D E S T I N O | Hermione Granger

ᴍᴀʜᴏᴜᴛᴏᴋᴏʀᴏ

Era 15 de marzo de 1987, Altair estaba en la sala principal con el baúl listo, ese día viajaba a Japón.

La familia Malfoy decidió que Altair estaría mejor allá.

―Llevas todo?, espero no tener que ir hasta allí a llevarte algo que olvidaste.―dijo Lucius a su sobrina.

―Se que estarías feliz de que se me olvide algo para poder ir a verme―dijo Altair con una sonrisa divertida.

Lucius sonrió, y dio paso a su esposa e hijo para que se despidieron de Altair, el era quien la llevaría y se podría despedir de ella allá.

―Cuidate y no olvides enviar cartas seguido―Narcissa abrazo a su sobrina.

―Lo se, apenas llegue a Japón les enviaré una carta―

―Te extrañare mucho mi pequeña Ara―Narcissa apretó las mejillas de su sobrina haciendo que Altair hiciera una mueca. ―Es hora de que te despidas de Draco.―se alejo para dejar que Draco se despidiera.

Altair se acerco a su primo, el estaba con la cabeza abajo evitando mirar a su prima.

―No te vas a despedir de tu hermana mayor?―Altair tomo la cara de Draco y lo obligó a mirarla.―No seas grosero y despídete―.

Draco miro como su prima fingía estar enojada.―T-te extrañare.―empezó a caer lágrimas de sus ojos.

Altair se acerco más a el y lo abrazo.―Lo se..―se alejo de el y puso sus manos en los hombros de su primo.―Draco, padre y madre lo decidieron así y quiero que lo comprendas.―

―P-pero,¿porque no puedo ir contigo?..―miro con tristeza a Altair.

Altair suspiro e hizo que Draco la mirara a los ojos.―Deben de tener sus razones. No contradigas a madre y padre. Ellos hacen todo por nosotros―.

Draco asintió a lo que dijo Altair.―Lo entiendo...s-solo no te olvides de mi, si?―.

―Nunca te olvidaré Draco, después de todo me toca aguantarte―hizo una mueca.

―Que chistosa―le dio un pequeño empujón a Altair.

―Es hora, vamos Altair―dijo Lucius mientras sostenía el baúl de su sobrina.

Altair miro por última vez a Draco y se despidió con las manos para luego alejarse poco a poco. Cuando estuvo cerca de su tío, sostuvo su mano y desaparecieron.

Llegaron a Japón, el lugar en donde se quedaría Altair era una pequeña pero lujosa mansión en donde la esperaba, Shou Zamura, quien seria en un futuro su maestro y como un padre para ella.

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Era 1 de Abril, Altair miraba por la ventana de su habitación, estaba dibujando el paisaje que estaba frente a ella, un árbol de hojas casi blancas
El cielo era claro, transmitía tranquilidad y paz.

Escucho como algo aterrizaba enfrente de la mansión, supo que ya era hora de ir a su primer día de clases. Guardo su cuaderno con el lápiz en un cajón de su escritorio y bajo las escaleras al primer piso.

Miro a Shou Zamura esperando en la entrada de la mansión. En el poco tiempo que llevaban conociéndose le pareció alguien serio, con cara de no querer existir, sin embargo, desde el primer día fue amable con ella e incluso le enseñó algunas cosas relacionadas a la magia.