MI DIOS MASCULINO QUIERE MORIR DE NUEVO

CAPÍTULO DEL 61 AL 70

CAPÍTULO 61

Se sentó frente a Zhang Zheng y tomó la limonada que éste le acercó.

Zhang Zheng tenía un esparadrapo en el lado izquierdo de la cabeza, con aspecto de dinero resbaladizo, Huli alargó la mano y tocó la cabeza de Zhang Zheng:" ¿La última vez que le pegaron?".

Zhang Zheng asintió: "Por ese estúpido ganso un .... boca, no lo toques, todavía está verde. Hu Li retiró la mano: "La culpa es nuestra por no haber husmeado antes, No sabíamos que el fabricante era un idiota. Nos hemos metido en un buen lío.

Zhang Zheng suspiró, tampoco estaba muy contento de sacar ese bloque de cosas, encontró una razón para llevar el tema a los negocios. Se considera que las dos personas han abierto una tienda en sociedad. Los dos llevan tiempo asociados y tienen cierta experiencia en allanar el camino, por lo que la discusión fue mucho más fluida. Al final de la conversación, Huli sacó su ordenador del bolso y le mostró a Zhang Zheng su propuesta recién redactada.

Zhang Zheng leyó el programa de principio a fin, cuanto más lo leía, más se alarmaba.

Cerró el ordenador y dijo con asombro: "Rizi, has dejado tu huella". Huli mordiendo la paja:" ¿Ah?"

"¿Todo esto está escrito por ti?" Los ojos de Zhang Zheng están llenos de incredulidad, "Recuerdo que no has leído muchos libros, cómo es que cuando nos encontramos de nuevo, sabes más que yo, tan bien pensado. Nunca había oído hablar de tantos términos profesionales".

"No puedo decir que lo haya escrito yo. Hice un borrador base, y alguien me dio un cambio".

Zhang Zheng: "Xiong ah, tan poderoso, pero también a nosotros como asesor militar?".

Hu Li se rió: "es la última vez que te hablo del jefe".

Los ojos de Zhang Zheng se abrieron de par en par: "Dijiste que no te dejaría mostrar tu cara nunca más, ¿cómo puede todavía ayudarte a conseguir estas cosas?".

"Después del último incidente, tuve un conflicto con él", Huli se encogió de hombros, "pero luego lo hablamos y mejoró, y estuvo de acuerdo en que me dedicara a mis propios asuntos y no me agobiara más".

Zhang Zheng asintió, todavía un poco sorprendido. Miró fijamente a Huli y le preguntó: "La última vez que nos acosaron esos bastardos en Cangku, el hombre que se precipitó y te sacó como si nada, ¿fue él?".

Zhang Zheng se quedó con la boca abierta, y sólo después de un largo rato exclamó: "¿Tu jefe es tan guapo? "

"Una nariz y dos ojos, así de fácil, no está mal". Las palabras se dijeron con modestia, pero el tono de voz contenía un orgullo oculto de zorros y tigres, pero no se podía ocultar.

Zhang Zheng es un poco sacudido, pero: "Siempre he pensado, puede gastar dinero para fletar los hombres y las mujeres para jugar, cómo debe ser de cuarenta a cincuenta años de edad, con una grasa del vientre lleno, también mirar tipo cutre. .... El jefe está tan hinchado, parece joven, y tiene dinero, la gente que se enamora de él debe apresurarse a saltar sobre él, esta cosa todavía puede ser su turno?".

Huri tomó un sorbo de limonada: "Quizá sea el destino. "Vete a la mierda", Zhang Zheng no creía este tipo de mierda, "La condición es tan buena, y puede hacer tantas cosas por ti, no dices que él es el que te envolvió, voy a pensar que es tu novio". Los dedos de Huli hicieron una pausa, no hablaron. Sucedió que el camarero sirvió la comida, Zhang Zheng paró la boca y ayudó a la camarera a poner los platos en la mesa de forma ordenada. Una vez servidos los platos, Zhang Zheng rompió la película de plástico de los cubiertos: "Comamos primero".