El deber de un perro de caza

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Tetchou se despertó sobresaltado. Sus ojos se posaron en el estante y en el reloj. Era la 1:03 a. m. Apenas logró conciliar el sueño durante más de 40 minutos. Después de los incidentes de hoy, los pensamientos impulsivos seguían discutiendo en su cabeza. Era una persona serena y rara vez tendía a pensar demasiado. Pero por alguna razón, hoy sucedió lo inesperado y, desafortunadamente, esto pareció tener un gran impacto en él.

El moreno suspiró, levantándose de la cama y estirándose. No tenía ni idea de qué hacer ahora.

Salió de su habitación, caminando sin rumbo por los oscuros pasillos. El silencio de la noche hizo que sus pensamientos fueran más fuertes que nunca. Prácticamente podía escucharlos claramente en este punto. Tetchou miró a su alrededor. Ni siquiera se dio cuenta de que había bajado las escaleras. Bueno, todos estaban dormidos ahora de todos modos.

O eso pensó.

El moreno escuchó el leve sonido del agua ondeando. Era casi imperceptible si no fuera por el hecho de que estaba completamente despierto. Por un momento dudó. Pensó que era solo su imaginación hasta que lo escuchó de nuevo.

Tan silencioso como un búho volando en la noche, sus piernas lo llevaron hasta la puerta del baño. El sonido había cesado, seguido por el silencio.

Mierda.

"Eres un asqueroso por escuchar a escondidas las ondas de agua en la puerta, lo sabes, ¿verdad, Tetchou-san?" La suave voz de Jouno vino desde detrás de la puerta. El moreno se relajó visiblemente. Pensó que había alguien más allí.

Tetchou sonrió para sí mismo. "Es la 1 AM, Jouno-san.¿Por qué estas-"

"Vas a despertar a todos si sigues hablando tan alto". Su compañero lo interrumpió.

Tetchou simplemente tarareó ante eso. Extendió su mano hacia el pomo de la puerta, presionándolo suavemente. El moreno no escuchó las protestas de Jouno, así que entró al baño, cerrando la puerta con cuidado detrás de él.

"No voy a mirar". Dijo tetchou, de espaldas al lado opuesto del baño donde Jouno estaba sentado cómodamente en la bañera.

"Lo sé, idiota". El hombre ciego siseó, pero no había rastro de malicia en su voz.

El moreno siguió acercándose hasta que sintió la parte posterior de sus piernas presionadas contra la bañera. Se sentó lentamente, con la espalda aún frente a su compañero. Podía sentir la mirada ciega de Jouno sobre él. Se sento allí en un cómodo silencio.

Tetchou miró al techo.

"¿Cómo está Tachihara-kun?" Preguntó, recordando la condición del pobre hombre cuando regresaron.

"Se está recuperando. Lo visité hace unas horas. Actualmente está durmiendo, sano y salvo". Respondió el peliblanco.

Tecchou tarareó ante eso. Estaba contento de que Tachihara se sintiera mejor. Arrugó la nariz. Aunque...

"Jouno-san. Acerca de hoy-"

"Ahórratelo Tecchou-san". La voz de Jouno se volvió amarga. Sonaba molesto.

Tetchou arrugó la nariz y frunció el ceño. "Jouno-san," continuó con más severidad, esperando llamar la atención de este último. "Quiero hablar con nuestro comandante. No creo que el camino-"

"¡¿Puedes cortar esto ya?! ¿Acabas de venir aquí para poder arruinar mi tiempo libre?"

Tetchou sintió la frustración burbujeando en su pecho. "Salí de mi habitación porque ya no podía dormir. Los incidentes de hoy fueron absolutamente incorrectos. No solo porque perdimos al criminal, sino que la forma en que el comandante se comportó con nosotros, principalmente con usted, no fue aceptable en lo más mínimo".