CAPITULO 9

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Es viernes y honestamente no tenía ganas de socializar hoy, salí de mi habitación arreglada y me diriji a Mati

- oye Mati necesito ir por unas cosas al centro, me prestas el RZR o la camioneta - dije

- llevate el que gustes, y con cuidado, cualquier cosa nos marcas vamos a. Estar al pendiente - dijo Mati

Me llevé la camioneta y me diriji al centro, al llegar estacione cerca de la entrada del centro comercial y entre, compré algunas cosas, maquillaje, ropa, skincare entre otras cosas y me subí a la camioneta

Pase a un Starbucks cerca y compré mi bebida, para finalmente dirigirme  a la playa en la zona donde estuve con mis amigos, me mantuve en el vehículo, mientras leía mi libro, tome algunas fotos y subí algunas a mis historias de instagram, después decidí acercarme al mar un rato y meter mis pies en el agua, me senté en la arena y no pude evitar recordar aquella cita con hass

mintras estaba en mis pensamientos sentí que alguien tocó mi hombro

- Ey chica todo bien- dijo un chico detrás de mi, me levanté y solo lo mire- disculpa si te asusté, es que no es muy común que la gente esté sola por aquí te ves muy perdida... soy Joshua - dijo y extendio su mano para saludarme gesto que respondí

- Hola, yo soy Atenea disculpa mi reacción es que me has sorprendido un poco- dije y solté su mano- pensé que en esta zona no venían las personas -

- un gusto Atenea, y si en eso tienes razón por eso me encanta este lugar, solitario y perfecto para estar tranquilos- dijo el

- en algo estamos de acuerdo y es en qué es perfecto para estar tranquilos, y pensar - dije y mire hacia abajo

- supongo que tienes mucho en qué pensar, te parece si nos hacemos compañia y no es necesario que me cuentes - dijo el

- solo un rato porque ya casi debo irme- respondí

Paso un rato y entre risas y juegos y un poco de plática me dijo que su nombre era Joshua Alcántar y al parecer es un año mayor que yo, le gusta tocar la guitarra y pasar tiempo frente a la playa, mientras estábamos sentados en la arena salió la plática

- bueno yo creo que para el amor no hay edad- dijo el

- eso dices cuando son 2 o 3 años de diferencia pero por ejemplo que hay de 7 o 5 años de diferencia - dije

- pues mira, mi mamá por ejemplo tiene 30 y mi papá tiene casi los 37 y llevan una buena relación, y no veo lo malo- respondió

- pongamoslo así por qué ellos ya son adultos, pero que hay de una chica de 19 y un chavo de 23 casi 24- dije

- bueno, eso no suena tan mal- volvió a responder- mira mientras en la relación exista el respeto, la confianza, amor mutuo, de que 50 -50 está bien-

- pero la opinión de la gente, que tal si no reaccionan bien- dije y lleve mi vista hacia el oceano

- pues la verdad creo que la gente no debería meterse en las vidas de los demás, que se enfoquen en ellos, al final de cuentas no les afecta a ellos lo que los demás hagan o dejen de hacer, además la gente que se pone a criticar es por qué lleva una vida triste y necesita enfocarse en otras personas para llenar eso– termino de hablar Joshua y me dejó pensando

- bueno me acabas de dejar pensando demasiado- dije y en eso sonó mi telefono- whoa el tiempo se paso volando, ya debo irme, fue un gusto y gracias- dije y me diriji a la camioneta - oye no gustas que te acerque a tu casa, no quiero dejarte solo-

- no, vivo aquí cerca no te preocupes, cuidate- respondió el pelinegro

Llegó el momento de irme, pero antes nos seguimos en insta para mantener el contacto ya que me cayó bien aquel chico

PROHIBIDO -  𝓟𝓮𝓼𝓸 𝓹𝓵𝓾𝓶𝓪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora