Kate, una chica que vive con sus padres y su hermano en una de las casas mas viejas de la ciudad, donde suceden cosas inexplicanbles o extraños, pero solo en su cuarto. Desde que tiene memoria esto sucede, pero nadie le cree. Por eso decidio comprar...
No cabe duda de que en mí cuarto, pasan cosas extrañas, cosas que dejarían a cualquiera con la boca abierta o en shock. He tratado de explicarles a mis padres o a mí hermano mayor de los sucesos que ocurren en ella, pero siguen sin creerme. Hasta ahora.
Hace muchos años recuerdo que mí habitación no era como lo es actualmente, era lo que para muchos es normal, pero para mí... era todo una maravilla.
Hoy en día mí habitación es como un cementerio de noche: ruidos inexplicables a todas horas, voces de ultratumba que suenan cuando menos te lo esperas, un aire helado que te recorre la columna vertebral, el sentimiento de ser observado por algún ente inhumano, una energía pesada y unas extrañas sombras que uno ve con el rabillo del ojo, voltea y se esfuman, cómo queriendo no ser vistas, más rápidas que vos cuando olvidaste descongelar el pollo que tu mamá te encargo.-*se caen algunos libros*- VEN, DE ESO HABLO.
Pero hasta aquí llegué, estoy en mí límite, no voy a seguir soportando está pesadilla, me niego. He estado ahorrando para este momento desde hace mucho tiempo, y ahora que me he fijado...TENGO EL DINERO SUFICIENTE PARA COMPRAR UNA CÁMARA. Si no me van a creer por qué no tengo pruebas, ya verán que no les mentía.
Siempre que les decía a mis padres de ir a mí habitación a ver qué pasaba, todos, repito, TODOS los sucesos paranormales desaparecen sin dejar rastro, y mis padres pensaban que eran imaginaciones mías.*Se escucha un leve susurro y Kate inspira para seguir hablando* Cuando les muestre las grabaciones, ya verán que la loca no estaba del todo mal.
Ya fui a comprar la cámara y la voy a dejar grabando está noche, que es cuando las actividades paranormales más ocurren, y más se intensifican. El movimiento de objetos, el sentimiento de rozes o susurros aumenta, y ni hablar de la sensación de ser observada o las sombras, solo que en las noches hasta se pueden escuchar los gemidos de miedo o angustia que sospecho, y con justa razón, que provienen de almas en pena, vagando sin un rumbo fijo.
La cámara:
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Cinco horas después~ Son recién las 10:04pm, y ya instale la cámara, está en la esquina apuntando a mí cama y a mis ventanas, está arriba de mí cajonera:
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*Dos horas después~*
Ya son las 12:37 pm, me voy a ir a dormir, me extraña un poco que no haya ocurrido nada desde que encendí la cámara, aunque a veces sucede esto y de repente suena algo muy fuerte o se mueve algún objeto, no es frecuente pero pasa, como si lo que provoca estos acontecimientos quisiera encontrarte desprevenido y asustarte con algo repentino.
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Hasta aquí está parte, me quedé sin ideas.
Subire la próxima parte la semana que viene, o este Finde, depende que tan ocupada este... :D
