Kalag se acercó a aquella chica pero no le fue fácil pues varios caballeros lo detuvieron, no le fue problema pues traía su hacha grande fue fácil matar uno por uno hasta llegar a la chica la cual estaba en pose de combate para confrontarlo y matarlo, kalag tenía otros planes, cuando se acercó a la chica esta misma lo atacó pero kalag solo evito su golpe mirando a la mujer joven, le quito el casco dejando ver su rostro, ese cabello negro corto y esas puntas blancas, ojos grises, esa piel pálida...
-¿¡Hija!?- kalag dijo con susto no podía creer que aquella mujer era su hija secuestrada hace años su hermoso girasol, su retoño estaba enfrente suyo, solo soltó su hacha mirando su rostro tocando sus mejillas era ella
-no entiendo ¿por qué me llamas hija?-
-tú mi preciada girasol- el solo lloro y la abrazo para luego volver a hablar -perdóname hija mía, fui un descuidado al no estar a tu lado cuando te secuestraron y te arrebataron de mis brazos al igual de los de tu madre-
-...- la chica estaba en shock no podía creer lo que escuchaba, era su hija, la mujer sintió como los brazos de aquel hombre la soltaban para ver su cara con era tapabocas, su piel era poco oscura con algunos rastros de tierra, tenía los ojos grises como ella.
-no entiendo...-
-hija...te secuestraron en una batalla arrebatandome de mis brazos no podrás creer lo cuanto que sufrió tu madre desde tu secuestro...ella estaba muy feliz cuando te vea, porfavor ven conmigo- antes de seguir hablando una flecha cayó frente a él apartándose de su hija, era el rey del reino el cual lanzó la flecha como muestra de advertencia, el solo miró al hombre con odio y miró a su hija por otro momento para darle la espalda e irse de hay desapareciendo entre los enemigos y sus tropas a las cuales les pidió que hicieran retirada, la chica muy confundida entró al reino confundida, hay la esperaba su padre acercándose a ella.
-hija, que te iso ese hombre-
-nada padre...me llamo hija igual- el hombre estaba enojado murmurando algo entre dientes apenas audible para su hija y luego hablar.
-hija no lo escuches si, de seguro lo iso para manipularte- la chica estaba confundida escucho al hombre con una voz, un lenguaje corporal tan sincero y melancolico que no sabia si creerle más a su propio padre o a ese hombre extraño. Horas después ella estaba sentada en una banca sin entender nada, cómo esque ese hombre haya dicho mentiras, en sus ojos podía verse tan sincero y triste ella no podía creer que tratara de manipularla, quería respuestas así que se levantó tomando su capa con algunas cosas en una bolsa poniéndola en su espalda al igual que en su cintura para luego salir sigilosamente del reino, cuando finalmente salió del reino sacó su mapa buscando la manera de ir a su destino, para eso vio huellas algo borrosas en el suelo y las siguió, eran mucha huellas por lo que supo que eran de él enemigo, pasaron horas hasta que amaneció, decidió darse un descanso viendo el mapa de nuevo buscando la manera de ubicar el reino enemigo, pasaron horas, aveces caminaba mientras seguía huellas y rastros de sangre, madera destruida, pedazos de tela, lugares de campamento etc. Siguió su camino en la noche mientras la luna estaba en su face de luna llena, miró hacia el norte viendo luz, rápidamente empezó a correr viendo su destino lejos pero a la vez cerca...
Perdon por inactividad se que prometí nuevo contenido pero empecé a dudar muchas cosas, problemas personales etc. Pero tratare de volver a hacer episodios
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el amor de la guerra y la muerte
Romanceuna belicista y su compañero hitokiri se aman pero su amor es complicado...