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"Freen, si no quieres hacerlo, no lo hagas, entiendo como te sientes, yo tampoco me siento capaz de estar aquí pero tú no tienes que hacerlo" Richie seguía pidiéndome que no me quedara por obligación.

"Ya te dije que quiero hacerlo" estábamos tomando un café en su casa, era bastante acogedora y lo suficientemente grande

"Bien ya no te diré nada" se rindió por fin

"Oye, Richie tengo una pregunta" No se si quería saber, en realidad no me importaba, pero aún tenia esa molestia en mi cabeza.

"¿Que es?" Richie se acomodo los lentes con sus dos dedos.

"¿Donde esta tu madre? No la he visto desde que llegue aquí" ciertamente no quiero ver a esa mujer, pero también tenía curiosidad.

"Oh...ella...pues esta en su casa, la visito aveces, pero parece como si ya no estuviera aquí, cuando hablamos siempre se culpa por lo que paso con Becky" el pareció bastante triste al recordar a su madre, sentí algo de pena, quizás mis palabras ese día la empujaron aún más a su depresión.

"lo lamento"

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"Oye ¿que vamos a cenar?" Pregunto Mon arreglandose el mandil, se veía bastante linda con esa ropa de ama de casa.

"Pues no se que hay en la cocina" me levante de la mesa y me dirigí a la cocina llevándola de la mano, abrimos el refrigerador lentamente esperando encontrar algo delicioso.

"Solo hay huevos y una cebolla" reímos ante las pocas cosas comestibles que habían.

"¿Quieres la cebolla?" Pregunte, note su rostro asqueado ante la idea de comer una cebolla.

"Mejor salgamos a cenar" Se quito el mandil y tomó su bolso.

"Bien, pero yo invito, ya has hecho demasiado por mí" Parecio pensarlo un poco.

"Okey, pero no quiero nada lujoso, un par de crepas serán suficientes" salimos de casa y nos subimos a mi auto.

"Freen ¿realmente no extrañaste este lugar? Es muy hermoso por la noche" Pregunto de pronto.

Me aclare la garganta

"Sí, lo extrañe mucho, pero no estaba lista para volver" rápidamente muchos recuerdos me invadieron, estas calles y mi becbec a mi lado.

"Freen"

Seguía viendo atravez de mi ventana mientras algunas lágrimas involuntariamente me invadían.

Flash back

"¡oye espera!" Grito becky unos metros detrás de mí, corríamos hacia la nueva heladería, supimos que en la inauguración darían helado gratis.

"¡corre!" Corría hacia atrás, ambas estábamos quedándonos sin aliento.

Por fin habíamos llegado a la heladería, era realmente cómoda, tenia varias mesas con formas distintas.

"¿Estas cansada?" Pregunte a mi becky al ver que apenas estaba respirando.

"No, de hecho puedo correr de aquí a Guatemala" Dijo irónica, poniendo sus manos sobre su pecho aliviando su cansancio.

"No suena mal, yo aun puedo correr y Guatemala es un país hermoso" bromee, ella río, el sudor estaba por todo su cuerpo al igual que el mío.

Un Minuto MásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora