Las Hermanas Holmes

Dakota 22/09/15

Nunca he tenido un buen día, pero como tenerlo estando en este pueblo en el que no pasa nunca nada interesante, Hunterville es esa clase de pueblo alejado y desierto que la mayoría de personas intenta evitar, peor hoy.... hoy ha sido una mezcla de cosas buenas y cosas terribles. Para empezar esta mañana me olvide que era el cumpleaños de mi madre.

Como siempre me encontré con mi hermana April tomando su café caliente, y a mi otra hermana Sam con su capuchino. De hecho no somos hermanas, somos trillizas algo poco usual, algunas veces es difícil de creer ya que las tres tenemos caracteres diferentes y también nuestro físico es diferente.

April es la mas rebelde de las tres, se podría decir que es capaz de decir cinco palabrotas en una misma frase, creo que es la mas fuerte de las tres. Sam es como la mas lista de las tres, popular y perfecta, todo el mundo sabe quien es Sam Holmes, de hecho siempre que dicen las trillizas dicen "Sam, April y como se llama la otra?" Dakota, me llamo Dakota y a diferencia de mis hermanas yo no soy ni la rebelde que se liá con tíos buenos, ni la popular que tiene a un príncipe azul a su lado, yo soy la que suele estar o sola a con sus dos mejores amigos, Dylan y Olivia.

-Bien, ya que todas estamos levantadas. -Dijo Sam, mientras untaba nutella en su pan. -April tu te encargas de la decoración, Dakota tu tienes que ir a por el pastel y yo me encargare de los regalos y los invitados.

Al principio no me daba cuenta de lo que pasaba, pero no tarde mucho en entender lo que pasaba y en la situación en la que me encontraba. Por suerte Sam se encargo del regalo que tendría que darle a mama.

-Espero que tengas una buena excusa para haberte olvidado del cumple de mama. -Me dijo Sam, mientras April empezaba a sacar la decoración mofándose.

-Ultima mente he estado ocupada...

-David no parece ser un problema... bueno es que creo que no es ni un novio... -Comento April.

En realidad ese era el problema. David ya no era mi novio, estuvimos juntos durante mucho tiempo, pero las cosas se fueron volviendo turbias entre los dos, los insultos llegaron después de que en nuestro aniversario me pusiera un vestido rojo, él pensó que lo hacia para llamar la atención de otros chicos. Luego llegaron las amenazas y poco a poco los golpes, como lo dije, mis hermanas eran mas valientes que yo.

Me acaricie mi lacio cabello negro, mientras Sam y April se miraban esperando una respuesta. No les dije que la noche anterior David y yo lo habíamos dejado, como tampoco les dije que me drogaba y que a causa de las drogas ya casi ni sabia mi propio nombre.

Cogí el coche de papa y me fui a la pastelería que quedaba bastante lejos de nuestra casa. Cuando llegue me encontré con Dylan, mi mejor amigo. Lo reconocí de inmediato, era tan flaco y pálido que parecía anorexico, lo mas atractivo de él eran esos ojos grandes y obscuros, pero era gay.

-Hey Dakota!! -Grito por todo lo alto.

-Hola Dylan.

-Dak, Olivia me ha contado lo que paso ayer con David.. -Hizo una pausa al ver como agachaba la cabeza, no era un tema del que quisiera hablar. -Oye, no te habrás...

-No! Claro que no, ya sabes que lo deje.

En el infierno seguro que había un lugar reservado para mi, por haber mentido de esa forma a mi mejor amigo. Pero que mas podía decir? "Si me sigo drogando y para no sentirme mal también me corto".

-Te creo... bueno nos vemos en la noche. -Contesto mientras me abrazaba. -Adiós.

Después de comprar el pastel, salí de la pastelería. No podía creer que un simple pastel pesara tanto. Pesaba tanto que hasta me tropecé y fue entonces cuando mi suerte comenzó.