#1 la primera noche

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Lucero:

Soy Lucero Hogaza de 25 años, jefa de una cooperativa quien maneja empresas de licores, hace 4 años empezó todo esto a lo que he dedicado los últimos años sin dar tiempo a demás cosas al exterior de mi vida ¿cuál vida? Realmente no lo veo así, pero me gusta esto tener que dar las órdenes y que deben ser cumplidas a mi orden sí o sí.
Pero bueno que gano con esto? Para algunos nada, para mí mucho, por qué? Nadie es más que yo, simple, en los últimos días todo ha sido normal como de costumbre en la cooperativa, firmas, órdenes, organización, reuniones, intimidaciones por parte de ciertos socios, empleados con los simplemente no puedo estar más de cinco minutos? Por qué? No soporto las estupideces y lo mínimo mal hecho, lo bueno de esto, nadie me a intentado retar de alguna manera, y quien lo intenta simplemente no le queda de otra que irse de la cooperativa, fácil.
No me interesa nada ni nadie en este lugar, lo único, mis beneficios, solo yo sé cuales son.
Gracias a eso, el último socio que por asuntos personales tuvo que renunciar, me han estado dando sugerencias de un nuevo socio, que parece ser bueno en lo que hace, no me importa, pero sí le da beneficios a lo que me beneficia a mí, tendré que aceptar aunque no esté del todo de acuerdo.

Manuel:

Soy Manuel Mijares de 29 años simplemente soy un inversionista de bienes raíces y socio de algunas cooperativas ah también dueño de un viñedo heredado por parte de mi padre, es de ya generaciones, por ahora se sigue fabricando vino.
Por ahora debo tomar un vuelo a México donde tengo reunión por ser el socio de una cooperativa de licores, y con suerte por uno que otro polvo que aparezca, no está mal.

Lucero:

De las pocas veces en que tomo un rato para mí, y por insistencia de mi mejor amiga ~la única persona en quien confío, pero es todo lo contrario a mí ~ y bueno llegamos a un antro donde el ambiente era pasable, no me agrada mucho este ambiente, pero bueno se dio, llegamos a la mesa y allí habían más personas entre todos nos presentamos, paso un raro y el ambiente había cambiado, la mesa estaba llena de bebidas, no son de mi gusto, solo el vino lo considero pasable por ello es lo único que bebo de licores, estaba sola en la mesa fulminando con la mirada a cada individuo que se me acercara, me aburrí de simplemente hacer eso,  pase a la zona VIP dijeron que había un ambiente por así decirle tenso entre quienes van allí. Primero fui al baño, todo bien, al salir, por accidente y despistada choqué contra un hombre un poco más alto que mí, no me disculpe por qué hacerlo?  Este hombre se dio la vuelta ambos nos miramos serios pero su mirada era intimidante y amenazante.

Manuel:

Una noche antes de esa junta, como me gusta acostumbrar de noche fui a un antro que me recomendaron unos amigos que ya habían asistido al lugar, llegando todo normal, percibí uno que otro buen polvo para esta noche o algunas otras, como siempre no las busco, no tengonecesidad de hacerlo y ni lo haría por gusto, llegan a mí, y bueno la primera de la noche, no está nada mal.
Alta, rubia, buen cuerpo, apetecible, sí, linda cara, su mirada es amenazante pero sus ojos brillan, nunca he visto unos ojos así, detuve mi mirada por varios segundos en ellos, me gustan, pero bueno no es el punto que me interesa.
Al momento en que esa rubia de ojos brillantes intentó irse de mí, la tomé del brazo atrayendola a mí nuevamente*

M- qué? No piensa disculparse?
~le sonreí por provocación y un "no" fue su respuesta, que se cree esta~
L- no, y suelteme
M- ~esto empieza a gustarme~ no  
L- ~este imbécil qué? Hago a safarme de su agarre fue en vano, y seguía sonriendo con perversidad el muy imbécil, en que momento no lo sé, pero estábamos en lo que parece ser el despacho para los clientes, a todo momento solo lo estaba fulminando con la mirada~
M- para que tienes esa linda boquita? No hablas
L- con imbéciles? No ~me levantó de donde me había dejado sentada y acomodó mi vestido que casi llegaba más arriba de las piernas~
M- siéntate, no he terminado contigo preciosa
L- obligame, y ya déjame cabrón ~porqué la insistencia que trae?? Mis pensamientos se desaparecieron cuando sentí como volvió a sentarme~  ya me estás hartando
M- y tú me esta provocando 
L- ~ya entiendo a lo que está jugando este perfecto desconocido~ ah si? A qué?
M- en verdad quieres saberlo?
~muerdo mi labio inferior mientras la miro detalladamente completa~
L-  no, no sé ni porqué estoy aquí soportando a un imbécil 
M- porque quiero que estés aquí, y lo vas a estar hasta que yo diga y las veces que yo lo pida 
L- eso quieres creer?
M- eso creo, y eso se hace
L- que ingenuo eres ~sonreí, me tomó del brazo y me levantó con fuerza en verdad~ -arrodillate- ~exigió con voz ronca y subió su mano hasta mi cabello para después hacer una coleta, remoje mis labio y seguido mordí mi labio en su cara sin hacer caso a su exigencia~  que me darás a cambio?  ~hace su agarre más fuerte y después suave, me volteó dejándome pegada a su cuerpo permitiéndome sentir su miembro~
M- quieres algo más aparte de que de follé la boca aquí y en donde me de la puta gana?
L- ~volvió a exigirme en voz ronca y cerca de mi oído, puta con ese tono en verdad haría cualquier cosa~
M- otra vez callada? ~hago que se arrodille enfrente de mi, ambos nos miramos como demonios~

Bueno amiguites hasta aquí llega este primer capítulo, espero y les haya gustado, espero poder escribir el próximo lo más rápido posible, besites bendecides onichan jjjjj


Besos sabor seducción Donde viven las historias. Descúbrelo ahora