Capítulo 05

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Jimmy estaba dolorido con algo que era solo segundo al empalamiento. Sus poderes de Dark-Hunter debería haberle curado para ahora... esto le indicaba que tan graves habían sido sus heridas para que estuviese todavía dolorido de ellas.

Se volvió cuando oyó que la puerta se abría.

Era Tommy, y allí por un segundo regresó quinientos años atrás cuando habían compartido esa habitación, cuando Tommy había estado dispuesto a unirse a él cada noche.

Una vez que éhabía reclamado su casa después de su muerte, le había costado grandes dolores hacer que su habitación bajo el corredor fuese justo igual a como cuando Tommy había vivido aquí. Pero aunque sus cosas personales habían estado allí, nunca la había usado más que para vestirse. En contradicción a las costumbres de aquella época, Tommy había compartido esta habitación con él para dormir... y para otras cosas cuyo recuerdo lo calentaban completamente.

Haciendo una mueca de dolor, todavía podía imaginar la manera en que su olor había impregnado sus sábanas y almohadas...

La manera en que se había aferrado a su piel.

Se fuerte, Jimmy. Tenía que serlo. La última cosa que quería era dejar que Tommy lo hiriera más de lo que ya lo había hecho.

Tommy entró vacilando un poco antes de bajar la bandeja sobre la mesa junto a su cama. Su pelo estaba peinado hacia atrás y se veía extremadamente cansado. Aun así seguía siendo el hombre más hermoso que hubiese visto.

—¿Todavía prefieres tu filete servido con cebollas y manzanas guisadas?

Su pregunta lo sorprendió. No podía creer que recordase eso. Asintiendo, lo miró levantar la tapa de plata del plato y descubrir las cebollas.

—¿No vas a comer? —le preguntó cuándo Tommy le tendió el plato.

—Acabo de desayunar algo. Realmente no tengo hambre.

Jimmy negó con la cabeza ante él.

—Coge el plato del pan y comparte esto conmigo.

—Lo necesitas tú.

—Sobreviviré y puedo enviar a por más. Ahora trae el plato.

Tommy arqueó una ceja ante su tono irritado.

—Por favor —añadió él, suavizando su voz.

Tommy se detuvo ante eso. Este era un hombre que solía impartir órdenes. Que supiera, él nunca había usado la expresión, por favor, antes. Su corazón se suavizó, tomó el plato e hizo lo que él le dijera.

—Gracias —dijo Tommy cuando Jimmy dividía su comida con él. —Ya de paso, tengo un hueso que comentar contigo.

—¿Solo uno?

Tommy sonrió a pesar de sí mismo.

—Por el momento.

—Entonces no puedo esperar a oírlo —dijo Jimmy antes de probar su filete.

—¿Bram y Stoker?

Él se rio profundamente, un sonido resonante.

—Era apropiado, creo yo.

Tommy le gruñó. Pero no había mencionado su habitación, la cual había visto la noche de su llegada. Eso había sido un misterioso recordatorio de su pasado, y eso le había dicho lo mucho que Jimmy lo amaba. Incluso si él lo negaba, sabía la verdad. Todo había permanecido igual como si hubiese estado esperando su regreso en algún momento.

Cuando lo había visto, se había sentado en las escaleras y llorado su propia estupidez..

Forzándose a apartar ese pensamiento, se aclaró la garganta.

E) MII2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora