El inició de todo.

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Su alfa prefirió por delante a otro omega que a él, él que engendro a su cachorro, él que estaba a nada de recibir su marca, él que creía ser su destinado y amor de su vida.

En cambio termino con el corazón roto y un lazo amoroso recién lastimado, dejándolo sin esperanzas de volver amar. No a ningún alfa, sino que solamente a su hermosa y única cachorra, Mayday.

—¿Nadie más puede cuidar a tu hija?.

Puede que la pregunta sea grotesca pero Miguel no tenía intenciones desconcertantes para dirigirse a él, intento cuestionar de una manera suave y noble. Raro de su parte.

—¿Porqué la dejaría con otro si yo la puedo cuidar?— Peter respondió con otra pregunta, jugando con la tierna nariz de su pequeña al hacer un movimiento de cabeza y que así la punta de sus narices apenas choquen.

O'Hara los miraba desde lejos en la plataforma que se encargaba de darle una entrada dramática cuando tenía la mejor oportunidad. Su rostro tenía un expresión neutra pero muy en el fondo su alfa estaba emocionado por presenciar la escena más magnífica que sus ojos pudieran haber captado alguna vez.

Provocando un leve sonrojó en sus mejillas, lo que causó que se diera media vuelta y centrará su vista en las pantallas que se mostraban.

—No es lugar para una cachorra, ya lo hablamos, Parker.

—Lo sé, lo sé, pero no quiero que alguien más la cuide.

Y entonces Miguel hizo que aquella plataforma bajará hasta el piso, suspiro antes de girar nuevamente y ver qué la pequeña ya estaba sujetada a su pierna derecha.

—Si no la trajera ella estaría triste todo el día—. Peter sonrió con carisma al ver cómo Mayday recorría todo el cuerpo del latino. Y específicamente lo dice porque reconoce el cariño enorme que tiene la menor por el moreno.

Pero la pelirroja se quedó quieta al notar la glándula del alfa en su nuca la cual no resistió por oler y por lo tanto empezó a ronronear gustosa luego de que la maravillosa esencia de un vino dulce llegará a sus fosas nasales.

Miguel no se molestó con su acción pero si se mostró algo tensó, fue inesperado y no permitía que se acercarán a esa zona. Pero esto era una situación muy distinta a cualquier otra.

—Ten cuidado con ella, y no la pierdas de vista—. Le entregó la bebé.

Miguel sabía que Mayday era el único soporte emocional de Peter, la causa por la que seguía luchando por tener un lugar en la tierra y por proteger a otros. El abandonó de un alfa no es nada sencillo para un Omega, incluso unos llegan a la muerte por no soportar el terrible dolor al estar solitarios y con un lazo roto.

Pero Parker se mostró fuerte y lucha contra esas emociones para seguir con vida y proteger a su bebé, una que nunca se alejaba de su padre por nada.

Mientras tanto Miguel se dio cuenta del comportamiento extraño de su alfa al notar que Peter ya estaba en un estado de “soledad” (por así decirlo). Su alfa se hizo más notorio a la hora de proteger y mostrar apoyo de todo tipo al omega, incluso quería exigirlo como suyo, a él y a la pequeña Mayday.

Su alfa gruñía para cumplir sus deseos pero O'Hara lo reprimía a toda disposición, no se permitía ser excesivamente sentimental o un animal sin control pero las cosas que Peter le provocaba eran demasiadas con tan solo una mirada o una sonrisa amable.

Creía estar maldecido de amor, o quizas solo era una infección en el estómago.

—Bueno, yo regreso a mi cálido hogar, tú deberías tener uno de esos también, aunque no lo creas aquí hace frío—. Dijo comediante de caminó a la salida de la oficina —¡Adiós, Miguel!.

Dejando Todo Atrás. || ParkHara. [Corrigiendo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora