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Era un día soleado en la Aldea de la Hoja, el equipo 7 se encontraba de mal humor llevaban más de una hora esperando a que su Sensei llegará.

Sasuke se encontraba de mal humor, no pudo dormir en toda la noche, ¿La razón? las pesadillas habían regresado.

Sakura se encontraba cepillando su larga y rosada cabellera, ella también se encontraba de un humor bastante malo, ¿La razón? un atractivo y malhumorado pelinegro no salió de sus pensamientos en toda la noche, por lo cual no había dormido casi nada.

A diferencia de estos dos Naruto se encontraba más que animando pues hoy tenían una misión muy importante en la cuál podia demostrar el avance que había logrado entrenando arduamente, lo único que lo molestaba era el impuntual de su Sensei.

—Hola Chicos—saludó Kakashi agitando la mano—¿Porqué las caras largas?

—¡Sensei llevamos esperándolo más de una hora con este calor!—habló Sakura con las mejillas coloradas y las cejas fruncidas.

—Sakura chan tiene razón Kakashi-Sensei ¿Porqué nunca llega a tiempo?—respondió Naruto— ¡Ya perdimos mucho tiempo en el que pude haber probado mis nuevas técnicas!

—Ambos ya cierren la boca, solo retrasan más la misión—habló Sasuke enojado—Ya dinos de que se trata Kakashi.

—Bien cálmense—carraspeo—iremos a la Aldea de la roca por unos pergaminos importantes estos contienen Técnicas muy peligrosas y se teme que sean usados con malas intenciones, no les voy a mentir chicos, está misión no sera sencilla se rumorea que el camino a está lleno de bandidos peligrosos y se dice que le tienen mucho rencor a los ninjas—suspiró Kakashi—Por eso quiero que vayan siempre alerta, ¿Quedó claro?

—Si sensei—respondieron Sakura y Naruto al unisono.

Sakura había recuperado por completo su animó, recordó el objetivo que se había propuesto, dejar de ser una carga para su equipo, al igual que Naruto había entrenado para no ser siempre rescatada por sus compañeros o su Sensei y también en el fondo de su corazón sabia que esto también era para que Sasuke que sintiera orgulloso y dejará de pensar que es una carga o como solía llamarla una "molestia".

Por otra parte Sasuke se encontraba más tranquilo, siempre que iniciaba una misión se forzaba a sí mismo para mantener sus emociones neutrales y asi siempre estar preparado por si sucede alguna batalla.

Con está mejoría de humor él Equipo 7 se puso en marcha.

Ya llevaban varias horas caminando y hasta el momento no había ocurrido ningún ataque, pero ya empezaba a meterse el sol.

—Muy bien Chicos busquemos un lugar para acampar.

Algunos metros adelante encontraron una cueva.

—Este parece un buen lugar y esta cerca del rio aun mejor—sonrió Kakashi—Naruto y Sasuke vayan por agua y madera, Sakura y yo pondremos los sacos para dormir y las piedras para la fogata.

—Bien—contestaron al unisono.

—Kakashi Sensei no cree que tuvimos mucha suerte al encontrar esta cueva—sonrió dulcemente la fémina del equipo.

—Vaya que la tuvimos—esté le devolvió la sonrisa.

Kakashi Hatake le tenia un gran aprecio a la pequeña flor de cerezo, esa inocencia y amabilidad lo hacían querer protegerla siempre, pero él mejor que nadie sabia que ella debía aprender a hacerlo por sí misma mas ahora que dejaba de ser una niña y se estaba convirtiendo en una jovencita, por esa razón debía tener esta conversación con ella.

—Sakura—la llamó—Ven siéntate un momento quiero hablar contigo.

—¿Que sucede Sensei?—preguntó curiosa.

ConfrontaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora