Lo Encontré(Libro #2)

Es una sangrona, literal.

12 De agosto del 2020.

Ellein Loaren.

Advertencia, contenido +18.

08:00pm

—¡Ya basta, no Lukas, no!— Mi estomago duele y el aire me falta aun más.

—Dije que te haría cosquillas si me tomabas otra foto cuando estoy distraído— Sus dedos se mueven en sincronía por mis costillas haciendo que me retuerza.

—Esta bien, la borrare, lo prometo— Sus manos se detienen dejándome respirar, pero dura poco, porque ahora esta encima de mi devorando mis labios.

-Sus besos ya son una especie de adicción, besa deliciosamente bien, sus dientes atrapan mi labio inferior haciendo que se me erice la piel, a continuación su lengua pasa por encima del labio para aliviar la presión que ejerció.

-Para no haber tenido novia por casi cinco años, diría que besa como un jodido profesional.

-Una de sus manos se cuela por debajo de mi pijamas de seda y sube hasta pasar mis bragas y estacionarse en mis caderas apretado con fuerza y provocando más sensaciones maravillosas en mi sistema.

-Su boca sigue devorando la mía y su olor a chicle de menta y chocolate me invaden haciéndome envolver uno de mis brazos al rededor de su cuello y la mano libre se enreda en su precioso cabello oscuro, profundizamos aun más el beso dejándole el protagonismo a nuestras lenguas.

-Su mano en mis caderas baja sólo uno centímetros para encontrarse con mis bragas azules y jugar con el tiro de la elástica, Lukas detiene el beso pero su boca aun se pega a la mía, me mira unos segundos para luego alejarse y darme una vista detallada de su...

—Muy dura situación— Pienso en voz alta, Lukas se ríe pasando una mano por su cabello, su mirada se desvía un segundo a la derecha para luego volverme a mirar con aun más deseo.

-¡Por las guarachas de Jesús, esa cosa no cabe en mi!.

—Desde aquí también tengo una buena vista de un pequeño y sexi ángel— Lukas me agarra del brazo incorporándome y pegándome a su pecho desnudo.

-Señoras y señores, acaba de ocurrir un importante suceso, un puto, jodido y frustrante suceso.

—Lukas— Abro mis ojos en sorpresa, sintiendo que estoy más húmeda de lo normal.

—¿Te e pegado un susto?— Sonríe dejándose llevar por el momento.

—Creo que ya paso factura la marea roja— Camino con mis rodillas hasta llegar al borde de la cama y salir de ella, mi cara arde de la vergüenza y me apresuro para entrar al baño.

—Mierda— Exclamo al sentir la cara interior de mi muslo humedecida.

—No, ¿Cómo se atreven a hacerme esto ovarios arrogantes y egoístas?, No se dan cuenta que estaba en pleno proceso reproductivo?— Me digo a mi misma mientras dejo caer la braga dentro de la bañera y quitándome el vestido de ceda que llevo procedo a entrar en la ducha.

-Recojo mi cabello para no mojarlo y el agua tibia resbala por mi cuerpo mientras aprecio como el agua en tono carmesí se va por el desagüe.

—Nena, ¿Estas bien?— Su voz en tono de preocupación llama mi atención.

—Si, perdón, se que no es la primera vez que mi menstruación arruina todo— Digo elevando el tono de mi voz para que pueda escucharme.

-Ya casi estoy terminando cuando escucho el maullido de tostada en la puerta.

—Meow— Lukas suelta una risita, ¿Aun esta ahí?

—Si tostada, tú mamá lo volvió a arruinar, es una sangrona, literal— ¿Cómo me dijo?.