canele 𖹭 kookmin

capítulo O5

Epílogo:

Al día siguiente, Jungkook y Jimin se encontraban caminando con sus manos entrelazadas por el pasillo de la escuela, los dos tiernamente sonrojados y felices, con sus lobos realmente contentos que hasta se llamaban el uno y el otro con sus aromas. Estaban yendo hacia el aula del menor mientras charlaban y decidían que iban a hacer en el receso.

Luego de terminar los dulces el día anterior y confirmar oficialmente ser pareja, los dos decidieron que no se lo iban a ocultar a nadie, y si el grupito de Seokjin se atrevía a hacer algo, se la verían con Jungkook, pero no en forma mala.

Una vez cerca del aula del menor, Jimin saca una bolsita con una parte de los dulces preparados el día anterior y se los da a su, ahora, novio.

Ah~ se sentía genial decirlo...

Y JungKook, aceptando con una dulce sonrisa aquellos dulces, se despide dándole un tierno besito en la mejilla de su pequeño y yéndose a su salón, muy feliz y sonrojado por todos los sentimientos que le causaba el menor, con su lobo saltando de aquí para allá, pero mostrando una mirada seria para aquel que lo observa en el pasillo.

–Hasta luego, hyung...

🍯

Una vez que toco el timbre que indicaba que llegó el receso, todos alumnos salían de sus aulas pero uno en particular salía saltando, desplorando felicidad en cada saltito que daba.

Iba tan concentrado pensando en su novio, que no se dió cuenta de las miradas que le daban Seokjin y su grupito, y en otra parte estaba Yoongi junto con Namjoon, su amigo.

Mientras tanto Jungkook se encontraba charlando con un compañero sobre un trabajo que debían entregar en la semana.

–¿Vamos Jungkook?

–No, lo siento... Iré con mi novio pero si quieres, puedes venir con nosotros. ¿Eh? Qué dices.

–Esta bien, vamos.

Luego de esa mini conversación, el alfa y el beta empezaron a dirigirse hacia el patio para encontrarse con Park Jimin.

Estaban tan centrados en encontrar al menor que no se fijaron en que alguien se encontraba dirigiéndose rápidamente hacia la misma dirección que ellos, hasta que aquel chico chocó con Hoseok, el compañero de Jungkook, y los dos cayeron al piso.

–¡Lo siento! –Se disculpó aquel chico.

–Tranquilo... –Respondió Jungkook mientras ayudaba a su acompañante a levantarse.

–No, en serio, lo siento, fue mi culpa...

–Esta bien, los accidentes pasan –Esta vez habló Hoseok.

–Por cierto, me llamo Kim Taehyung, un gusto y hasta luego. –fue lo último que dijo antes de salir corriendo, de nuevo.

Los dos chicos confundidos y sin saber bien que es lo que acababa de pasar, prefirieron seguir también con su camino.

–¡Hyung! ¡Aquí, hyung! –Se escuchó el dulce grito de Jimin a unos pasos de Jungkook y su compañero, –¡Por aquí hyung!.

Los dos chicos se acercaron al menor y empezaron a charlar y a comer los dulces.

–Mhh, están deliciosos... ¿Quién los hizo? –Había preguntado Hoseok al probar aquellos dulces.

–Los hizo Jiminnie~ –Respondió Jungkook abrazando a su novio y regalándole una sonrisa siendo correspondido casi inmediato.

Al cabo de unos minutos, suena de nuevo la campana pero esta vez indicando que el receso estaba terminando, por lo que terminan separándose para ir a sus aulas y continuar con sus clases.

🍯

Al fin habían acabado las clases y el lobo de Jimin se encontraba tan desesperado por estar junto a Jungkook para refregarse en él y así sentir y tener el aroma del mayor.

Quería estar con su novio preparando más dulces juntos o simplemente pasar el resto del  día con él, ya sea en su casa o en el parque de la otra vez. Estaba guardando sus cosas para luego buscar al susodicho y poder cumplir con lo que tenía planeado pero, no contó con que un grupito se le acercara.

–Vaya, creí que eras nuestro amigo ¿sabes? —era Seokjin, le dedicaba una mirada llena de enojo y otra cosa que no supo averiguar.

–La verdad también pensé lo mismo de ustedes... En serio creí que por un momento tuve amigos con los cuales podría contar... Seokjin hyung, si usted me dice que no fue su intención, se lo perdonaré, por favor... —no pudo contenerse y no contestar, ya no iba a dejar que lo hiciesen sentir mal, como si no tuviera valor alguno.

–¿En serio crees que pediría perdón cuando te pedí solo DOS cosas y no las cumpliste? Sabes, pensé que querías estar con nosotros y ser nuestro amigo.

–Pero, traté de cumplirlo, no sabía que hablaban de mi Jungkook... –Trataba de explicar Jimin a Seokjin y a su grupito, pero se estaba dando cuenta que no valía la pena.– Aunque creo que, como vio, no lo cumpliré... Ustedes me despreciaron y no hablaron conmigo, se alejaron y me dejaron solo... Cabe aclarar que aunque vengan y me digan todas estas cosas y parecer las víctimas, no lo lograrán porque ya le conté todo a Jungkook hyung de ustedes y no dudará en hacer algo para defender a su preciado novio.

Luego de esa no tan agradable charla, decide irse de una buena vez por todas dejándole con las palabras en la boca a aquellos chicos.

Una vez fuera del salón, se dirige hacia la salida, un poco desanimado, para ir directo a su casa pero en el camino se cruzó con su novio.

–¡Hey, Jiminnie! ¿Vam.... ¿Qué, qué pasa?

–N-nada, solo charle con Seokjin hyung y aclaré las cosas, creo ahora ya no volverán a molestar pero me siento mal...

–Shh, tranquilo, ¿sí? Vamos a tu casa, te prepararé tu dulce favorito y veremos películas todo el día ¿vale? Y también te daré mimos... –Eso lo había dicho en voz baja por la timidez que le dió.

–Esta bien hyung, sabe que lo quiero mucho, mucho ¿no? –El pequeño y tímido Jimin ya se encontraba con las mejillas rositas y con una grande sonrisa en su rostro.

–¿Y tú sabes que yo también le quiero mucho más?

Los dos se encontraban en su propio mundo mientras iban hacía la casa del menor que hasta se podía sentir el amor tan sincero que sentían el uno por el otro y más con los aromas que intentaban marcar al contrario y así los demás supieran que se pertenecían.

Estaban tan contentos el uno con el otro que, no importa que hayan confirmado ser pareja el día anterior, pues su amor había nacido en sus años de niñez pero por culpa de un tierno malentendido tuvieron sus caminos separados hasta reencontrarse una vez más.

Con su tierna y bella felicidad, para suerte de ambos, esta vez por nada del mundo se alejaran el uno del otro y enfrentaran todo lo que les venga en el camino.

Fin 💞