Ente el escepticismo y la maravilla

Capítulo 1 - ¿El extraño traje mágico? Parte 1

Era un día más. Los rayos del sol se filtraban a través de las delgadas cortinas, desvelando lentamente el interior de la extraña casa. El lugar estaba desorganizado, con objetos dispersos por todas partes, como si cada uno contuviera una historia propia...

En medio de todo este caos. Destacaba Jack durmiendo sobre una cama bastante cómoda en una de las esquinas de la habitación. Era un hombre normal, con pelo castaño, una altura promedio, ojos cafés, con poca complexión física. Pero a diferencia de muchos. Él tenía millones en su cuenta de banco, y todo era gracias a una mentira.

El trabajo de Jack no era nada ilegal o extraño, claro, en el sentido de no es algo que solo él pudiera hacer, Jack era un Investigador Paranormal, que a base de tomar los casos más arriesgados e inexplicables logro formarse una reputación y prestigioso similar o incluso mayor que la famosa pareja Warren, pero a diferencia de muchos otros investigadores. Él era y es un gran escéptico, nunca creyó en lo paranormal o en la magia. Y siempre lograba encontrar una explicación racional, pero decepcionante a cada caso que tomaba. Desde un objeto supuestamente maldito que en realidad todo lo que causaba era gracias a que un terco Gato lo había tomado como hogar. Hasta complejos engaños en busca de fama. Pero en cualquier caso de puertas para afuera decidía darle la explicación paranormal.

Todo esto lo hacía pura y duramente por el dinero, había empezado este trabajo como un simple actor de una televisora para ganarse la vida o ser un prestigioso investigador paranormal que ha vendido las historias de sus casos por miles de millones de dólares. Aunque siempre se ha sentido mal con mentirle a tanta gente que lo respeta y lo ama. Lo único que lo reconforta es que se dice a sí mismo. –"yo no pudo ser el primero o el ultimo, incluso los Warren pudieron haber hecho lo mismo". Aunque en contadas ocasiones logra calmar su conciencia por completo.

Pero... aun así, seguía y sigue en su trabajo.

La casa en la que estaba no era, por mucho, la mejor que tenía, era bastante pequeña en comparación. Pero era donde todo había empezado y de alguna manera le tenía un poco de cariño.

Antes que siquiera el despertador sonara y despertara a Jack, unos extraños toquidos se escuchaban lejos. Jack se despertó gracias a que la persona que estaba detrás golpeaba cada vez más fuerte la débil puerta. Y antes de arriesgarse de que se rompiera. Jack se apresuró a vestirse y abrir la dichosa puerta.

-¡Ya voy!- gritaba mientras se vestía. Cuando estaba vestido decentemente, bajo rápidamente las escaleras que con cada paso rechinaban. Sabía que solo alguien sería lo suficientemente desesperado para estar ahí afuera, además de que su forma de tocar la puerta era única.

No era otra persona que su amigo Ethan, desde hace unos años era su ayudante en el trabajo. Gracias a esto Ethan era también bastante famoso y adinerado, aunque a diferencia de Jake, Ethan nunca lo hizo por el dinero, sino por la aventura. Los dos tenían un importante caso ese día, no era porque iban a ayudar a alguna figura publica, al presidente o similar, simplemente era el primer trabajo en donde directamente les pagarían, y el cliente les había ofrecido 3 millones de dólares por el trabajo. No sabían mucho sobre el cliente o de que se trataba pero tal oportunidad no la desperdiciarían.

Jack abrió la puerta y rápidamente Ethan entro a la casa

-¿Ya estás listo? - preguntó Ethan, bastante ansioso.

Tranquilo - respondió Jack, aún medio dormido -, todavía faltan unas horas para reunirnos con el cliente. Sé que en este caso nos pagarán mucho dinero, pero no es para ponerse tan nerviosos.

-Hemos trabajado juntos desde hace lustros y todavía no logro entender por completo como es que siempre estas tan calmado – Ethan comento, bastante más calmado mientras se reía un poco.

Jack acompañó a su amigo con una pequeña carcajada mientras terminaba de arreglarse. Ethan observaba la recepción de la vieja casa y la recordaba bastante diferente, pero entendía por qué Jack llamaba "hogar" a esa pequeña casita. Aun así, nunca perdía una oportunidad de molestar a su amigo.

- No puedo entender cómo tienes miles de millones de dólares, cientos de propiedades, autos, ¡barcos!, e incluso pagas los impuestos de todo lo que tienes y sigues viviendo en este lugar - dijo burlescamente.

- Yo le veo un gran encanto a este lugar - respondió Jack en tono de burla, listo para irse -. Ya que llegaste tan temprano, es hora de ir a Silents Hills. Podemos desayunar por el camino y llegar temprano con el cliente.

- No sé tú, Jack, pero que el lugar a donde vamos se llame "Silents Hills" no me da buena espina - comentó Ethan algo más preocupado.

- Tranquilízate un poco, no estamos en un videojuego. Además, no somos los "héroes" a los cuales les tenderían una trampa. Además, no es un pueblo, es una ciudad. Solo es un trabajo como cualquier otro - respondió mientras buscaba las llaves del auto.

- Sabes, tal vez tengas razón - dijo Ethan un poco más calmado-. Ahora súbete al auto. Conozco un restaurante muy bueno en el camino - afirmó Jack.

Los dos se subieron al auto y se embarcaron a la ciudad de "Silents Hills" aunque su nombre no le inspira confianza a nadie que alguna vez haya jugado o escuchado de los videojuegos de terror, era una de las ciudades más grandes y modernas que se habían construido, además de haberse construido en solo 10 años, su nombre era gracias a que el empresario que financio la construcción de la ciudad era gran fan de Silent Hill, era una ciudad bastante segura y "normal" en lo general.

El camino de Jack e Ethan no duro mas de una hora y media, desayunaron en el restaurante favorito de Jack y llegaron a la dirección donde se deberían ver con su cliente, no sabían mucho sobre ella además de que era una millonaria excéntrica, o al menos era lo único que decía el internet. parecía tener algún problema paranormal bastante importante. Aun así se negó a dar algún detalle por teléfono, además de que parecía bastante ansiosa y necesitaba que llegaran lo más rápido posible. Cuando se vieran por primera vez en persona podrían saber más del caso y que es lo que tendrían que resolver.

Jack ya se estaba imaginando distintas soluciones lógicas a los problemas mas comunes por los que alguna vez las personas lo habían llamado, no debería ser tan difícil. Solo resolverían el supuesto problema paranormal que la mayoría de las veces era causado por un animal que se supo esconder bastante bien, algún engaño muy elaborado e incluso algunos humos "mágicos" por su composición química.

Ethan por su parte estaba pensando en que extraño misterio deberían resolver y que extraña aventura tendrían esta vez, esta vez sabia que seria algo especial, y además de eso esperaba que fuera algo bastante interesante y divertido.

Ninguno de los dos estaba preocupado por lo que podría pasar, solo era un caso como cualquier otro. Pero claramente no se imaginaban lo que en verdad les esperaba...