Después de saborear aquel pequeño triunfo me sentí bastante cansado, no había dormido en toda la noche y me estaba cobrando la factura con intereses, intereses muy elevados.
Caí derrotado al sillón que solía usar más que mi cama por qué era muchísimo más cómodo que la misma, acaricie la tela raida de algodón sucio que cubría el sofá en casi su totalidad, buscando en él consuelo de el mundo mismo y quizás algún abrigo que me protegiese de mis habituales pesadillas, las cuales asaltaban mi descanso de maneras escalofriantes y me hacían llorar con frecuencia, suspiré cansado "ojalá no sea así está noche" pensé mientras mi mente se envolvía en la niebla misteriosa del subconsciente alejándome de la cruel realidad y llevándome a un lugar casi siempre peor.
Aquella noche no fue asi, de hecho soñé bastante bonito, mas bonito de lo que había soñado en varios años
Estaba en un campo de flores soleado, probablemente era de primavera y el sol despedía un agradable calor tibio, estaba tirado encima de una cama de flores color violeta, mi ropa estaba limpia y tenía un agradable aroma a jabón. Miraba al cielo el cual era celeste, sin bruma ni nube alguna visible, me llenaba de paz aquel ambiente dulce y primaveral que me otorgaba una sensación de tranquilidad qué no había sentido en mucho tiempo, casi diez años creo que no me sentía así, aliviado sin preocupacion ni tristeza alguna. En cierto momento llegó una chica con un vestido celeste y con cabello rubio y suelto, la cual simplemente se quedó allí mirándome hasta que en cierto momento cerré los y le pregunté por qué me miraba tanto, ella respondió que le gustaba verme tranquilo, y que hace mucho que no lo hacía. En ese momento me paraba y empezaba a correr con vitalidad por el campo, parecía un niño pequeño hasta que en un momento tropecé y rode por una colina. Cuando pare de rodar me quedé allí riéndome por un rato antes de pararme y seguir saltando por allí.
En ese instante me desperté por el sonido del celular, alguien me estaba llamando y eran como las 8 de la mañana, conteste y...
Era simplemente un spam de un señor de entel que anunciaba una "supersemana de descuentos imperdibles por su aniversario n°.."
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El Chico Sin Cara
Teen Fictionsamy o bags como le dicen es un chico de veinticinco años el cual siempre trae una bolsa en su cabeza la cual no deja ver a nadie su rostro, la ha llevado por años, a tal punto que el mismo no sabe cómo es. Todo "común".
