𝐉-𝐀𝐍𝐎𝐍𝐘𝐌𝐎𝐔𝐒 ━━━ 𝗞𝗢𝗢𝗞𝗠𝗜𝗡

Capitulo I

Dedicadicatoria:

Por y para esas personas que por ser como son han sido calladas, para esas personas que alzaron la voz y hoy ya no están con nosotros, para esas personas que tienen gustos diferentes y han sido juzgados, para esas personas que al día de hoy son independientes y saben tomar sus propias desiciones, dedicado a esas personas que no han podido decirles a sus padres su verdadero sentir, a esas personas que tienen que ser «perfectos» ante el mundo y callar lo que sienten.

No dejes que el miedo te detenga.

¿Cómo se siente que te dediquen un libro? 🎈❤️

J-ANONYMOUS.

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- Papi, ¿me puedes volver a contar la historia de cómo conociste a papá?- preguntó enérgicamente el niño de cinco años de cabellos cobrizo y ojos grises, que se encontraba sentado en su pequeña cama en la hermosa cabaña a las afueras de la ciudad a la que llamaban hogar, mientras esperaba que su padre lo arropara para ir a dormir.

Ojos azules que con el pasar del tiempo han ido volviendo a tomar su brillo, se volvieron hacia el pequeño, su mirada alegre se puso un poco melancólica y una sonrisa triste se pronunciaba en su rostro y mientras volvía su mirada a la empañada ventana del cuarto del menor, observando como la nieve empezaba a caer en el exterior, empezó con su historia.

- Hace mucho, mucho, tiempo...

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|Washington DC, Estados Unidos|
Miércoles, 31 de julio de 1845, 10:30 a.m

En un pequeño campo militar llamado «Elver Montain» en los suburbios de Gwangju. Se encontraba un batallón de soldados entrenando, sus cuerpos aún con el cansancio y a pesar del sol infernal del día y el poco espacio entre los demás, trataban de mantenerse en pie, entre todos solo había una persona que se destacaba más. Lo que generaba un sentimiento de inseguridad entre los demás soldados, que miraban en el suelo el arduo enfrentamiento.

Unos ojos azules casi grisaseos mantenían su vista en en uno de sus mejores soldados. Y a su lado un hombre en traje con un portapapeles en manos que miraba con indiferencia la situación.

- Su nombre es Jeon Jungkook.- empezó el general de división a cargo del batallón, mientras señalaba con la mirada al menor.- Ha estado aquí por al menos cinco años, tiene veinticinco años de edad y es uno de nuestros mejores militares con mayor rango.- explicó, cuando el cobrizo le dió un puñetazo en el estómago a uno de los novatos mandándolo al suelo para el instante lanzar una patada hacia el otro contrincante que pensaba atacarlo por detrás al creerlo distraído teniendo el mismo destino que el soldado en el suelo.

- Ummm.- el hombre a su lado no despegó su mirada de su bloc de notas.- Tiene buena condición física.

- Claro, porque se ha vuelto fuerte.- el sargento hizo una mueca con su boca volviendo su mirada a los chicos entrenando.- Pero si lo hubiera visto hace cinco años no diría lo mismo, era muy débil, no podía defenderse, si peleaban entre ellos al segundo estaba en el suelo como un patito, muy débil.- el médico enarcó una ceja y miró al chico en el campo, el cuál se encontraba ahora quitándose sus guantes negros de las manos y ayudaba al novato a ponerse de pie.