Dolor

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Lo que creí sería una discusión de un dia se convirtio en una semana. No había ignorado a Jungkook toda la semana pro activamente, a decir verdad, simplemente no tenía tiempo para él ni para nadie.

El nuevo grupo por capacitar me estaba dando dolores de cabeza todos los días, a eso sumarle el hecho que mi jefa decidió irse de vacaciones por tres semanas por lo cual me cedió parte de su trabajo. Genial. Llevaba desde el Viernes pasado saliendo dos horas después de mi hora de salida para poder terminar el trabajo que tenía a mi cargo. Y mis horas de almuerzo se resumían a un sandwish de la máquina expendedora al final del pasillo, encerrado en mi oficina mientras adelantaba el trabajo que tenía, por lo cual no había vuelto a quedar con Jungkook a la hora de almuerzo.

Él no sabía lo ocupado que estaba por lo cual estaba seguro que pensaba que simplemente lo estaba evitando. Doblemente genial. Ni siquiera tenía tiempo para explicarle porque al llegar a mi casa en lo unico que podía pensar era en acostarme en mi cama y dormir por tres años, por lo cual tampoco habíamos vuelto a jugar en línea.

Y con Minki, sabía que estaba molesto porque no había podido verlo esta semana. Me había pedido quedarme con él el Lunes pero tuve que rechazarlo ya que debía quedarme hasta tarde en la oficina. Claramente eso le molestó y ahora simplemente no me habla. De nuevo.

— ¿Te quedarás hoy también, Taehyungie?

Por mucho que me costara admitir, el tener a Lucy como asistente durante esta semana me ha venido fenomenal. Ella era muy buena en su trabajo, la mayoría del tiempo me ayudaba en gran parte de mi trabajo y siempre se quedaba conmigo al menos una hora al final del día hasta que prácticamente la corría de la oficina porque no quería que se quedara más tiempo, ella también vivía lejos de la oficina.

— Creo que mejor me llevaré el trabajo a casa. Aunque odio hacer eso.

— Oh Dios, no. La casa es para descansar, no para trabajar. — soltó en un suspiro, a lo que asenti. — Deja todo asi y mañana a primera hora te ayudo a actualizar el progreso del grupo.

— ¿De verdad? — pregunté con mi mejor voz de niño perdido.

En estos momentos olvidaba por completo la razón por la cual la odiaba. A decir verdad no es tan mala como pensé. Mierda, Jungkook se estuviera riendo de mi si me escuchara decir eso.

Jungkook. Hoy era Miércoles.

— ¡Claro! somos un equipo, estamos para ayudarnos. No te cargues tu solo de trabajo, tranquilo. — me dio una sonrisa, y por primera vez no la vi irritante.

— Gracias, Lucy. Tomaré tu palabra y por primera vez en esta semana, me iré temprano. — me puse de pie y comencé a recoger todas mis pertenencias y dirigirme a la salida para toparme con Jungkook de pie afuera de mi oficina.

— ¿Terminaste? — cuestionó con su mirada sobre mí. Estaba a punto de responderle pero una voz me interrumpió.

— Si, claro. Termine hace un momento pero necesitaba sacar a Taehyungie de esta oficina primero. — contestó Lucy con una sonrisa en su rostro.

Oh.

No pude apartar mi vista de Jungkook y por lo visto él tampoco, lo cual seguro no pasó desapercibido para Lucy ya que volvió a hablar.

— Eh, ¿quieres venir con nosotros Taehyungie? Iremos al cine a ver la nueva película de Marvel, aun no la quitan de cartelera.

— Ya la vi. — Con Jungkook. Finalmente dirigí mi mirada a ella y le sonreí genuinamente. — La vi justo el dia del estreno, y honestamente estoy muy cansado. Vayan ustedes, disfruten.

My Story | KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora