EL NERD

GANANCIAS Y PERDIDAS

Jungkook estaciono su moto frente a aquella casa y entro encontrándose en la sala a Taeyang junto a Jin.

Saludo al último y solo escucho una risa pequeña de Taeyang.

Se sentó al lado de Jin y le susurró.

-Esto es lo ultimo Jin, después me retiro para siempre.

Jin asintio y extendió un plano en la mesa que tenían frente a ellos.

-Bien este será nuestro robo mas grande y último.

Los cinco chicos que se encontraban ahí asintieron.

Jin continuo hablando mientras les señalaba las posiciones donde se encontrarían y lo que deben hacer.

-¿Tienen alguna duda?

Taeyang alzó su mano y tanto Jin como Jungkook lo voltearon a ver.

-Si se me atraviesa alguna persona que quiera intentar hacer algo estúpido ¿Puedo dispararle?

Jungkook noto que la pregunta fue más para el que para Jin.

-¿Que tipo de persona Taeyang?

Pregunto el pelinegro poniéndose de pie.

-No lo sé, puede ser un chico de cabello rosa, me lo debes.

De igual manera se puso de pie y Jungkook quiso lanzarse sobre el pero Jin fue más rápido.

-Se calman lo dos, aquí nadie va a matar a nadie y tampoco se van a golpear ¿Entendido?

Taeyang y Jungkook se miraban y Jin alzó más su voz.

-Dije ¿Entendido?

Ambos asintieron.

-¿Cuándo y a qué hora?

Pregunto Jungkook.

-El próximo miércoles, el banco abre a las 9:30, nosotros llegares ahí a las 10.

Los cinco chicos asintieron y cada quien se fue por su lado.

Jungkook llegó a su departamento y saco una lata de cerveza de su refrigerador.

>>Solo esto y ya, se acabó.

Se repetía una y otra vez, después de todo que podía salir mal.

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El inesperado miércoles llegó y tras esas puertas de banco se encontraba todo un grupo de personas en el piso, la mayoría con lágrimas en los ojos y otros solo asustados.

Los 3 asaltantes caminaban por el banco mientras que los otros dos se dedicaban a guardar el dinero.

-Deja de voltear a todos lados y guarda el maldito dinero aquí.

Taeyang fue el encargado de gritarle a aquella mujer quien ante el susto comenzó a sollozar.

-Tranquila preciosa, solo haz lo que te dice y todo se acabará.

Está vez fue Jungkook quien hablo y la mujer se calmo asintiendo para después guardar todo el dinero.

Así se fueron de uno en uno hasta obtener todo el dinero de ese banco.

-Estamos listos, vámonos.

-No, aún nos falta la mejor parte.

Jungkook negó.

-Con esto es suficiente, jefe vámonos ya.

-Nada es suficiente, jefe usted de la orden.