Reina Roja

1. DESPERTAR

Moscu, Rusia seis meses después.

Tamar

El parloteo constante de Lilith con Mila cerca de mi, me despierta pero cada día es lo mismo.

Habla,Trato de abrir los ojos, Se aleja.

Cada día es igual y ya me siento cansada de estar sin moverme, quiero escuchar su voz y recibir una buena noticia.

Una noticia que se que no va a llegar porque no tengo que ser muy inteligente para saber desde el fondo de mi corazón que Arón y Clement lograron destruirme, lograron lastimar mi alma y hacerla oscura, caí en un poso sin fondo de donde se que solo voy a salir el día que todos lo que ayudaron a que quedarme sin esa joya valiosa de mi vida,  mueran.

Todos van a morir — hablo en mi interior convencida de que pronto podré moverme para hacerlo efectivo.

— no quiero un hombre Kira no insistas — habla Lilith a mi lado — ya deja de llamar si solo vas a querer conseguir un novio para mi, tú deberías tener uno, estás en londres, en la universidad, tu si que deberías tener un novio.

— ya te dije que no me interesa nadie — la voz de Kira se escucha lejana y un poco mecánica — la mayoría son niños ricos bien portados con infulas de super héroes.

— ¿Y eso no te gusta? — se agrega Mila a la charla.

— soy una mujer de bratva, Si llevo a casa un novio super santo no va a durar nada, y tampoco quiero un niño bueno, que al final termina siendo malos.

— pues eso está bien, te gustan malos.

— quiero uno que sea malo, pero muy bueno conmigo, eso es a lo que me refiero, los de acá son buenos antes los demás pero tratan mal a sus mujeres y son infieles, ¿Puedes creer que un compañero de mi clase de derecho penal trato de besarme siendo casado — bufa con indignación — es un imbécil, y cuando su esposa lo descubrió  y le hizo el reclamo el maldito hijo de puta la golpeó, delante de todos, nadie hizo nada, bueno solo yo que me acerque y le di un rodillazo en sus pequeñas canicas llamadas bolas.

La risa de la rusa me hace querer ir a besarla, mi niña jamás va a volver a dejar que abusen de ella y me siento orgullosa de que sea así.

— ¡que hijo de puta! — exclama Mila.

— ok entiendo, ahora tú entiende que no estoy buscando un novio, no  me molestes más con ese tema — finaliza mi hermana.

¿Cuánto tiempo llevo en esta jodida cama?

Quiero a hablar pero siento que las palabras no me salen, trato de relajarme para mi cerebro le de las órdenes correctas a mi cuerpo.

— Mila, — sigue Kira al parecer al otro lado de la línea — tú estás muy callada, ¿Acaso te gusta alguien?

— claro que no, ¿Quién podría gustarme acá? — revira con falsa indignacion.

— ustedes son tan aburridas — reniega la menor de los kovalenko — mejor me voy a estudiar, nos vemos mañana, espero que mi cuñada despierte pronto necesito que me devuelva a mi hermano, además ella no es tan aburrida como ustedes dos.

— tienes razón, desde hace una año el pakhan es otro hombre, aveces hasta le tengo miedo — habla mi hermana.

Un sonido empieza a llenar el lugar, ¿Una llamada?

— niñas laika quiere unirse a la llamada — expresa Kira.

— ¡necesito que despierten a tamar de una maldita vez! — el grito de laika hace que sienta el movimiento de mis ojos.