Carter

Capitulo 3

Cuando Agatha cumplió 8 años recibió la noticia de que tendría un pequeño hermanito, este hermanito aun llevaba dos meses formándose dentro de su madre, Agatha lo esperaba tanto que aprendió a tejer y cada dos semanas terminaba una prenda diferente para su futuro hermanito al cual ansiaba conocer. La felicidad reinaba en la casa de la familia De la Rosa.

Unos meses después, los De la Rosa decidieron celebrar un banquete para anunciar el embarazo de 5 meses y gritarle al mundo entero que esperaban su segundo hijo. Durante la celebración recibieron muchos regalos y felicitaciones por parte de los destacados invitados, pero en un momento dado Rose se sintió cansada por lo que fue llevada por Daniel a recostarse en una habitación previamente preparada con éste propósito. Daniel recostó a Rose delicadamente sobre la cama y beso su frente mientras sobaba su abultado estómago. En un momento Rose se sintió sedienta y con hambre por lo que Daniel corrió a la cocina por los bocadillos de fresa preparados exclusivamente para su esposa ya que durante el embarazo desarrollo un gusto irracional por las fresas, al igual que cuando estuvo embarazada de Agatha.

Daniel servía cortésmente los bocadillos en la bandeja, mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro al imaginar las manchas que se formarían en los dulces labios de Rose al degustar las fresas, mientras caminaba en la desastrosa cocina llena de camareros y chefs pensó que sería buena idea llevar té de jazmín, mientras colocaba la tetera y una taza dentro de la charola, se escuchó el fuerte rugido de un cañón; Daniel palideció, soltando la charola que llevaba en manos y se apresuró a la habitación en la que estaba Rose, al llegar la puerta de la habitación estaba abierta, su esposa tenía el vestido desgarrado mientras un charco de sangre que la rodeaba se hacía cada vez más grande, su pequeña hija sostenía el cuerpo de su madre mientras lloraba y en la habitación habían dos jóvenes de alrededor de 20 años, ambos tenían rasguños y golpes en la cara mientras uno aun sostenía el arma en sus manos. El instinto asesino de Daniel quería matar a esos dos tipos, pero los gritos de su hija lo devolvieron a la realidad y tomó rápidamente a su esposa en brazos para llevarla inmediatamente a un hospital.

Después de 5 horas de cirugía Rose salió, pudieron salvar su vida, pero no la del pequeño en su vientre. Una vez que Daniel vio a Rose salir del quirófano recibió un mensaje y se fue dejando a su pequeña hija dentro de la habitación mientras guardaespaldas la custodiaban, y su secretario quedo encargado de cuidar de sus dos amores.

El mensaje que Daniel recibió le indicaba una dirección, al llegar había dos hombres de alrededor de 20 años amarrados a unas sillas completamente desnudos, los dedos de sus manos ya no tenían uñas, y sus pies ya no tenían dedos. Un hombre se acercó y le informó de los hechos; al parecer los bastardos querían probar el cuerpo de una omega marcada y embarazada como una "nueva experiencia", según sus suposiciones le sería imposible defenderse ya que su gran estomago dificultaba su movilidad y estaba debilitada por el embarazo.

Ambos tipos decidieron seguirlos en la fiesta cuando iban a la habitación y esperaron a que Daniel saliera para entrar. Le dijeron a Rose que si cooperaba no lastimarían a Agatha a la cual habían amordazado y atado de brazos y piernas, Rose se congelo por un momento y ellos aprovecharon esa vacilación para arrojarse sobre ella, uno la tiro sobre la cama boca abajo mientras el otro la sujeto del cabello diciendo que comenzarían con una mamada, por un momento Rose no sabía que hacer pero al percatarse de que su pequeña estaba mirando decidió luchar para que su hija no presenciara el asqueroso acto de su madre siendo abusada por dos alfas, así no era el mundo que le había descrito a su hija, pero antes de que pudiera comenzar a luchar los alfas tiraron de su ropa. En un momento uno de los tipos grito de dolor, Agatha se había soltado y mordió la pantorrilla del que estaba jalando el cabello de su madre y el otro tipo se sorprendió tanto que aflojó su agarre y entonces Rose reacciono y comenzó a luchar con todas sus fuerzas, en un momento uno de ellos pateó su estómago mientras el otro saco un arma disparando a su vientre, Agatha corrió hacia su madre, ambos tipos se congelaron por un momento al darse cuenta de que no vivirían más allá de este día. A partir de ahí Daniel presencio el resto del suceso.

Después de escuchar el informe, el rostro de Daniel no cambio de expresión, sin embargo, sus ojos ardieron en un destello asesino y su feromona se volvió tan pesada que su gente tuvo que apresurarse a salir del lugar antes de comenzar a sangrar de sus cavidades. A los alfas parecía que se les estaba estallando el cerebro, era una feromona tan fuerte, cargada de furia que podría haberlos asesinado con ella, pero sería una muerte muy sencilla para ambas escorias.

Dos horas después, los gritos incesantemente desgarradores por fin dejaron de escucharse y un Daniel bañado en sangre pidió ser llevado al hospital. Las personas encargadas de limpiar se encontraron con dos cadáveres irreconocibles, puesto que sus cráneos habían sido destruidos de tal manera que la parte donde originalmente había una cabeza parecía un pastel de red velvet destruido en una pelea de comida, sus extremidades mutiladas pedazo a pedazo reposaban en el piso. Los "limpiadores" recogieron los restos en dos cajas diferentes, estas debían ser entregadas a las familias de los difuntos alfas. Cuando las familias abrieran los paquetes podrían vomitar e incluso sentirse enojados, pero nadie se atrevería a mover un dedo, nadie es tan idiota para meterse con la familia De la Rosa, excepto claro, por esos dos estúpidos alfas.

Después de aquel incidente, Rose nunca volvió a ser la misma, nadie podría culparla, ya no sería capaz de embarazarse y había perdido a un bebé tan esperado. Daniel tampoco volvió a sonreír.

Poco después Rose fue diagnosticada con depresión, su cuerpo y mente estaban tan débiles.

Un día de primavera, mientras los rayos de sol iluminaban la habitación decorada con flores recién cortadas del jardín que Daniel construyó para Rose, se encontraba la pequeña familia de tres. Agatha y Daniel estaban junto a Rose haciéndole compañía como se había hecho costumbre después de aquel suceso traumático, ya que Rose se negaba a salir de su dormitorio, cuando de repente Rose soltó unas palabras que nadie querría escuchar de su ser amado.

-lo siento tanto, pero ya no puedo seguir luchando, estoy muy débil- de esos bellos ojos que perdieron el brillo aquella noche brotaron dos enormes gotas que se deslizaron con el hermoso rostro demacrado de Rose.

Pidió que vivieran buscando un motivo para recuperar sus sonrisas, beso la frente de Agatha y los labios de Daniel profundamente para luego cerrar los ojos en un sueño profundo del cual nunca más despertó.

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Aquel suceso marco la vida de Agatha por toda su vida, en especial al saber que no eran solo dos los bastardos en la habitación, había uno más, uno que se escondió en la esquina como un cobarde a solo mirar mientras todo ocurría, era Alfred Barren, el segundo de los Barren, el único criminal impune de aquella noche, por lo que decidió planear una venganza en su contra, algo que le doliera tanto y le recordara quien le quito todo, pero resulto que Alfred termino siendo un patético perdedor que no sufriría con la tortura física asi que decidió arruinar la empresa de su familia, destruir su fuente de ingresos y dejarlo como un vagabundo retorciéndose en su miseria y suciedad para poder pisotearlo el resto de su vida.

Agatha planeaba realizar una emboscada al clubexclusivo de los Barren