CAP 8:
DOMINGOS PENOSOSTras cada culto la gente permanece hablando entre ellos, como una despedida alargada. Narran lo que hicieron el día de ayer o la semana pasada aunque volverán a verse el miércoles o el jueves. Los padres de Gulf hablan con el predicador invitado mientras que el chico los observa desde el banquillo dónde anduvieron toda la mañana. No le interesa hablar con ese tipo ni con nadie. Su hermana habla a una esquina con las chicas de la iglesia, pero todas se ven presumidas.
Quién único se acerca a Gulf es Nanon. —Disculpa, ¿te importaría si me siento aquí? Es que no parezco interesarle a nadie y tu, bueno, estás aquí sentado. Solo.
Gulf le dice que no es ninguna molestia y que puede tomar asiento, incluso se hace a un lado para darle más espacio. El chico se sienta. Primero formal. Ambas manos cerradas sobre sus rodillas como si tratara con un jefe y no una persona normal. Tenso.
—Es difícil conseguir amigos en una iglesia común sin destacar ni hablar enfrente. Mi nombre es Gulf.
—Mucho gusto. El mío es Nanon. Mis padres descubrieron esta iglesia recién, espero nos llevemos bien.
—Seguro que sí.
Nanon estira una mano en su dirección. Gulf observa la mano y va acercar la suya cuando Nanon la aprieta primero. Ambos ríen entre sí.
—Agarras confíanza rápido, ¿no? Es solo que primero eres tímido.
—Ay, ya me descifraste. Sí, soy así.
—Jum. Yo también, de hecho estoy castigado y no puedo alejarme de mis padres o lo próximo que harán será encerrarme con cadenas en un sótano.
—¿Tienes un sótano?
—Nah, a veces mi imaginación me supera.
Nanon ríe con las locuras de este chico. —¿Y si sales conmigo? Somos dos chicos de la iglesia comenzando a conversar. Además, hay una tienda cerca que vende mantecados. — El chico realmente se esmera para entablar una amistad. La mejor manera de ganarse a un hombre es con el estómago. No es amo de casa, pero esa frase le queda como anillo al dedo por la expresión esperanzadora en su rostro. Parece un golden retriever.
—Mm. ¿Intentamos preguntarles a mis padres?
—¡Claro! Sí.
🍫
Milagrosamente, los dejaron salir a comprar mantecados y en unos minutos ambos caminaban hombro a hombro con helados frente sus pechos. Dos vasitos plásticos pequeños con cucharas incluso más pequeñas, pero al menos la cantidad sobrepasa el tamaño del vaso.
Hace buen sol, buena brisa, la gente camina de acá allá. Un día completamente perfecto para una salida.
—¿En dónde estudias, Nanon? — Gulf pregunta mientras engulle la cabeza de la cuchara mirándolo a él.
—Estudio cerca. ¿Conoces la Escuela Kailin?
—¡Sí! Ustedes tuvieron una competencia internacional de arquería el año pasado, ¿no? Estuvieron muy bien. Oh, pero no recuerdo haberte visto ahí.
—No quiero presumir, pero yo fui el ganador.
—¡¿Qué?!
Ahora que lo recuerda eso fue a principios del 2022 cuando el COVID aún seguía; de modo que Nanon usaba mascarilla el día del evento. Por eso no lo puede recordar.
—¡Ah! Es cierto, en esa entonces seguía el COVID. Por eso no pude reconocerte. Lo siento.
—Está bien, tranquilo.
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𝗦𝗢𝗬 𝗨𝗡 𝗦𝗔𝗡𝗧𝗜𝗧𝗢| MewGulf 🔞
Humor•Básicamente una historia estúpida con una trama estúpida, pero que seguro te hará reír. Y el romance está bonito. • ♥︎ De día es uno, de noche es otro. Gulf va a una escuela católica de varones dónde hay quiénes están por voluntad propia y quiénes...