El Reencuentro de un Amor Del Pasado

(Quizás...) Un Nuevo Amigo

Ya amaneció, la alarma de alejandro sono, pero la primera en despertar y apagar la alarma fue maria, quien al despertar y vio como estaba en una habitacion que no era de ella, tardo unos segundos en recordar todo lo que habia sucedido en la noche.

Maria se alarmo un poco, sentia como un brazo grande y pesado rodeaba y sostenía todo su cuerpo desde la cintura y una cabeza estaba apollada en su pecho y una pierna grande apollada en sus pierna que al mismo tiempo las rodedea.

un no veia al autor de esto, que la usaba como si fuera un peluche, estaba todo tapado por las mantas y solo sobresalia algunos mechones cortos de su cabello... pero ese cabello con pequeños rulos, lo podia reconocer muy fácilmente, levanto suavemente la manta que lo cubria a esta persona.

Y si efectivamente era Alejandro, desde la perspectiva de maria, parecia un niño pequeño en el cuerpo de un hombre muy grande y musculoso, se veia tan relajado y hermoso durmiendo, queria dejarlo dormir solo y que duerma un poco mas tranquilo, pero aun que queria, no lograba salir de los brazos y pierna de aquel hombre, la estaba abrazando y el la sosteniene un poco fuerte, era como si no quisiera soltarla nunca y asegurarse de que no se fuera de su lado....

Se acomo para estar en frente a el. aunque el rostro de alejandro este entre los pechos de ella, maria comenzo acariciando con suavidad con una mano su pelo y con la otra lo poco que llegaba a tocar de su gran espalda. Sonreia con dulzura -buenos dias mi coronel.... es hora de despertar mi vaquero - expreso suavemente con una vos muy delicada y serena, le deja un beso en su cabeza, queria despertarlo con cariño

Entre dormido y despierto. y con sus ojos aun cerrados reponde -no moleste doña aun es muy temprano........dormir un poco mas no le hace mal a nadie- la sujeta mas fuerte y acomoda mas su rostro en los pechos de ella y sonrie por lo comodo que esta, hace mucho que no se sentía tan cómodo durmiendo, había olvidado que estaba con maria

Se rie muy suave - con que ahora soy una doña y no maria, que atrevido que eres, con que asi conquista a las muchachitas señor don juan- hablo muy burlona, era divertido escucharlo murmurar cosas dormirdo.

Al escuchar la vos de maria abrio los ojos lo mas que pudo, sorprendido se desperto, lo primero que pudo notar era que su cara estaba entre los senos de maria, por eso se sentía tan comodo, sonrojado por la situación, se separo un poco de estos - ay perdon maria, estaba dormido...- hablo nervioso, levanto su mirada a verla, solo pensaba en lo hermosa que era hasta recién despierta

Maria sonrie - no pasa nada ale, se que no lo dijiste con intención, solo estabas dormido.. pudiste dormir bien?- pregunto curiosa, mientras esperaba una respuesta acaricia sus cachetes y sonreía dulcemente

Se relajó- claro que si princesa, dormir contigo fue muy bueno- la volvió a abrazar y pegarse a su pecho -hace mucho que no dormia asi de bien en mi cama - agarro su mano y le dio un beso a esta y luego la entrelazo con su mano - y tu mi princesa dormiste bien conmigo?- pregunto algo nervioso, de verdad quería saber su respuesta, si esto seguía dormirán mas tiempo juntos y en una misma cama.

Rie- si, hoy fue la primera ves en mucho tiempo en la que no sueño en nada y ninguna pesadilla apareció a molestarme ademas - saca su mano de alejandro y la coloca en la mejilla de el- disfrute mucho durmiendo contigo ale, senti como dormia en brazos de un oso muy abrazable y super protector y tu cama es demaciado comoda

Rien juntos, las miradas hablaban por si mismas, ellos volvieron a acomodarse y maria quedo en brazos de alejandro contenta de estar asi con el, que el amor de su pasado ahora lo tenga tan cerca de ella y alejandro solo la admiraba, miraba cada detalle de ella en ese momento, el sol que hacia que brillaran mas sus ojos marrones claro, su pelo largo lacio con algunos nudos y tapando un poco de su cara, su sonrisa, su suave piel morena, era como si quisiera sacarle una foto visual para nunca olvidar este momento. Todo era perfecto en ese momento, no nesesitaban hablar, ellos solo querian mantenerse cerca acariciándose o riendo simplemente