No mires la Luna -Spartor-

II

(...)

—Ochocientos veintitrés, Ochocientos veinticuatro... ¡Me rindo!— El de saco azul tiró el mineral —¿¡No debió amanecer ya!?—

—Tienes toda la trompa llena de razón ¿Qué hora es?—

—Son las... ¡Es la una de la tarde!—

—¿¡La una de la tarde!?—

—¡La una de la tarde!— Contestó de nuevo el castaño claro —Debió amanecer hace horas—

—Ay no, esto es muy malo— Tan pronto terminó de hablar su estómago soltó un ruido bastante sonoro.

—Mierda, verdad que no has comido nada— Se levantó del sofá y lo agarró de la manga —¿Por qué no dijiste nada?— De jalón en jalón lo llevó hasta la cocina.

—Es que me dio penita jeje— Cuando el chico lo dejó frente a la mesa entendió que esperaba, se sentó como si fuera un niño bueno.

—Por obvias razones no puedo hacerte una comida de catálogo, pero si algo que te calme la tripa al menos—

—¿Desde cuando cocinas?— Era bien sabido la falencia culinaria del castaño claro.

—Desde hoy— Pasaron unos minutos, Sparta seguía tratando de hacer algo sin quemarlo —Ya te dije que no me ayud— No terminó la frase, los brazos del mayor rodearon su cintura y el mentón del chico se había clavado de una forma leve en su hombro —¿Qué haces?— Lo volteó a ver, lo siguiente que pasó fue un beso en su mejilla —¡Oye!—

—Estoy tratando de seducirte para ver si ya me dejas ayudarte—

—Idiota, eso es de jotos—

—No me has apartado y tampoco te estás quejando, tal vez si lo seas— Bromeó de nuevo, era normal que jugaran de una forma algo coqueta y atrevida pero nunca lo llevaron al siguiente nivel, contacto físico.

—¡Porque me agarraste desprevenido! Quita y prepárate algo— Trató de apartarse pero el contrario no se lo permitía —¿No querías cocinar? Pues déjame ir y traga algo antes que te desmayes—

—No creo que tengas algo mejor que hacer, ¿y si te enseñó a cocinar?— Mantuvo sus manos quietas para que el chico no se escapara —¿Quieres que te enseñe a hacer unos ricos omelesttes o unos panqueques?—

—Ninguno, aparta bicho—

—No te enojes— Para evitar que se moviera acercó más su cuerpo al menor, luego le dio otro beso —Deja de ser tan gruñón, ya pareces Tolli—

—No me compares con el vinagre— Suspiró al ver que no tenía escapatoria —Bien, enséñame pero al menos dame espacio—

—Pero así pierde el chiste, Spartita~— Por fin retiró sus manos de la cintura ajena y las llevó a las manos del contrario —Yo te guió—

Conforme avanzaban en la receta el de ojos marrón ya ni se molestaba por la invasión en su espacio personal, casi que lo disfrutaba. Al momento de batir la mezcla hubo un ligero detalle, el movimiento aumentaba el roce entre los dos cuerpos.

—Y listo, tienes la masa lista para unos ricos panqueques, le pones un poco de aceite o mantequilla al sarten y cuando le salgan burbujas lo volteas— Se estaba alejando mientras trataba de mantener la vista del menor en su rostro —Me avisas como te va—

—¿A donde tan rápido? Te quedas hasta que terminemos esto, que si quedan mal te voy a dar una receteada de windows por el suplicio—

—Creo que puedes terminar solo, ¿no te crees capaz?— Quería tantearlo un poco para poder escapar —¿El Sparta no puede sin ayuda?—

—Sé lo que quieres hacer y no va a funcionar, inútil, te quedas— Lo acercó nuevamente a él. En unos minutos ya tenían una pila de panqueques recién hechos y con buen color.

—Listo. Siéntate en lo que yo voy al baño—

—¡Que no! Tú me torturas, yo te torturo, debemos tener un equilibrio— Con un plato en la mano y el otro tomando el brazo al castaño de ojos heterocromáticos fue directo a la mesa del comedor —Sentado—

—¡No soy perro!— Reclamó mientas acataba la orden —Pero si soy educado—

—Muy bien, toma— Le dio un tenedor y sirvió un frasco de miel.

—¿No tienes más platos?— Tenía urgencia por salir corriendo, pensaba atragantarse con la comida para que el contrario no le reprochara nada.

—Vivo solo y soy YouTuber, el chiste se cuenta solo— Movió la silla que quedaba diagonal a la que usaba el castaño oscuro —¿Qué? Es mi casa tío, me siento donde me de la gana—

—Pues no, no te veo capaz de sentarte donde quieras— Sonrió al ver que el chico captó el doble sentido en esa frase, se arrepintió casi al instante cuando vio la expresión del oji marrón —Lo decía en broma, tú lo dijiste, son cosas de jotos— Mayor fue su sorpresa cuando lo vio levantarse —Sparta que eres un cerdo y liviano no eres—

—No estoy gordo y te dije lo repito, equilibrio— Como el mayor no dejaba mover la silla el castaño claro movió la mesa y se sentó de golpe, dándole la espalda al contrario.

—¡Ay mis hijos!— Cuando Sparta movió de nuevo la mesa para acercarla el contacto aumentó el problema del más alto —No te muevas tanto, pareces lombriz—

—Calla y traga— Partió uno de los panqueques a los cuales ya les había agregado la miel y le dio el bocado al chico —Huevos conque tengo que hacerte avión pa' que abras la boca— Esta vez fue él quien recibió una mirada enojada —¿Cosas de jotos?— Como estaba insistiendo en que no se moviera no se le ocurrió una mejor idea que hacerlo, esta vez si recibió el bocado —Si se pudo—

—Me estas poniendo las cosas muy duras— Refirió a su condición actual y la actitud del castaño claro.

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Hola buenaaas, como quiero subir cap pero tengo un serio tic con los números impares pues lo subo hoy.

Y como dato que nadie me pidió: Soy bruja XD

Antes de que Raptor subiera la parte dos del video yo hice algo parecido a lo que pasa jajaja... Pero como dio más trama me cambia un poco la idea de lo que tenía planeado, detalles.

Gracias a quienes les está interesado la historia, me anima mucho :3

Se me cuidan.