Dependencia

prólogo

- K-kacchan, por f-favor, detente - suplicaba el peli-verde mientras cubria su rostro con sus  pequeñas y pálidas manos.

- Cállate deku, no eres más que un débil inútil sin peculiaridad - bufo el ojos carmesí mientras golpeaba a izuku con sus explosiónes.

Haci era la rutina de izuku, bullying constante por parte de katsuki, para después llegar a su casa y decirle a su amada madre que solo había sido un pequeño insidente, aquella rutina de secundaria a la que izuku estaba acostumbrado, no guardaba rencor hacia el chico causante de sus moretones, su corazón no se lo permitía.

Su dependencia no se lo permitía

- Por qué kacchan es tan malo conmigo? - se preguntaba izuku mientras lloraba en silencio en su habitación. Todas las noches se lo preguntaba, sin obtener respuesta alguna, pidiendo a gritos silenciosos la respuesta.

- Eres un inútil sin don, cómo quieres que bakugo te trate como su igual? Eres inferior a el, no eres importante para el - dijo una voz en su cabeza, aquella voz que siempre le decía sus errores y lo inútil y estúpido que es.

- N-no soy un inútil! - se quejo débilmente, odiaba a quien sea que le dijiera todo eso, pero tenía razón, y no nesecitaba que se lo recordaran cada 5 minutos.

- Lo eres y lo sabes; deja de llorar que solo haces que no pueda dormir - dijo ignorante la voz mientras se desvanecia lentamente.

Sus noches eras largas y dolorosas, pero no podía decir que solas, pues tenía siempre a esa voz en su cabeza diciéndole sus errores diariamente.

Cansado de su vida....

Cansado de vivir....

Tomo una pequeña decisión.

- Izuku! N-no me dejes cariño! - rogaba su madre mientras lo abrazaba fuertemente mientras esperaba a que la ambulancia llegase, con desesperacion apretaba la muñeca de su amado hijo parando la hemorragia en esta.

Minutos después entraron los paramédicos quienes atendieron con rápidez al más joven de los midoriyas. Su madre lloraba mientras seguía a los enfermeros hasta la ambulancia, su mirada se tornaba apagada y vacía.

por qué su hijo se intentaría suicidar?

Por qué?

Por qué no le contó los problemas para intentar resolverlos junto?

Por qué? Por qué? Por qué?!!

- Izuku midoriya está estable, sin embargo nesesitamos mantenerlo en observación - informo el médico antes de poner una mano en el hombro de inko antes de continúar hablando - sin embargo,creo que debería hablar con su hijo, las razones por las que lo hizo, nesesitara un psicólogo - aconsejo el medicamento antes de darle una sonrisa a la peli verde.

- Gracias - susurro inko mientas limpiaba sus lágrimas, pensaba en las palabras del doctor, realmente necesitaba hablar con su hijo, no quería que este lo dejara sola, no quería que alguien más se fuera.

- Izuku! - exclamó la peli verde mientras se acercaba con rápidez para abrazar a su hijo - cariño, p-por que? P-por que me abandonas? - pregunto entre sollozos mientras abrazaba a su hijo, izuku no respondía, tenía la mirada perdida mientras abrazaba a su madre, su corazón se rompía al oír las palabras de su madre.

- Lo siento mamá... No quiero dejarte sola, solo.... Estoy cansado - los ojos de izuku comenzaban a cristalizarse - estoy cansado de todo, de vivir, de ser quien soy, de no poder ser... Ser un héroe - sollozo mientras abrazaba a su madre mientras acariciaba sus suaves cabellos, se sentía una horrible persona por hacerle daño a su madre, pero no encontraba otra salida.

Inko lloraba mientras escuchaba las palabras de su hijo, cada una de ellas le rompía el corazón.

- Cariño - dijo entre sollozos - lo siento - se disculpó la peli verde mientras abrazaba fuertemente a su hijo - l-lo siento por no poder darte una peculiaridad, por no poder enseñarte a amarte tal y cómo eres, por ser una mala madre.

El corazón de izuku se rompió, al igual que el de su madre, cada palabra le dolía.

- Perdoname tu a mi mamá, no pude decirte nada sentía que solo sería una carga más para ti - dijo mientras abrazaba a su mamá, cómo si no la quisiera soltar nunca - pero no sirvo para nada... Ni para matarme sirvo.

- No digas eso izu, eres una gran persona, y eres muy útil, me ayudas demaciado, nunca serás una carga para mí - abrazaba a su hijo de vuelta, su corazón le dolía demasiado.

Ambos estaban hay, llorando, mientras se abrazaban, izuku se sentía mal por intentar dejar sola a su madre, e inko se sentía mal por haber estado para su hijo cuando lo nesesitaba...

El tiempo paso, izuku fue a terapia durante el último trimestre, mismo tiempo en el que conoció a all might, mismo tiempo en el que recibió el one for all, razones por las que dejó de asistir al psicólogo.

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Hola a todo! Me alegra anunciar este nuevo fanfic, espero y sea de su agrado, sin más que decir nos vemos.

Sa-yo-na-ra