¿Donde?

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¿Hacia dónde se dirige la vida exactamente?
Soy un insensato de crudas costumbres,
De apagados parpados y rostro tieso,
De tez negra y pensar frívolo,
Sin embargo, no evito cuestionar,
¿Hacía dónde van mis deseos dirigidos?

Desmotivado y motivado,
Quizás la superficialidad del dinero podría anular mi deseo de respuesta,
O quizás...
Cruzado entre piernas en una estasis que dé como placer su respuesta,
Luego de tantas cuestiones y de escribir, ¿Hacia dónde va la vida?
Tal como escribo en cada segundo se va y se extingue más el tiempo que me resta,
Tal como construir o edificar,
Luego de mi la vida no es nada,
Sin mi no habría vida y aun así no estoy tan vivo,
Mientras no sea un cuerpo o ser percibidor en algún sentido de lo que me rodea,
Desconoceré en totalidad la conciencia de mi mismo.

Aun perdido entre nublos,
Puedo percibir la vida en mayor proporción sintiéndote,
Deseando sentir la realidad que tanto ignoramos o hacemos compleja,
La vida está en el hoy que se nos pierde mañana,
Si mi hoy fuese vida estuviese junto a tu cuerpo.

Perdido en mis días y mis noches,
Siguiendo el patrón del entretener y distraer,
Perdiendo la vida y curiosamente de forma entretenida,
Si mi vida fuese mía no esperase para destruirla,
¿Si me perteneciera a mí mismo, haría algo siquiera?

Es cuestionable si realmente hago o hacemos lo que quisiésemos,
Lo que deseo no es más que la construcción ajena de lo que puede ser acariciable o tentador.
Si me perteneciera a mí mismo no conocería la alegría de dos mundos que entrelazan el deseo de brillar y orbitar en fé de algo,
Fé de un mejor mundo o vida, pero de un par en unidad,
Si hiciésemos lo que nos placiera seriamos felices si no implicara arruinar la vaga existencia de un ser ajeno.
Solo quisiera ser el pequeño dios que se nos otorga derecho a ser,
Quizás en un punto la humanidad entre en cuenta,
Quizás cuando no viva,
En siglos o milenios a lo mejor,
Tarde o temprano todos serán pequeños Dioses,
Serán felices sin dañar,
Amarán y serán amados,

No existirá nada,
Pues yo no existiré.

Pesado pensarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora