Claro, ¿porqué no?

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Todos se habían ido a dormir excepto Quackity que acababa de despertarse como era de costumbre, fue a la cocina y rebuscó en el refrigerador algo que pudiera comer, normalmente Luzu le dejaba algo para que recalentara realmente agradecía ese gesto.

-¿Quieres que te cocine algo?- La repentina voz que venía de la puerta de la cocina hizo que Quackity diera un salto.

-¡Puta madre Luzu! Casi haces que me cagué del susto pensé que eras un chingado fantasma- Respondió mientras ponía una mano en su pecho como si en verdad hubiera estado a punto de tener un ataque al corazón.

-Lo siento por asustarte Quacks pero no es necesario que me insultes- Suspiro.

Era extraño para Quackity ver a Luzu despierto a esta hora, era uno de los que tenía el mejor horario de sueño junto con Vegetta así que el hecho de que estuviera en la cocina ofreciéndose a prepararle algo era subrealista pero tenía hambre ¿Y quién era para negarse a una deliciosa comida?

-Entonces házme mi comida favorita como compensación- Aprovecho la oportunidad y Luzu asintio ante su pedido.

El chico de cabello negro que llevaba una polera de patitos se sentí para observar como el castaño cocinaba, era un ambiente tranquilo, solo ellos dos compartiendo un rato juntos, así que Quackity sintió que sería buen momento para volver a decirlo.

-Luzu, sal conmigo- Está vez el castaño no se sorprendió. -Se que te voy a gustar-

Y Quackity esperaba un rechazo o que lo tomara como una broma de nuevo, estaba considerando que otra cosa decir cuando Luzu bajo la flama de la estufa y se giro encarando el más bajo.

-Acepto- Ahora el aturdido era Quackity.

Después de esa declaración Luzu se volvió a girar para continuar cocinando por lo que no se percató del gran sonrojo o la mirada ilusionada de Quacks que sentia que estaba en un sueño.

-¿Enserio aceptas?- Necesitaba confirmarlo.

-Uh- Luzu se extraño por la pregunta no pensó que Quackity continuaría con la broma una vez que le siguiera el juego ¿Quizás quería llevarlo más lejos? -Sí, acepto que salgamos-

Y las manos de Quackity jugaron de manera nerviosa entre ellas mientras sentía su corazón acelerado, respiró hondo para calmar sus emociones pues quería parecer lo más maduro posible para Luzu en este momento.

Cuando Luzu termino de cocinar se lo acercó a Quacks y este agradeció la comida, miro al chico comer y sintió que ya se había acabado la broma y que podría descansar en paz.

-Ire a dormír- Aviso mientras se levantaba.

-¡Está bien!- Quackity sonaba más entusiasmado que de costumbre.

Luzu se fue a descansar a su habitación y no sería hasta que se despertara que vería los mensajes de Quackity.

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Quacks:
¡Debes estar dormido pero olvide decirte dónde reunirnos!
Mañana a las 6 pm en el parque

¡Sal conmigo! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora