Te vi llorar
¡Yo te vi llorar! Tu lágrima, mía,
en tu pupila azul brillaba inquieta,
como la blanca gota de rocío
sobre el tallo delicado de la violeta.
¡Te vi reír! Y un fértil mayo,
las rosas deshojadas por la brisa
no pudieron dibujar en su desmayo
la inefable expresión de tu sonrisa.
Así como las nubes en el cielo
del sol reciben una luz tan bella,
que la noche no borra con su beso,
ni eclipsa con su luz la clara estrella.
Tu sonrisa transmite la fortuna
al alma triste, y tu mirada incierta,
deja una dulce claridad tan pura
que llega al corazón después de muerta.
Lord Byron
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El poeta maldito || Benedict Bridgerton
RomanceEl corazón de Harriet Chapman está dividido. Es su primera temporada debutando en sociedad y debe encontrar marido. Pero la presencia de un "poeta maldito" con el que mantiene correspondencia desde hace más de un año hace que esta hacienda no sea se...