Clase Divina (Buda x All)

Prólogo

El almacén del gimnasio no solía ser limpiado con frecuencia, de eso se habían percatado apenas llegar. El polvo sobre los balones, las telarañas de los techos y la poca luz que entraba por la ventana, los hizo entender que les esperaba mucho trabajo. Zero no tenía problemas para realizar aquello que les habían comandado, pero Buda era un caso diferente. Durante toda la mañana que pasaron realizando la limpieza, los quejidos y resoplidos no pararon de salir de aquel joven.

-Ya casi acabamos, si se puede. -Comentó animado mientras levantaba las cajas del suelo, sabía que faltaba poco para terminar su tarea.

-Poder y querer son cosas diferentes. -Resopló desde su lugar, estaba sentado sobre una vieja banca, mirando al pequeño trabajar.

-Lo sé, pero al menos deberías esforzarte un poco. -Acomodando la última de las cajas, limpió el sudor de su frente. Finalmente había conseguido llegar al final de ese arduo trabajo.

-Yo me esfuerzo todo el tiempo. -Comentó mientras se aproximaba a su compañero por la espalda, cubriendo el pequeño torso con sus brazos, susurraba- Sobre todo contigo.

El tono meloso y pícaro que usó, le erizó la piel a su acompañante. Esa actitud confianzuda que usaba le ponía los nervios de punta, en un buen mal sentido. Sintiendo sus mejillas rojas, agitó la cabeza para liberarse de ese provocativo actuar, ya le habían advertido sus hermanos que no se dejara engañar por él.

-Sasaki dijo que dejaras de molestarme. -Bajando su cabeza intentaba evitar mirarlo, sentía que si lo hacía, estaría siendo tentado.

-Sasaki dice muchas cosas. -Expresó al alejarse, no estaba dispuesto a presionarlo. Notando que ya habían terminado, se estiró para irse.

-¡E-Espera, no puedes irte! -Rogó su compañero al ver que ya se marchaba, no podía dejarlo solo con todo el trabajo- La enfermera nos pidió que limpiáramos su consultorio.

-¿Y crees que le voy a hacer caso a esa vieja? -Guardando las manos en sus bolsillos, estaba decidido a retirarse- Perdón, pero tengo planes.

-Ella dijo que nos recompensaría. -Comentó para atraerlo y vaya que lo había hecho. Buda se paralizó al instante frente a la salida, nada lo hacía más feliz que obtener cosas. Ya sea que fuese dinero o comida, todo lo recibía, era un estudiante necesitado después de todo.

-Está bien, iré. -Sacando su teléfono, comenzaba a buscar el número de aquel conocido.

-¿En serio? Pensé que tenías planes. -Dijo con mucho interés, pensaba que esta vez no cedería y menos de esa forma tan fácil.

-Al diablo los planes. -Respondió con indiferencia mientras esperaba la recepción de su llamada. No pasaba nada si no asistía a lo que tenía programado, amigos tenía muchos.

El lugar al que planeaba ir en la tarde, ya tenía la presencia de aquellos que lo esperaban. El más entusiasta de todos respondió al teléfono en cuanto sonó, el resto lo observó expectante aunque sabían lo que esa llamada significaba. Qin bajó su celular al haber recibido las noticias y sin vergüenza alguna, expresó:

-¡Ese maldito nos dejó plantados otra vez! -Guardando el dispositivo, suspiró con pesadez. Estaba cansado de tener que esperar a su amigo y que este no apareciera.

-Es un irresponsable de mierda. -Soltó el más fuerte de todos mientras mordía aquello que había ordenado. Tenía razón, Buda decía una cosa y luego hacia otra completamente diferente.

-Calla Lü Bu, harás que nos saquen. -Susurró mientras observaba alrededor, sus uniformes eran suficientes para llamar la atención, no necesitaba otro motivo para que los vieran.

-No se puede evitar Sasaki, Buda carece de seriedad. -Comentó mientras tomaba aquel café que había pedido, uno amargo, tal y como le gustaba.

-Pero al menos besa bien. -Habló el resplandeciente líder con una desvergonzada sonrisa, una que los hizo a todos desviar la mirada. Estaban de acuerdo, pero algo apenados para admitirlo.

El irresponsable joven era parte de un grupo bastante popular y desmadroso, un dolor en el trasero para todos los profesores. Esta pequeña banda de problemáticos se componía de cinco jóvenes:

· Qin, la cabecilla del grupo, un joven bastante apuesto que conquistaba a las estudiantes para disminuir sus responsabilidades.

· Lü Bu, la fuerza bruta, un deportista nato, experto en romperle la cara a todo el que se atreviese a molestarlos.

· Sasaki, el más descuidado, un estudiante que contestaba bien tres de diez preguntas, el mayor reprobado del salón.

· Jack, el único rescatable, un joven modesto que cumplía con los estándares de un estudiante, pero que adoraba ver las cosas arder. Le encantaba formar parte de los problemas, aun si no era invitado.

· Buda, el recién llegado, un muchacho que se comporta como todo un gigoló, bastante conocido entre los estudiantes por su fama de casanova.

Desde la llegada de Buda a la academia Ragnarok, las cosas se habían puesto más divertidas de lo usual. El joven del que hablaban se había convertido en su amigo desde que arribó a su salón de clases, su desinterés y descaro les había encantado. Tener un compañero que no se preocupaba por nada, era un alivio para todos, al menos eso creían ellos.

Su presencia en la escuela era innegable, atrapaba las miradas de los estudiantes a cualquier pasillo que recorría y eso mismo lo había hecho poseedor de una mala fama, una que no podía negar. Las chicas estaban encantadas con él, lo seguían y le regalaban cosas a donde fuera que fuese, amaban la idea de un chico malo en su escuela. Los chicos por otra parte, estaban divididos en dos bandos: Aquellos que lo envidiaban por ser un acaparador y aquellos que disimulaban su amor por él, estos últimos eran su grupo favorito.

Viniendo de una clase alta, su comportamiento dejaba mucho que desear. Despreocupado, sinvergüenza y honesto eran las tres palabras que mejor lo definían. Estaba claro que Buda planeaba vivir su adolescencia al máximo, no iba a desperdiciar esa etapa de su vida, estaba en el mejor momento para disfrutar lo que quisiera y a quién quisiera. En plena etapa de descubrimiento, era de esperarse que el romance adolescente tocara sus puertas, sin embargo, este vendría a molestarlo de formas y tamaños muy diferentes.

//Este proyecto está hecho para saciar mi necesidad de ver a Buda recibiendo y dando amor. No planea ser una cosa seria, sino un pasatiempo o más bien, un depósito para mis ideas. ^^'//