La Mascota del profesor

Capitulo 4

Me quedé con ellos un rato, mientras esperaba al profesor Manuel, conocí la graciosa historia de Keind y Brown, me dolía un poco que el profesor Brown se fuera, pero me aseguro de que yo estaría bien con este tipo, quien soy yo para juzgar su hermoso criterio, en vista de que no llegaba el maldito ese, y por maldito ese me refiero al profesor Manuel, me despedí de ellos y salí a buscarlo.

Camine por toda la universidad, preguntando a todos los que conocía, en la oficina, pero nadie me dio respuesta de él, dándome por vencida subí hasta la azotea y encontré a Danilo fumando con su Vapee

- Hola – dije cansada

- ¿Ya lo encontraste? - alzo la ceja

- No – dije agitada, malditas escaleras

- ¿No es ese que va allá? - apunto con su vapee

Corro hasta el borde y lo busco con la mirada, <<Hijo de puta>>

- Manuel – grité lo más duro que pude y el volteo, le hice una seña con la mano de que me esperara, corrí lo más rápido que pude chocando contra todo y todos, ni en la clase de deportes hice tanto ejercicio como hoy, al llegar a la puerta estaba arrecostado en el marco, todo sereno y fresco - ¿Dónde...? - me quedaba sin aire – ¿estaba? - dije después de 1 minuto intentando que los pulmones volvieran a funcionar

- ¿No te dijo Kenia que tenía que salir?

- ¿Que?

- Si, tengo una cita, así que tu calificaras los trabajos, me asegurare de ponerte puntos extras por su esfuerzo señorita Ávila

- ¿Quiere que califique 92 trabajos? - dije atónita

- No, hazlos que puedas mientras yo no estoy

- Pero...

- ¿Qué?, ¿tienes alguna cita? - alzo una ceja

- No – dije firme – los tendrá listos

- Son las 7 empunto – dijo mirando su reloj – vuelvo a las 9

- De acuerdo – suspiré y di media vuelta sobre mi eje, dirigiéndome nuevamente a la sala de profesores, donde se encontraba pequeña pila de trabajos – Empecemos – me senté en la silla y empecé a calificar.

Ya estaba casi por acabar, eran alrededor de las 11pm y no se encontraban señales de vida de Manuel, una pizca de preocupación surgió dentro de mí, mientras que la otra parte quería terminar el trabajo e irse al departamento, aparte de la sangre en mis oídos, empecé a escuchar la canción Earned de The Weekend

- Pero ¿qué diablos...? - murmuré mientras me iba acercando a la puerta para salir a revisar, al caminar por un pasillo en específico, la música se hacía más fuerte, me di la sorpresa que la música provenía del salón de artes, mis ojos visualizaron a Matt sin camisa y unos pantalones apretados

Diablos, Matthew, había una chica en una silla mirándolo con lujuria, él se iba acercando lentamente a ella, mientras le bailaba sensualmente

- ¿Laura? - brinque al escuchar mi nombre, me voltee con cuidado

- ¿Sí? - era el nuevo de profesor Keind Lancaster

- Lo que pasa detrás de esa puerta, no es asunto tuyo

- ¿Disculpe? - me alejo de la puerta poniéndome frente a él, cruzándome de brazos

- Ya me escuchaste, aléjate de esa puerta y sigue calificando lo que estabas haciendo

- Con todo respeto profesor Lancaster, sus peticiones no son de mi interés

- Lo serán, créeme – Sonríe de manera egocéntrico

Qué demonios estaba sucediendo, sacudí la cabeza para sacarme las ideas, creo que el sueño ya me estaba afectando.

Volví a la oficina cansada y aburrida, me senté en la silla para terminar de calificar los trabajos, escogí las tres mejores notas, me tome la delicadeza de apuntar los nombres en una hoja, lo deje sobre los trabajos.

- Ten – voltee al escuchar la voz, Keind me estaba extendiéndome una taza de café

- ¿Para mí? - dije confundida mirándolo con una mueca

- No, es para la profesora muerta de literatura – dijo con sarcasmo, lo que me hizo torcerle los ojos – sí, es para ti, debes estar cansada, ¿Dónde está tu profesor?

- No lo sé, pero como soy su asistente, tuve que hacer esto – acepté el café, su mano rozo lentamente con la mía dándome un pequeño corrientazo – Gracias – dije tomando un sorbo

- No hay de que – dijo retirándose

Camine a la ventana, me quede sentada en el pequeño bordillo mirando todo el campus, estaba todo oscuro, hacia frio, me quería ir a mi departamento, de fondo escuche la canción L.O.V.E de Nat King Cole, comencé a bailar con la taza en la mano

- take my heart and please don't break it - Tararee

(Toma mi corazón y por favor no lo rompas)

Suspire con brusquedad, leche miel café y azúcar, todo tenía la cantidad perfecta, no le di importancia así que camine hasta la biblioteca, para mi sorpresa encontré a Keind con la cabeza en la mesa, creo que se durmió, agarre un Post-it para dejarle una nota

Gracias por el café estaba delicioso, ya me fui

PD: No te desveles mucho, salud dice que no es bueno

Att: Laura

Dude un poco en dejarla, no sabía que hacer ¿lo levanto?, ¿me voy?, arrugo el papel en mi mano

- ¿Necesitas algo? - dijo alzando la cabeza

- No..., solo vine a darte las gracias por el café y a decirte que ya me iba

- De nada – exclamo mientras se estiraba en la silla

- Bien, nos vemos – exclame sin dejar que el respondiera, cruce por la sala de artes y escuche los gemidos de la chica juntos con los gruñidos de Matt << Go Best Friends >> sonreí para mis adentros, cruce por el campus hasta llegar a mi departamento, entre con cuidado a la habitación, ya que Kenia se encontraba durmiendo

- ¿Te lo follaste? - dijo mientras encendía la luz, casi me daba un infarto

- No

- ¿Te follaste a alguien? - pregunto mientras yo me cambiaba para acostarme

- Tampoco – suspire mientras me tiraba en la cama

- A este paso, estas resucitando tu virginidad

- Eso es imposible, no puedes resucitar a algo que está vivo – le respondí mientras programaba las alarmas

- Cierto que aún no das tu sagrada flor – dijo ella riendo

- Sabes algunas chicas no le damos eso a quien sea

-Se la di a mi vecino, eso cuenta con dársela a alguien especial, estaba muy enamorada de el – suspiro con melancolía

- En cierto punto, es cierto – me envolví en mis sabanas

- Buenas noches bonita – dijo Kenia feliz mientras apagaba la luz

- Buenas noches encanto –mire fijamente el techo hasta quedarme dormida