Capitulo 4: Saluden al Rey.

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A Genryusai Yamamoto solo le vino una palabra a la mente para describir la vista ante él.

... Aberrante.

La prisión de máxima seguridad de la Sociedad de Almas, junto con el Nido de Gusanos ... había desaparecido.

Después de la partida de los capitanes desertores y vasto lordes, él había ordenado el tratamiento inmediato de los heridos y las reparaciones de los establecimientos y edificios de mayor importancia.

Los capitanes Byakuya, Komamura, Soi-fong y Zaraki fueron llevados por el escuadrón cuatro hacia sus instalaciones para su pronta recuperación, y más la de éste último, quien de los cuatro, fue el más herido por su pelea contra ... él.

Aizen lo había llamado " Kyojin ", un supuesto ser nacido del " Vacío ", lugar que existió mucho antes del nacimiento del Rey del Alma, por lo cual, ese ser existía desde antes de que todo lo conocido tuviera nombre.

Ese hecho fue difícil de tragar, y más para él, pero lastimosamente las pruebas estaban frente suyo.

Después de terminar de dar ciertas indicaciones, él junto a Unohana, Shunsui y Jushiro fueron inmediatamente hacia la prisión de la Sociedad de Almas para poder verificar la historia de Aizen.

Una vez ahí, los ojos de los cuatro se abrieron de incredulidad, el motivo fue obvio.

En vez de encontrarse las instalaciones de retención, se toparon con un abismal pozo de más de trescientos metros de extención.

" Esto ..., es imposible ... " - Jushiro no sabía que decir en estos instantes.

" Las instalaciones de aprisionamiento ... ya no existen ... " - Shunsui bajó su sombrero de paja mientras fruncía el ceño.

Todo y todos se habían ido, equipo, guardias, prisioneros, ya no quedaba rastros de ellos. En su lugar, solo había un profundo hoyo, el cual podía deducir a simple vista que tomaba los niveles más bajos de la prisión, incluído " El Muken ".

" Bajemos ... " - Yamamoto no tuvo que repetirlo de nuevo.

A sus órdenes, todos desendieron, cada uno con su propio tipo de pensamiento.

A medida que bajaban, pudieron sentir los rastros de energía espiritual caótica, era tan sofocante que Jushiro y Shunsui no pudieron evitar sudar levemente.

Por otro lado, Unohana frunció el ceño, su mente analizando las repercusiones de la falta de la prisión, y sobre todo, que el responsable de tal acto fue un ser que supuestamente estuvo encerrado todo este tiempo en la Sociedad de Almas.

A diferencia de los tres, Yamamoto se mantuvo con una expresión seria, las arrugas de su frente se profundizaban cada vez que descendían más y los rastros de energía espiritual de aquella abominación se volvían más palpables en la atmósfera.

En cuestión de segundos, se dieron cuenta que estaban en el nivel del Muken, pero algo estaba mal, y fue que los cuatro vieron que aún podían seguir con su descenso.

" ¿Un nivel extra? " - Jushiro dijo al darse cuenta como el resto, que ya habían terminado de bajar la última sección de Muken, pero aún así podían seguir bajando a lo que parecía un nivel oculto.

Los cuatro se apresuraron, rastros de ansiedad e incertidumbre apareciendo en los rostros de Unohana, Shunsui y Jushiro. Yamamoto apretó su agarre en su bastón, sus ojos afilandose peligrosamente al ver el final del nivel misterioso.

Los cuatro aterrizaron en los restos de una clase de puente, uno de los cuatro que había para ser más específicos. Miraron a sus alrededores y se dieron cuenta de las inscripciones de kido en la piedra de los puentes.

Bleach X Kyojin - El Paraíso VacíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora