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—Y pues ahora todos creen que me he acostado con todos esos chicos y viejos de las fotos, cosa que es falso. Jamás estaría con un viejo —finalizó su detallada explicación sobre su trabajo a sus amigos con una evidente cara de asco.

—La única cosa por la cual me siento molesto ahora mismo es porque no me dijiste nada de eso ¡Incluso fuimos varias veces a ese club! —dijo Kai con un puchero.

—Lo sé —dijo el rubio antes de suspirar —No es tan fácil, Ningie.

Jihoon, Kai y Soobin le dieron miradas comprensivas. Decidieron no tocar más el tema, Beomgyu había dejado el trabajo de nuevo un día antes del incidente, tratando de enfocarse mucho más en sus estudios.

El ansiado día de la sesión de fotos había llegado, Beomgyu estuvo ansioso, olvidando por completo todo lo que le dijeron ese día, su ánimo no iba a recaer por eso, necesitaba mantenerse lo más positivo para que todo saliera bien. Mingyu había prometido pasar por él luego de sus clases y ahí se encontraba, esperando con sus amigos.

Estando en la cafetería, todos hablaban de cosas superficiales. Kai no dejaba de recalcarle a Beomgyu que debía de ser coqueto con Mingyu, parecía estar más emocionado que él.

—Deberías maquillarte aunque sea un poco, Beom —sugirió el pelirrojo tratando de peinar el desordenado cabello de Beomgyu.

—No lo haré, de seguro allá me pondrán algo, además, ya me veo demasiado bien—respondió el rubio con seguridad, sonriendo.

—¿Qué hacen?—apareció Yeonjun, tomando asiento en la mesa con sus amigos.

—Ningie está preparando a Beomgyu para la sesión de hoy—respondió Soobin con sus ojos pegados en el celular, de seguro estaba jugando.

—¿Sesión de qué?—preguntó extrañado el pelinegro.

—De fotos, duh—le respondió con obviedad Jihoon.

Yeonjun seguía sin entender, todos sus amigos sabían sobre eso menos él, sintiéndose un poco fuera de lugar.

—Ya está aquí —dijo con emoción el rubio leyendo el reciente mensaje en su celular.

—¿Ya te vas?—preguntó Yeonjun.

Beomgyu simplemente asintió repetidas veces, tomando todas sus cosas y despidiéndose con la mano de todos sus amigos.

—El chico con el que estaba hace días es fotógrafo, lo contrató para trabajar con él como su modelo —explicó Kai al ver la expresión de confusión que aún estaba en el rostro de Yeonjun.

Yeonjun sintió cómo su estómago se revolvía, Beomgyu no le había contado nada al respecto. Pero había algo que lo estaba molestando aún más, y era ese chico fotógrafo, ¿en dónde lo conoció? Un chico así no sale de la nada ofreciendo ese tipo de trabajos. Necesitaba aclarar su mente antes de que sea demasiado tarde.

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Beomgyu se miraba en el espejo frente a él, la ropa que llevaba puesta era definitivamente algo que no podría pagar con su propio dinero, el maquillaje era sutil, porque según Mingyu, la sesión era para una marca de ropa en la que querían demostrar la belleza natural, así que no iba demasiado cargado. Salió de la pequeña habitación en la que se estaba preparando, sintiéndose un poco fuera de lugar, jamás había modelado para nadie, incluso sus selfies salían movidas. Al salir se encontró con Mingyu junto a otras personas preparando el lugar, respiró hondo y se acercó.

—Estoy listo—dijo con timidez al más alto, éste se giró a verlo con una gran sonrisa.

—Perfecto—le dijo, guiándolo hacia donde tenía que pararse—No será tan difícil, solo hazme caso y saldrán perfectas.

𝙏𝙝𝙚 𝙘𝙡𝙪𝙗 𝙗𝙤𝙮 | YeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora