Amor de luna

Preocupación

Al día siguiente después de lo ocurrido, fuiste a la cafetería a desayunar y te encontraste con algo muy extraño... König sin su máscara? Rayos.. Es cierto, había dejado la máscara en tu cama, inmediatamente fuiste a tu habitación a recogerla y te devolviste a regresarsela.

"Lo siento por lo de ayer.. Toma" dijiste estirando la mano en la que tenías la máscara hacía el chico que tapaba su cara con su mano... Sabemos que no le gustaba quitársela así que optó por taparse media cara con una mano.

El chico no dijo nada y tomó su máscara para ponérsela de golpe y seguir comiendo.

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Te habían mandado a una misión, casualmente te había tocado ir con König, Roy y personas que ya conocías de la base anterior, debían ir a México ya que había un arma especial que tenían escondida unas personas de ahí que sería usada para atacar la base en la que ustedes se encontraran.

Ya cerca de las personas que la tenían (sus objetivos) comenzaron a atacar, estaban en una especie de bosque así que se te dificultó un poco moverte por el ya que un mínimo movimiento y te escucharían.

Llevabas unos minutos caminando, ya tu y las personas con las que llegaste se habían dispersado por el bosque para dar con el objetivo, hasta que finalmente encontraste a la primera persona, aunque no de la manera en la que querías...

"Buu, oh, te asusté? No me di cuenta chula..." Dijo un hombre que salía de entre algunos árboles, habías caído en una trampa y tus pies estaban atrapados con una especie de cuerda. Hablabas inglés pero gracias a que necesitabas saber un par de idiomas para entrar en el servicio militar, entendiste lo que dijo y en que idioma, español.

"Motherfucker.." Dijiste en inglés tratando de que el creyera que solo hablabas inglés y te soltará por mera lástima tal vez..

-?: No, no, no, acá me hablas español mi reina, o me vas a decir que no puedes hacerlo?- Dijo acercando una pequeña navaja a tu cuello, en ese momento el tiempo se detuvo para ti.

"Voy a morir" Pensaste

No fue hasta que el hombre que te tenía ahí cayó al suelo y su cabeza comenzó a sangrar, alguien le había disparado, te asomaste un poco a ver quien era y no lo podías creer.

"¡König!" Dijiste, no entendías cómo, por que o cuando llegó, todos se fueron por lados diferentes así que no pensaste que alguien llegaría a salvarte.

-König: Meine blume... Te encontré, me tenías tan preocupado.. Yo...- No terminó de hablar, estaba nervioso y asustado.

"Pensará que me gusta... Si me gusta pero... No.." se dijo a si mismo.

Tomó tu mano y comenzó a correr entre los árbol contigo hasta que llegaron a un campamento algo improvisado.

"Quédate aquí" Dijo el chico para comenzar a correr de ahí.

Los disparos resonaban en todo el pequeño campamento y bosque, duraron así un par de horas hasta que finalmente sesaron.

"La encontré" Dijo una voz conocida por el radio que compartían tu y todos los de la base para las misiones.

Estabas orgullosa de el, te había salvado y lo había logrado por el mismo, encontró la arma oculta y evitó el atentado hacía tu base.

Apenas lo viste aproximarse a la pequeña e improvisada cabaña, corriste a sus brazos y lo abrazaste, el te alzó en el aire y comenzó a dar vueltas sobre sus talones.

-Tn: ¡Lo lograste König, lo lograste! Y no solo eso, me salvaste!.- dijiste emocionada aferrandote a el, no eran nada más que amigos pero tu corazón saltaba cada que lo veías aparecer, se habían besado una vez, tal vez era por eso no?

König solo te dedicó una pequeña sonrisa y te llevó como a una princesa a la pequeña cabaña que compartían, oye, dormirías con el?!

Solo pensar en eso hizo que te sonrojaras hasta las orejas.

-König: Te sientes bien Meine blume? Estás roja y... Tu cara está caliente, déjame ayudarte..- Dijo tratando de ir contigo en sus brazos aún a el lugar en donde estaba la persona encargada de curar a los soldados lastimados en misión.

-Tn: No, No, no me siento mal... Puedes bajarme? Jeje...- Reíste nerviosamente pues, estaba cargandote el chico de tus sueños, literalmente.

-König: Bien... ¡Mira la hora! Debemos dormir.- No te habías dado cuenta en que momento habían pasado muchísimas horas más, con el él tiempo se te pasaba volando.

König te volvió a cargar como a una bebé y te llevó a la cama, te acostó y se arrodilló a un lado de la cama.

"Buenas noches princesa..." escuchaste a König decir antes de que cerraras los ojos y te durmieras ahí, estabas tan relajada por alguna razón que no te costó dormir...