Mi pequeño Àngel

Tengo todo paralizado por si decides volver

Aún tengo la Playlist que te dediqué, lo único que ha cambiado fue el nombre, porque si lo dejo mis amigos me preguntarán el motivo por el cual puse el nombre de una chica y que las canciones que suenen describa a una, con una belleza espectacular. 

Lo cambié, porque no quiero que me hagan preguntas al respecto, prefiero que te des cuenta que la Playlist es tuyo por el simple hecho de tener los emojis que mayormente te mandaba. Que quede entre tú y yo.

En mi biblioteca tengo los libros de Mario Benedetti y algunos que otros libros que no me has dejado de comentar desde que nos conocimos.

Tengo la lista intacta de las cosas que quería hacer contigo. Los veos de vez en cuando para recodarme de ti. Porque me acuerda a cuando te los mostré, y leí en tus textos que te gustó. Me diste unas cuantas ideas de lo que podríamos hacer, y yo con mucho gusto los anoté.

Tengo una carta de amor para ti. Eso no lo sabes mi pequeño ángel, porque nunca te lo llegue a contar o a mostrar.

Tenía miedo de lo que llegases a pensar de mi, que siempre que encontraba un buen momento para hacerlo me retractaba. Pensaba que si te lo mostraba, verías lo loco que estoy enamorado de ti.  Cómo también verías mis letras todas chuecas y mal escrita. Pensaba que si lo leías, verías lo importante que eres para mi, para que luego termines haciéndome daño.

Porque con cada texto qué hay allí, te das cuenta de que eres y fuiste el primero en todo. Y con eso, puedes lanzarme al vacío con una simple acción o palabras.

Pero si vuelves, ten por seguro que seguirá allí, guardado en el último cajón. Para ser leído por ti. Sin importar lo que contenga.