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Habían dos hombres altos, uno era morocho y el otro pelinegro, ambos me miraban con preocupación y yo no entendía nada, cuando me iban a decir algo de repente algo...
La tía petunia empezó a tocar fuertemente la puerta de nuestra supuesta "habitación" la tía petunia tenía un hijo llamada Dudley que parecía un ogro y tenía un esposo llamado vernom, otro hombre regordete, la tía petunia era hermana de nuestra madre aunque no se parecían en nada, la tía petunia era desagradable, grosera y era pelinegra mientras que nuestra madre era amable, cariñosa y era pelirroja.
-buenos días, james -dije a mi horroroso hermano que al igual que a mí, teníamos ese sueño constantemente
-buenos días, Annie -respondió depositando un pequeño beso en mi frente, algo que siempre hace desde que vivíamos en esta "habitación"
Harry aunque era un cuatro ojos, era la única familia que me quedaba y era la luz de mi vida
Después de unos segundos escuchamos como alguien bajaba por las escaleras y empezar a saltar en ellas, era Dudley, está acción provoco que polvo cayera sobre nosotros.
Estaba apunto de abrir la puerta cuando Dudley me empujó y cerró la puerta haciendo que cayera sobre el pobre Harry
-levantate Annie, me aplastas -dijo con voz débil, debido a que no tenía casi aire
-ya voy James -dije y me pare de inmediato, y salí de esa "habitación" junto con Harry
niña has las tostadas de mi Dudley, no las quemes o pagarás muy caro -dijo la tía petunia, mirándome con desprecio
Y tú, no quemes la cocina -le dijo a Harry mientras le agarraba la cara a su regordete hijo
"que estúpido es esto" -pense mientras hacía las tostadas
Hoy era el cumpleaños de su querido Dudley y la tía petunia quería que todo saliera perfecto, quería que su pequeño y regordete hijo estuviera feliz en su cumpleaños, lo iban a llevar a el zoológico y era obvio que los mellizos no iban a ir
-apúrense inútiles -bravo el tío vernom, otro hombre aún más regordete que Dudley
Cuando le estábamos sirviendo el desayuno al tío vernom, Dudley empezó a hacer un berrinche porque habían pocos regalos y el queria aún más, así que la tía petunia le dijo que lo iba a llevar a comprar más regalos para que se calmara.
"Ojala Harry y yo recibieramos regalos en navidad" -penso la pelirroja mientras miraba los regalos.
Muchacho ve por el correo!! -grito el tío vernom, hacia el pobre Harry
Harry sin poder oponerse, fue a recoger el correo y cuando estaba revisando vio algo interesante..
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-wow -fue lo único que logró formular Harry, ya que estaba sorprendido de que alguien les enviará una carta
Así que rápidamente entro a la cocina, dónde se encontró con su hermana y le mostró la carta, ella también se encontraba sorprendida, sentía que porfin alguien se había preocupado por ellos, aunque esté sentimiento no duró mucho ya que Dudley les quitó la carta y se la paso a su papá, este rápidamente entro en pánico y llamo a petunia para que viera la carta, ella también se encontró sorprendida
"No puedo permitir que ellos vayan a ese colegio maldito" -penso petunia
Mientras los mellizos se encontraban confundidos ya que no sabían porque tanto asombro, de repente su tío los saco de ahí y boto la carta al fuego mientras murmuraba algo que no lograron entender.
Ese mismo día los llevaron al zoológico y todo fue un desastre, Dudley se quedó atrapado, la tía petunia lloraba y el tío vernom nos miraba como si tuviéramos la culpa de que su hijo se quedará atrapado, cunado llegamos a casa el tío vernom nos golpeo y nos encerró en nuestra habitación
"Mas nunca vuelvan a mencionar la magia" -fue lo único que alcance a escuchar ya que me desmaye.
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