Roonmates! Chaipunk

Capítulo 4

Hobie sabe que su amigo es bastante tímido, realmente lo entiende, pero al ver a su amigo coquetear, no puede evitar querer fastidiarlo, menos al saber que tiene otra cosa más con que joderle la existencia, es su manera extraña de demostrar el cariño que le tiene.

En el camino de volver a casa, Pav estaba con los brazos cruzados y sus mejillas sonrojadas, haciendo un puchero por todas las burlas que Hobie estuvo haciendo en el camino.

—Pero ¿Crees que le gusto?—Hobie se detiene en seco, sin darse cuenta que en todo momento solo estuvo admirando a Pavitr y no a su amiga.

—No lo sé, no presté atención—Hasta el mismo se sorprende por su respuesta ¿Por qué no fue tan observador como siempre? Además de solo pensar en la posibilidad de que la chica le gustara Pav lo hace sentir extraño.

Pavitr suelta un quejido—Hooooob—lo ve con algo de tristeza—Pensé que tú podrías decirme, eres muy bueno leyendo a las personas—

El británico arquea una ceja

—No creo que sea así, la gente es solo muy obvia con sus mierdas, ¿No?—

—Puede ser—El hindú se encoge de hombros—A la próxima presta atención y dime qué tal—

—No sigo órdenes—Pav entrecierra los ojos.

—Ahora si no sigues—Vuelve a cruzar sus brazos.

—Pav, no seas tan inseguro, eres lindo y carismático, más bien debes tener varias personas por ahí que quieran conocerte—El británico acaricia su mejilla con cuidado provocando que el corazón del menor se acelere.—Además que nunca he seguido órdenes—

Pav abre la boca para responder pero el autobús que los va a llevar a casa llegó, agarró su brazo y entraron.

Debido a todas las personas que estaban en el autobús, el indio estaba de frente pegado al mayor, este último puso su mano en la cintura para que no se caiga, y con su otro brazo estaba sosteniendo el tubo del vehículo.

—Ya estás teniendo toda la experiencia de mi universo, ¿Qué te parece?—Hobie lo ve bastante confundido, para luego sentir como estaba siendo apretado por varias personas, como si fueran sardinas en una lata.

—Acogedor—murmuró para no herir al menor.Aún con sus manos en la cintura, lo apretó más hacia él—No está mal—

Por el tacto del mayor, el indio sintió sus mejillas sonrojadas.—Sé que no es un buen momento para ti Hob, pero quiero que disfrutes estar aquí—Baja la cabeza algo avergonzado.

—No sé de qué me hablas, la estoy pasando bien contigo Pav, no te preocupes—Sonríe.

—Sí pero yo—Es interrumpido por las personas que empiezan a bajar y debe dar permiso.Pavitr suspira, el joven puede ser muchas cosas, inocente y algo ingenuo, pero no es estúpido, sabe que su amigo no está pasando un buen momento y que está estresado, quiere hablar de eso, pero no sabe cómo abordar el tema sin que su amigo se sienta mal.—Solo quiero que sepas que estoy aquí para ti, Hob—Envuelve sus brazos en la cintura del mayor y recuesta su cabeza en él.

Hobie queda asombrado por la acción y siente como sus mejillas se sonrojan.

El indio se da cuenta de que el mayor tiene un leve color rojo en sus orejas, sonríe sabiendo que puede vengarse por todas las burlas que le hizo el británico por Gayatri pero dejaría esa carta para después, en este momento solo disfrutaría estar abrazando a su mejor amigo.

—Gracias—dice en un tono bajito el británico.

Pasan varios minutos, llegan a su destino, se bajan del autobús y caminan a casa, haciendo bromas sobre el día, sus clases, o simplemente fastidiando al contrario.

Cuando llegan, la casa se encuentra vacía, Pavitr le dice a Hobie que su tía Maya a veces iba a un club de lectura y que seguramente volvería más tarde.

Por el reloj de Pavitr se ve a un holograma de Miguel diciendo que necesita que vayan a su laboratorio.

—¿Cuánto duraron mis vacaciones?—pregunta Hob

Pavitr solo le dedica una sonrisa para luego abrir el portal—No me vas a decir que no extrañas la acción—

Hobie le sonríe para poner sus manos en los bolsillos—Me conoces demasiado bien—Los dos entran al portal.

Cuando llegan al laboratorio de Miguel, este anda con su peculiar pose mientras baja la plataforma.

—Recuérdame algún día arreglar esa cosa para que vaya más rápido—murmura el británico.

—Mira chico, sé que odias todo esto de seguir órdenes y no sé qué, pero no por eso voy a estar soportando llamadas de tus profesores quejándose sobre tu comportamiento—

—¿Y atendiste cada una de ellas?—Responde el británico tratando de sacar de sus casillas a Miguel.—Dijiste que sea un niño problema que las personas crean que repitió de año, ¿Lo estoy haciendo bien?—

Miguel deja salir un suspiro—...No sé si estás siguiendo mis órdenes o solo me estás fastidiando—

Hobie sonríe—Obviamente es lo último—Al escuchar esto Miguel le lanza lo más cercano que tiene, y por su sentido arácnido logra esquivarlo.—¿Al menos tengo buenas noticias de que ya puedo volver?—

El mayor de la habitación lo observa con los ojos entrecerrados—Aún nada, debes seguir quedándote con Pavitr—

Hobie ahora es quien tiene los ojos entrecerrados, sabe que le está ocultando algo, no puede evitar tener curiosidad, pero siendo sincero, él estaba disfrutando no tener que estar en su mundo, después de todo lo que pasó, solo quería seguir huyendo y no afrontar nada, lo necesitaba, aunque las consecuencias lo persigan después.

—Entonces, ¿Por qué estamos aquí?—

—Necesito que vayas con Gwen a una misión—A Hobie le brillan los ojos por la emoción.

—Solo iré porque quiero golpear gente, no porque me lo digas—

—Bueno...¿Y yo también voy?—pregunta el indio.

—Lo estás haciendo bien desde tu lugar Pavitr, tranquilo, puedes descansar por hoy—Miguel se baja de la plataforma para salir de su laboratorio—No lo arruines Brown—

Pavitr trata de responder pero es interrumpido por el británico.

—Nos vemos Pav, no me extrañes mucho, llegaré a casa tarde hoy—dice en un tono juguetón, como si estuvieran recién casados, no deja responder al indio porque ya se había ido.

Pavitr suelta un suspiro—Cuídate, supongo—

El hindú se queda en casa, bastante aburrido, va a patrullar, y hace lo de siempre, alimentar perritos, luchar contra el mal, pero no puede evitar pensar en que está haciendo su amigo y más junto a Gwen.

Mueve su cabeza confundido por sus pensamientos, cualquiera creería que está celoso, o bueno, si lo está, de no estar con ellos en esa misión y seguro se están divirtiendo.

Cruza los brazos al pensar eso último.

"No importa, igual tengo cosas que hacer" piensa para luego ponerse a hacer su tarea, pero por alguna razón no puede dejar de pensar en el británico.

Un leve rubor se asomó en sus mejillas.

Siempre le costaba dejar de extrañar a Hobie cuando debían estar separados, pero en este momento menos puede controlarse y eso lo hace sentir avergonzado.

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Yo no sé que decir, gracias x votar , escriban cosas homosexuales con lady Gaga de fondo, me lo agradeceran