Las chicas caminaron por unos 15 minutos, pero la peliazul no dejaba de hacer preguntas
Kyomi: acabamos de pasar tres heladerías ¿Por qué no compramos ahí?
Mina: conozco una mejor, su helado de fresa y durazno es delicioso
La peliazul se quedó sorprendida por tal respuesta, no entendía como es que la pelirosa sabia eso
Kyomi: ¿Cómo lo sabes?
Mina: ¿Ah?
Kyomi: fresa y durazno ¿Cómo lo sabes?
Mina: ah
Kyomi: solo lo sabe Hawks y kats...
La pelirosa sonrió mostrando sus dientes mientras ponía su dedo índice enfrente de sus labios
Mina: tomaremos un metro
Kyomi: ¿Ah?
Mina: ¡Será divertido!
Kyomi: ¿No crees que es muy lejos?
Mina: creeme que merece la pena
Tomaron el metro y llegaron a la salida de la ciudad, caminaron más tiempo hasta llegar a un pequeño bosque
Kyomi: ¿Qué hacemos aquí?
Mina: ¿Puedes ver esa cabaña?
Kyomi: si
Mina: vamos ahí
Kyomi: ¿Y el helado?
Mina: olvídate del helado
Ambas caminaron hasta llegar a una cabaña, la peliazul se sentía extrañamente feliz y la pelirosa tenía una gran sonrisa que llegaba de oreja a oreja
Kyomi: ¿No vamos a entrar?
Mina: solamente vas a entrar tu
Kyomi: ¿Ah?
Mina: te tenemos una sorpresa
Kyomi: ¿Tenemos?
Mina: ¡Entra!
La chica noto que había algo dentro ya que desde las ventanas se podían ver una luz cálida lo cual le proporciono valentía para entrar sola
Kyomi: ¿Hola?
Había un lindo olor dulce, que resultaba delicioso al no ser tan fuerte, proveniente de aquellas flores azules que había por todo el lugar, la luz cálida provenía de las velas mientras la chica admiraba todo esto miro a su lado derecho notando una puerta entreabierta, camino hacia ella y la abrió lentamente notando que la habitación estaba completamente oscura si no fuera por una pequeña vela que había al otro lado del lugar.
La peliazul estaba distraída tratando de acostumbrar su vista a la falta de luz provocada por cerrar la puerta de la habitación cuando sintió que dos brazos rodeaban la cintura además de un peso extra en su hombro izquierdo, esto la hizo dar un pequeño salto pero al notar un pelo punteagudo rozando su cuello entendió de quien se trataba
Katsuki: tonta
Kyomi: idiota
Katsuki: creí que no vendrías
Kyomi: no sabia que vendría
El cenizo soltó una pequeña risa para después voltear hacia el a la chica que lo miraba con unos ojos atontados, tan tranquilos y dulces que hizo latir aún más rápido su corazón
Sin más comenzaron a besarse de una manera en la que reclamaban los labios del otro, con cada toque dejaban en claro a quien pertenecían, aún que sabían que aquel romance no era correcto no podían evitar amarse, no podían evitar que sus corazones latieran como locos al sentirse cerca o tan solo pensando en el otro, su amor era más grande que cualquier otra cosa, que loco fue que con tan solo una noche se enamoraron, que loco fue encontrarse de tal manera, una menera en la que nadie espera conocer al amor, el destino quiso juntarlos de nuevo o tal vez el mundo es tan pequeño para encontrarse una y otra vez sin buscarse, no sabían con exactitud que pasaría con ellos pero solamente querían embriagarse con sus besos y caricias porque un amor clandestino puede más que un amor aceptado por la sociedad.
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Amor Clandestino Katsuki×tn +18
RomanceSolo es una fiesta Eso pensó kyomi Keuyo (tu) Cuando conocé al chico rubio de ojos rubíes y no puede dejar de pensar en el una pregunta recorre cada milímetro de su mente ¿Me enamoré? ¿Un romance surgirá? ¿Es amor o solo un capricho de ambos? Aquel...