paquete de tres ; kookmin

a cute family and herd

—¿Todo en orden, Mimi?—la voz de YoonGi hizo que Jimin se sobresaltara en su lugar.—¿Todo bien?—el omega mayor volvió a preguntar.

Desde la mañana en la que ambos habían llegado a su bonito local, YoonGi había notado que había algo extraño en su mejor amigo. Estaba más distraído y parecía preocupado por algo en cuestión. Incluso lo había descubierto en varias ocasiones mirándose su bonita pancita de cuatro meses y medio en todos los espejos de la boutique. Así que si, algo le ocurría a Jimin y quería saber que era para poder ayudarle.

—Sí. Todo bien, Gi. No te preocupes.—el menor susurró aún con esa extraña expresión en su rostro.

—¿Seguro?—inquirió.—Sabes que puedes decirme lo que sea, ¿cierto?—Jimin asintió.—Entonces, porque no quieres decirme que es eso que te tiene preocupado y distraído.

A Jimin siempre le ha resultado curioso la forma en la que nunca puede ocultarle nada a YoonGi, como si el omega pudiera ver a través de sus pensamientos; convencido de que por mucho que quiera convencer al mayor de que no hay nada que lo preocupe no lo va a lograr. Y tal vez, él necesita hablar urgentemente de eso que lo tiene preocupado y no hay nadie mejor que YoonGi quien ya ha pasado por dos embarazos.

—Hay algo que me preocupa.—confiesa con voz apagada.—Esta mañana mientras me alistaba noté algo en mi pancita.

YoonGi frunce su entrecejo con levedad, ¿hay algo extraño en el abultado vientre de Jimin? YoonGi no creer recordar haber visto nada fuera de lo normal, a excepción que esta es más grande que una barriga de embarazo de cuatro meses y medio, mucho más grande que el promedio, pero fuera de ello todo parece normal.

—¿Qué notaste?—YoonGi preguntó mientras ladeaba su cabeza.

—Mi pancita es demasiado grande para tener solo veinte semanas.—confesó con preocupación.—Tus pancitas nunca fueron así de grande. Incluso cuando tuviste a Sujin en tu pancita era pequeña, casi ni se notaba, pero la mira ya parece del tamaño de una sandía.

Era cierto, en su segundo embarazo su vientre no se abultó tanto como cuando estuvo a la espera de SooBin. Incluso llegó a preocuparse de que cachorro no se estuviese formando bien en su vientre, pero cuando la doctora le dio la noticia que esperaba una pequeña cachorra y que por tal razón su barriga no crecería tanto como lo había hecho con su bonito y grandote alfa bebé. YoonGi tuvo dos embarazos y ambos fueron completamente diferentes.

Con SooBin no sufrió de náuseas, pero si de antojos por los aguacates y se volvió un poco más perezosos de lo normal, al punto que solía quedarse dormido en cualquier superficie, pero con su pequeña gatita traviesa Sujin su fue todo lo contrario hasta su pobre alfa había sufrido de las náuseas y antojos. A YoonGi aún le seguía causando gracia como Seokjin se levantaba a las cuatro de la mañana para devorar todo lo que se encontraba en el refrigerador, pero sobre todo cómo hacía esa horrible mezcla de yogur, aceitunas y pepinillos, pero que su alfa tanto disfrutaba.

—No todos los embarazos son iguales y menos las barrigas de embarazos, Jimin.—YoonGi dijo tratando de dispersar un poco la preocupación que acogía a su amigo.—La barriga que hice cuando estaba a la espera de SooBin era mucho más grande y notoria a la que hice cuando estuve esperando a Sujin. Y cuando TaeHyung salió embarazado, también su barriga era totalmente diferente. Era grande y puntiaguda, parecía que tenía un volcán en lugar de estar esperando un cachorro.

Jimin recordaba la pancita que el hermano de Seokjin había hecho durante su embarazo y YoonGi tenía razón, su barriga había sido grande y puntiaguda que muchas veces se llegó a cuestionar si estaba embarazado o si le había crecido una montaña en su vientre, pero al final había tenido un solo e inquieto cachorro que tenía al omega y al alfa de este con canas verde y una que otras rojas.