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Después de desempacar sus cosas, decidieron descansar, al día siguiente, fueron llamados para que fueran a conocer el arrecife.
Tsireya, Rotxo y por último Aonung fueron los primeros que se lanzaron al agua, seguidos de Lo'ak y Nahum quienes, al contrario de los otros, se lanzaron sin cuidado, detrás T/N se detuvo en la orilla y los miró negando con una sonrisa.
- Son unos niños -burlona-
- ¡Es tu turno princesa!
Sorpresivamente Neteyam la tomó como princesa y se lanzó al agua con la joven en brazos a pesar de que esta le gritaba que parara.
Detrás de ellos las otras jóvenes se rieron y tiraron de igual forma.
Todos al estar bajo el agua se sorprendieron ante la hermosa vista que tenían frente a ellos, ya era hermoso por fuera pero sin duda. . .era aún más maravilloso de cerca, más para Kiri, Dalia y los gemelos, sentían una atracción cómo si el mar los llamara, o Eywa.
Dalia se separó de Neteyam para nadar más a fondo siguiendo a los hijos de los líderes, en eso Nahum la jaló para que vieran un coral, el cual al tocarlo los tres dio un pequeño brillo a lo que sonrieron, la mayor les hizo una seña para que continuaran.
No pasaron muchos segundos cuando vio a Tsireya hacer unas señas, dando a entender que fueran con ellos, confundida volteó a ver a los Sully los cuales ya iban a la superficie, le dijo a Tsireya que esperaran (claramente en una seña) y subió junto a sus hermanos.
- Hey -dijo llegando a la superficie-
- ¿Están bien? -preguntó Tsireya llegando a su lado junto a los demás-
- ¡Son demasiado rápidos! ¡Espérennos! -se quejó Tuk-
- Es que tú eres lenta tonta -dijo Hum-
- ¡Tu eres el tonto! -se enojó la menor-
- ¡Niños! -se quejaron sus hermanos mayores-
Estos bajaron la mirada
- Lo siento -dijeron en voz baja pero se alcanzó a escuchar-
Tsireya soltó una pequeña risita.
- Simplemente respiren
- No bucean bien -habló Aonung llegando al lado de su hermana- saben saltar entre los árboles, pero...
No pudo terminar porque su hermana le dio un pequeño golpe en la nuca.
- Vamos, hermano -habló Lo'ak-
- No sabemos hablar con los dedos -dijo Neteyam moviendo sus dedos- no entendemos lo que dicen
- Yo les enseñaré -dijo Tsireya-
- ¿Dónde está Kiri? -preguntó Rotxo-
- ¿Quién? -dijo Aonung-
- Kiri, ¿donde está Kiri?
Todos giraron en sí mismos tratando de encontrarla pero esta no estaba.
- Tranquilos, seguro está explorando, parece que se adaptó bien al agua -habló Tsireya amablemente-
Después de eso, la primera lección fue conocer a los Ilu, animales con los cuales se transportaban por el agua.
Aonung empezó a hacer el llamado y salieron varios.
- Estos son Ilu -habló el hijo del Oloeykan- si quieren vivir aquí. . .deben montarlos -explicó-
El primero en intentarlo fue Lo'ak pero este falló causando que estallaran las risas de todos, risa la cual Tsireya y Dalia trataron de ocultar para no hacer sentir mal al chico.
- ¿Estas bien chico del bosque? -preguntó Aonung con burla-
- Para ti es fácil, ¿no? -habló Dalia a lo que todos la miraron- vives aquí, nosotros no. . .lo dijiste, chicos del bosque. . .si tu vas allá, serias como nosotros ahora. . .-levanta sus hombros- no le veo la gracia
Él la miró e hizo una sonrisa para acercarse a ella, esto puso alerta a Neteyam.
- Te crees muy valiente
- Y tu la gran cosa -contraatacó ella-
Él soltó un bufido.
- Móntalo -ella lo miró confusa- al Ilu, creo que lo podrías hacer
Dijo "dándole ánimos" obviamente quería ver a la joven hacer el ridículo, era clara su intención pero no se iba a dejar.
Sin responderle un Ilu ya estaba cerca de ella por lo que no tardó en subirse a él.
- Recuerda. . .se gentil -le recordó Reya a lo que ella asintió haciendo el vínculo-
- Ten cuidado cariño
Miró a su pareja y le sonrió asintiendo.
- _Adelanté pequeña_
Pensó ordenando al animal, estuvo unos segundos en la superficie para luego tomar una bocanada de aire y sumergirse, al contrario de Loak ella si pudo mantenerse estable y aguantar la respiración bastante bien, incluso se topó con Kiri quien montaba un ilu, ambas sonrieron y siguieron su paseo.
- ¡Lo logró!
Exclamó Tsireya feliz al igual que los demás, ante esto Aonung rodó los ojos molesto, realmente quería que fallara.
Tsireya le enseñó a los niños su ilu para que siguieran a las otras y así juntarse a su paseo, el cual lo disfrutaron mucho, el mar era realmente hermoso.
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Dalia ayudaba en cosas del hogar ya que Tsireya les dijo que descansaran pero fue interrumpida por unos gritos chillones.
- ¡Lia!
Tuk y Ney llegaron corriendo al marui a lo que ella las recibió con una sonrisa.
- ¿Qué pasa pequeñas?
- Tsireya nos está enseñando a poner conchas y otras cosas en nuestro cabello -dijo Neyva-
- Si, también dijo que nos puede enseñar a hacer ropa, queremos hacerte algo a ti
- Ah. . .¿por qué no se lo piden a Kiri?
- Ella está en su mundo-ambas hacen un puchero y juntan sus manos- ¿puedes?
Ella no se podía negar ante la ternura de sus niñas.
- Está bien. . . -se levanta- pero ayudarán en la casa por dos días
Ellas asintieron frenéticamente y la jalaron para ir con la otra joven que las esperaba.
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- ¡Queremos verte! -exclamó Ney-
- N-No creo que me vea bien -habló la mayor tímida-
- Vamos, segura te ves linda -la animó Reya-
Con algo de timidez la mayor salió del marui donde se había cambiado, todas se sorprendieron ya que realmente se veía hermosa.
- Wow, mi hermano se va a volver a enamorar -dijo Tuk a lo que la mayor se sonrojó-
- Te dije que te ibas a ver hermosa -dijo Reya- ven solo te falta el cabello
- Gracias -tímida-
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