Nunca Los Abandonare ™

Capitulo 9

"Remplazables" (2/2)

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El ligero calor que emanaba el sol fue tapado por las copas de los árboles que rodeaban el parque, donde una joven mujer castaña, caminaba, evitando así la idea de tener que buscar a su hermana. No es que no quisiera verla es solo que... Era Luan, lastimosamente le toco buscarla a ella, una mujer que no se caracterizaba por ser racional y cooperativa.

"Diablos, porque demonios yo tengo que buscar a la lunática de Luan. 'Lynn tu eres la más fuerte'. 'No es que nos asuste, pero tú eres más fuerte'. Solo tenían que admitir que aún les asusta Luan, No puedo creer que esa loca aun imponga miedo".

Los pensamientos de la castaña se detuvieron. Su mirada solo se centró en algo, una pequeña escena familiar, un padre jugando con su hija, una madre intentando servir un pequeño almuerzo, mientras una pequeña niña la llenaba de preguntas. El solo ver a la familia sintió por primera vez un sentimiento molesto... Algo que te hace sentir la persona más rara del mundo... Sentir que a nadie le importas... La soledad....

Hace mucho tiempo que ha estado sola, mientras intentaba seguir caminando por el parque. Su mente estaba en otro lugar... Intentando recordar los viejos tiempos, cuando las cosas eran más fáciles... Cuando ella creía que sabía cómo iba a ser su vida. Cuando tenía una familia a su lado... La hubieran apoyado... Obviamente lo hubieran hecho por eso se fue...

Sus pensamientos se llenaron de dudas... la vida no era como ella pensó que sería. Todo lo que hace ahora es recordar y desear.

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—¡Mas fuerte esta vez! —Animo fuertemente una mujer de cabello miel a una pequeña niña castaña—.

—¡Entendido entrenadora! —Respondió igual de animada devolviéndole un balón con más fuerza—.

-—Lacy, prometiste que dejarías de decirme entrenadora —Regaño ella mientras seguía jugando con la pequeña—.

—Lo siento, entrena... Tía Jordan.

—Solo evita que piensen que tengo favoritismo.

—¿No lo tienes? —Pregunto confundida—. Pensé que era tu mejor estudiante.

—Lo eres, eres la mejor en los deportes que todos los demás —Aclaro ella—. Agradezco que no seas como el —Susurro, pero la castaña la escucho—.

—¿De quién hablas tía?

—De nadie pequeña —Respondió nerviosa—.

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La castaña intento seguir caminando, pero los pensamientos de su antigua vida la molestaban, extrañaba a Lincoln, a las pequeñas... Extrañaba a Lacy. Los recuerdos de su hija eran lo más dolorosos... Abandonó a su hija, hace tanto tiempo. Pero no está arrepentida... fue demasiado duro para ella. No quería que su hija sufriera... no podía cuidar de ella, la lastimaría más si se quedaba, así que decidió irse.

—¿Dónde estás mi pequeña? —Se pregunto por un momento solo para luego ser golpeada por un balón— ¡¿Quién demonios tiro ese balón?!

Los dolorosos recuerdos de la castaña se vieron interrumpidos por el repentino dolor de un golpe de un balón en la cara molestando. Al intentar buscar al culpable se encontró con una pequeña niña junto a su madre en un pequeño "momento familiar" jugando un partido de quemados...

—Solo es una familia. ¡Vamos Lynn tienes que dejar de molestarte por pequeñeces! —Se reprendió molesta—. Verlas así me hace preguntarme si en algún momento Lacy y yo podríamos jugar así, me gustaría poder haberla entrenado —Imaginó con alegría pasar momentos entrañables junto a su hija—. Ella ya debe de tener 12, el tiempo pasa muy rápido y no pude estar ahí...