My Heartbreaker

Capitulo 2

Entré a mi casa y allí se encontraban los dos tortolitos en el sofá, decidí seguir mi camino sin decir nada, porque se iban a armar lo típicos pleitos de siempre

-París, ¿dónde estabas? - me dijo mi hermano levantándose del sofá sobresaltado al verme

-Estaba en el cementerio visitando a nuestros padres, algo que tú no haces muy seguido ¿no? - respondí mientras me dirigía a donde él se encontraba

-Ya te he dicho que no he tenido tiempo para ir a visitarlos-

-Claro pero tienes tiempo para la aborigen esta - respondí señalando a Ashley

-¿Cómo me llamaste imbécil? - preguntó Ashley haciendo una mueca de desprecio hacia mi

-Aborigen, ¿entiendes?, A-BO-RI-GEN - respondí enfurecida y tomando rumbo a mi habitación

Pude sentir como Tobías estallo en risas, Aborigen, que creativa..., sentí un portazo así que supongo que Ashley se fue, es muy típico de ella, se enoja y al otro día esta detrás de mi hermano

Ashley y yo fuimos mejores amigas mucho tiempo, junto con Mad, pero claro Ashley se dejó llevar por el dinero de mi hermano y me cambió por él, luego de varias peleas nos volvimos enemigas o como quieran llamarlo

Escuche los pasos de mi hermano que se dirigían a mi habitación, no le pensaba abrir, digamos que me gusta hacerlo enojar porque cuando nos arreglamos siempre termina dándome las mañas, aparte porque pelear por algo en lo que estuvo relacionada Ashley podrían terminar su relación, ya que yo soy su única mujercita, supongamos que es una de mis ventajas

-París, linda, ¿quieres dejarme entrar? - dijo tocando la puerta delicadamente

-No Tobías, ¿Qué quieres?-

-Vamos nena, soy tu hermano, ábreme la puerta y lo resolveremos - dijo con voz tranquila

-Si claro, ¿y luego volverás a los brazos de Ashley? - respondí, hacerlo enojar era algo difícil, pero me gusta hacer el intento

¿Que carajo? ¿me dejó hablando sola?, No vi señal alguna de que se encontrara del otro lado de la puerta, así que me acerqué y dirigí mi oído a la puerta para saber si seguía ahí

Mientras me encontraba distraída siguiendo los rastros de Tobías sentí unas manos en mi cintura , no entendía nada, esas manos cálidas rodearon y abrazaron mi cintura, empece a sentir cálidos besos en mi cuello, como pequeños mordiscos suaves y delicados, eran tiernos y húmedos

Sus manos me dieron vuelta y provocaron que quedara entre la puerta y ese cuerpo, estaba oscuro y no podía ver de quien se trataba, empecé a recibir esos tiernos y cortos besos en mi labio inferior, sentí como sus labios jugaban con los míos, era el mejor beso que recibí y de la mejor manera, mis manos subieron a su cuello y bajaron lentamente a su abdomen , sentía cada uno de sus cuadraditos, comencé a tocarlos delicadamente; pude sentir que sus labios bajaron a mi cuello a dar cortos y tiernos besos...

-¿Te gusta? - preguntó, esa voz se me hizo muy familiar, lo separe de mi con un empujón y lo miré confundida, maldición era Tobías, el muy bastardo había entrado por la ventana , su terraza quedaba justo al lado de la mia y siempre dejo mi ventana sin seguro, juro que pensé que era un sueño, la mayoría de las veces tengo esos tipos de sueños

-Idiota, ¿estas estúpido? ¿que te sucede? soy tu hermana - le dije mirándolo confundida

-Pero no de sangre - respondió al mismo tiempo que volvía a besarme

-¡Tobías! - le dije separando nuestros labios de nuevo - ¡tienes novia! - le dije casi en susurro, tengo que admitirlo me sorprendí al pensar en Ashley

-Todos sabemos que esta con migo por interés - dijo besándome lentamente, haciendo que un escalofrió corriera por toda mi columna, posó sus manos sobre mi cintura y me apretó a su cuerpo

Me empujó hacia la cama sacándose la remera y subiéndose arriba mio, besándome aun mas apasionadamente,si tan solo me viera Ashley se comería sus palabras, pero aunque quisiera mucho, no podía, no me sentía bien, soy su familia y me hace sentir ¿violada?

-¿Porque paras?, ibas bien - dijo algo agitado y con una sonrisa en su rostro a causa de lo que estaba disfrutando

-Tobías, esto..., esto no esta bien, tu eres mi hermano y yo tu hermana y no esta bien - le dije saliendo de mi habitación algo abrumada