.— murmuró en mi oído.
Decidí llevar las cosas más allá. Arregle un poco mi vestido antes de inclinarme hacia adelante y darle una mejor vista de mi cuerpo. Al mismo tiempo me movía de una manera más provocante.
—Maldita sea, estás jugando conmigo.— me agarró por el cuello con un poco de brusquedad y me puso cara a cara con ella. —¿Cuál es tu intención?
—Demostrarte que ninguna de aquí te puede volver loca cómo yo.— sonreí con arrogancia. —Se todas las veces que me has mirado en los conciertos, o las múltiples veces que has intentado tirarme al DM, pero nunca tienes valor.
Su agarre aún se mantenía en mi cuello, haciendo un poco de presión. Mis piernas temblaban un poco por el calor que comenzaba a sentir.
—¿Me espías o que, mami?
—No tengo esa necesida, tú solita te delatas.— dije metiendo mis manos silenciosamente por debajo del hoddie que llevaba. Coloque mis manos en su cintura, sientiendo el calor de su piel. —No soy boba, Victoria.
—Bueno, tan valiente no eres cuando Karol tuvo que empujarte hasta aquí.
—Karol solo me dió un voto de confianza, te tenía en la mira desde hace mucho tiempo.— conteste yo. El alcohol comenzaba a hacer efecto, mi sinceridad era demasiada.
Miko no dijo nada. Solo me escaneo con su mirada, fijándose primeramente en mis labios que ante sus ojos podrían parecer jugosos como una cherry, de esas que tanto le gusta.
Su mirada continuo hasta mi cuello, donde tenía la marca de un beso. Frunció el ceño al notarlo.
—¿Y esto?— cuestionó pasando su dedo pulgar por la zona. Un leve escalofrío recorrió mi espalda al sentir el contacto suave de sus dedos contra mi piel.
—Fue Karol, cuando estábamos bailando.— murmuré.
—En verda' a veces me cuestionó si ustedes solo son amigas. En cada party siempre de andan con una intriga.— refutó aún con el ceño fruncido.
Remojo sus labios con la lengua y luego regresó su mirada hacia mis ojos.
Maldita mujer, como va a hacer eso delante de mí.
—Mami nosotras solo somos panas. Jamás estaría con la jeva de Feid.
Ella aún parecía algo molesta.
—Si mal no recuerdo ustedes se comieron en un after party de Benito.
Me sorprendí por el hecho de que me mencionara tal cosa. Victoria no había saltado aún a la fama en aquel tiempo.
—¿De dónde sacas eso?— cuestioné soltando mi agarre de su cintura.
—Los chismes vuelan rápido.— hizo lo mismo conmigo y se alejó de mi cuello. —Ella será tu amiga y todo, pero ustedes han pasado más allá que de un simple beso en el cuello.
—Eso fue hace tiempo. ¿Cuál es el lío ahora por eso?
El ambiente entre nosotras había cambiado de un momento al otro. La bellaquera se había bajado y ahora era el inicio de un ataque de celos por parte de Victoria.
—Que si tú y yo llevamos tiempo bellaqueando ella no tiene porqué andarte dando besito' en el cuello ni un carajo'.— contestó subiendo un poco el tono de su voz.
—¿Chica que tú habla?— pregunté con ironía. —Cuando tú te andas chingando a Isarel por ahí yo no te ando reclamando nada.
—Tú sabes bien que eso de lo mío con esa modelo es chisme de la gente. Apenas la conozco.— rodó los ojos tomando un trago de su bebida.
—Si claro, apenas la conoces y te la llevaste pa' el concierto de Karol y bailaron juntas. ¡Hasta se besaron!
Ahora la molesta era yo. No entendía como tenía el coraje de reclamarme cuando ella se andaba tirando a las modelitos esas de Instagram.
—Pa' devolverte el favor.— dijo con simpleza.
—Déjame decirte algo, Victoria, cuando pasó lo de Carolina tú no pensabas ni llegar a donde estabas ahora. No me andes sacando trapos de tiempos pasados pa' justificar que te andas chichando a otras por ahi.
Su expresión se relajó y se convirtió en una medio triste.
—No me mires así, Ramirez, cada consecuencia tiene su acto.— me acerqué a ella tomándola por el mentón. —Tú te creíste que podías cogerme de pendeja mientras te comías a la otra, así que no vengas a reclamarme porque yo también tengo derecho a tener otras. Tú y yo no somos nada, todo era placer.
Agarré mi vaso y me fui al otro extremo del VIP con el resto de la combi que andaba. Las cosas no eran tan fáciles como ella misma lo pintaba.
Yo quería regresar a sus brazos, pero me costaba volver a confiar en alguien que me traicionó de la peor manera.
Ok, primero que todo quiero decir que no tengo nada en contra de Isarel. Yo solo utilice su nombre para el capítulo porque es la única jevita que se le conoce a baby Miko. So' no se me quillen que no tengo nada con la nena.
