Un amor efímero

CAPÍTULO II. El primer encuentro

- Mierda. ¿Estás bien? - Me pregunta el chico acercándose a mí para ayudarme a levantarme.

- Si, si, no es nada solo un pequeño rasguño. - Digo aceptando su ayuda y poniendo una mueca al sentir el escozor de la herida. El chico debe tener mi edad o alrededor, es bastante atractivo para que mentir, tiene el pelo moreno y unos ojos azul verdosos increíbles. Tiene la tez morena y se pueden distinguir algunas pecas en su cara. Cuando me miro la pierna derecha veo que tengo un poco de sangre ya que me la he raspado al caerme.

- Eso no tiene muy buena pinta. Debe de dolerte un poco. - Dice mirando la herida y poniendo una mueca de dolor.

- No pasa nada de verdad, estoy bien, debería de haber ido más despacio y fijándome más en lo que tenía delante y no a los lados. Lo siento.

- A mi no me tienes que pedir perdón, no soy yo el que está sangrando de los dos. - Dice lanzándome una sonrisa reconfortante. Lo que dice me saca una pequeña sonrisa. - Soy Lucas Wilson por cierto.

- Yo soy Valeria Jones pero prefiero que me llamen Val.

- Entonces encantado de conocerte Val. - Dice haciendo especial énfasis en el apodo. Vuelvo a sonreír y casi me olvido de la herida cuando vuelvo a sentir una punzada de dolor en la rodilla y pongo una mueca de dolor.

Voy a recoger la bici cuando Lucas me intercepta y la recoge por mi. Me quito el casco y me giro para ver dónde están Enzo y Diego cuando los veo jugando con un niño. Al ver mi cara de confusión Lucas habla a mi lado.

- Oh, él es mi hermano pequeño, Hugo. Es de la edad de Enzo, son muy buenos amigos. ¿Tu no eres de por aquí verdad? - Me pregunta con una sonrisa cálida mientras tomamos el rumbo para ir a casa de mis tíos.

- No, he venido a pasar este mes aquí para cuidar a mis primos porque sus padres tienen asuntos de trabajo. - Digo yo mientras miro a Enzo y Diego.

- Pues si quieres podemos quedar algún día para que los chicos jueguen, se lo pasan muy bien juntos.

- Claro, eso sería genial. Aunque yo no conozco muy bien esto, he venido solo un par de veces antes.

- Entonces podemos quedar y te enseño un poco el pueblo.

- Vale, por mi perfecto, solo he visto el barrio y ya me ha encantado, no quiero ni pensar en lo bonito que será el resto del pueblo.

- Eso es porque estás en el mejor barrio del pueblo. - Dice con tono de broma. Los dos nos reímos y empezamos a caminar con los peques por detrás nuestro en dirección a la casa de mis tíos.

Durante el camino hablamos de muchas cosas, me entero de que tiene un año más que yo y nos hacemos las típicas preguntas del color favorito, animal favorito, cosas que nos gustan hacer, cantante o grupo de música favorito... y así conseguimos conocernos un poco. Su color favorito es el gris, aunque tenga un perro de la raza labrador su animal favorito es el caballo ya que al parecer también hace equitación y tiene caballos. Por lo que me ha dicho le gusta ir a correr, leer, ver los atardeceres y amaneceres, escuchar música... y su grupo de música favorito es Morat.

Tras la conversación que hemos tenido me he dado cuenta de todo lo que tenemos en común y que no podía haber encontrado una persona mejor para que sea mi amiga y me haga compañía y de guía durante este mes.

Por fin llegamos a la casa y me giro para despedirme de Lucas y darle las gracias por llevar la bici en mi lugar.

- Gracias por ayudarme con la bici. - Le digo con una sonrisa cálida agarrando la bici.

- No es nada. - Responde con otra sonrisa. Nos quedamos en silencio sin saber que decir y tras unos segundos decido que es hora de entrar a casa, pero cuando voy a despedirme el habla. - ¿Me das tu número de teléfono para poder quedar contigo para que se junten los chicos? - Pregunta el finalmente.