capítulo 2

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Blake.

—¿Comemos juntas?—envió Bri.

—siempre tengo tiempo para ti, nos vemos ahí—Respondí.

Brielle era mi única amiga, desde que me mudé y hasta el día de hoy la considero mi hermana. Nunca pude hacer amigos debido a mi trauma, ella es la única que sabía de mi pasado.

Aunque adorne algunos detalles, con ella no tenía secretos y a pesar de mi falta de afecto, ella sabía mis sentimientos.

Una vez fuera de la empresa camino hasta el restaurante en el que solíamos comer. Entre y ella ya estaba sentada, en cuánto me vio sonrió.

Le devolví la sonrisa y me acerqué—sabes que no puedo negarme a ti ¿Verdad?—reí—ya estabas aquí.

Asintió con la cabeza—soy tu mejor amiga, sé que soy especial para ti—bromeo—he pedido tu sándwich favorito—sonrió.

—¿De verdad? Gracias, me estaba muriendo de hambre— resoplé—preferí aguantarme antes que comer en la cafetería.

Frunció el ceño—¿Por qué? No me digas que son esas perras de nuevo.

—sí, ellas de nuevo, ignorarlas les duele más—respondí—no quiero tener problemas, ahora mi vida es tranquila y normal.

—lo sé, pero si llegan demasiado lejos debes de decirme ¿Lo entiendes?.

Asentí—Eres mi superhéroe—sonreí.

—Lo sé—Sonrió—eres demasiado amable, sin embargo, no dejes que te pisoteen.

—lo prometo—respondí—comamos, no arruinemos la comida.

—solo por qué tú lo dices—me guiño el ojo.

Al día siguiente.
Miro la casa de mis padres hace tiempo que no venía a visitarlos, quería protegerlos, me habían dado una buena vida.

Llamó a la puerta y la puerta fue abierta por mi madre, que me sonríe con alegría.

—Cariño—dijo al verme, tomo mi brazo y me jalo a sus brazos—¿Por qué no nos dijiste que vendrías?.

Le devolví el abrazo—ayer no pude venir, tenía mucho trabajo—respondí alejándome de sus brazos y entrando a la casa—te extrañé, mamá.

Me ha criado como uno de sus hijos, su amor me ha ayudado a sanar.

—Oh, mi querida hija, deberías de venir más a menudo—responde—te extraño mucho, tus hermanos también te extrañan, todos aquí lo hacen.

—lo siento, mamá—sonreí—¿Están aquí todos?— pregunté emocionada.

—Todos, estaba sirviendo el desayuno—me sonrió—tu padre se pone de malhumor si no come, vamos.

Tomó mi mano y me llevó al comedor, cuando mis hermanos me vieron ambos se lanzaron a mí, gritaron de emoción.

—hija—mi padre llamo mi atención levantándose de su asiento, alejo a mis hermanos y él me abrazo—me alegro de que hayas venido.
Jamás olvidaría que él me salvó, me protegió y me abrió las puertas de su casa y de su familia.

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⏰ Última actualización: Aug 15 ⏰

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Sombras Del Pasado (Saga Amores Sanadores 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora