Quiero dedicar este libro a todos aquellos especialistas que han acompañado mi tratamiento de
quimioterapia en los momentos más dolorosos y divertidos que han habido en su recorrido,
con sus baches y sus saltos prolongados. Que han estado conmigo incluso cuando la
quimioterapia no estaba de por medio, sino que estábamos dando vueltas por el hospital
hablando acerca de enfermedades, mitología griega y signos zodiacales. Gracias por esas tan
bellas y reconfortantes amistades.
A amigos, compañeros de trabajo, profesores, compañeros de estudio, jefes y demás personas
que siempre han preguntado acerca de mi bienestar y siempre se preocuparon por la tos que de
vez en cuando salía de mí de la nada y los preocupaba.
Gracias.
Porque han hecho que me sienta muy acompañada en este proceso tan silencioso y tortuoso.
𝒀 𝒆𝒔𝒑𝒆𝒄𝒊𝒂𝒍𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆 𝒂 𝒒𝒖𝒊𝒆𝒏 𝒔𝒆𝒏𝒕𝒊 𝒎𝒊 𝒑𝒂𝒑á
𝐸𝑠𝑝𝑒𝑟𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑙𝑎 𝑝𝑒𝑟𝑠𝑜𝑛𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑙𝑜 𝑙𝑒𝑎 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑎 𝑒𝑛𝑐𝑜𝑛𝑡𝑟𝑎𝑟 𝑒𝑛𝑡𝑟𝑒 𝑒𝑠𝑡𝑎𝑠 𝑙𝑖́𝑛𝑒𝑎𝑠 𝑒𝑙 𝑐𝑜𝑛𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜 𝑎 𝑠𝑢𝑠 𝑙𝑎́𝑔𝑟𝑖𝑚𝑎𝑠 𝑦 𝑒𝑙 𝑎𝑏𝑟𝑎𝑧𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑙𝑒 ℎ𝑎𝑐𝑒 𝑓𝑎𝑙𝑡𝑎 𝑎 𝑠𝑢𝑠 𝑑𝑒𝑚𝑜𝑛𝑖𝑜𝑠.
𝐴𝑛𝑔𝑢𝑠
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𝐄𝐥 𝐂á𝐧𝐜𝐞𝐫 𝐝𝐞 𝐧𝐨 𝐯𝐢𝐯𝐢𝐫
SpiritualCuando una enfermedad entra a tu vida, te envuelve en tratamientos, dolor, agonía, en medicamentos y en múltiples cosas que se desencadenan una catástrofe, ¿O...No? Esas fueron cosas que ella decidió ocultarle a todo el mundo, a su familia, amigos...